Seduction games

Capitulo 24

AMALIA

Me desperté con un terrible dolor de cabeza y los ojos hinchados de tanto llorar. Anoche cuando llegué no pude evitar romper en llanto hasta quedarme dormida.

Aún no puedo creer nada de lo que pasó, siento que es un mal chiste que no acaba, como esos malos sueños de los que no te puedes despertar, realmente no entiendo.

O quizás sí, no es muy complicado, él siempre estuvo en una relación y está comprometido.

Simple.

Me levanto y me doy una larga ducha tratando de que todo el malestar que tengo encima mágicamente desaparezca de mi o al menos me relaje un poco.

Termino y me visto, necesito comer algo.

Busco mi teléfono y tengo cantidad de llamadas y mensajes de Henry, que irónico ahora si me busca.

Maldito bastardo.

Bajo a la cocina a poner la cafetera cuando el timbre suena y el miedo me invade pensando que podría ser él y no quiero verlo.

Vuelven a tocar y decido abrir, en definitiva, no soy yo la que actuó mal no debería querer esconderme. Mi sorpresa y alivio cuando abro es notorio al ver a James.

-Traje Muffins para desayunar-Me mira y sonríe- Pensé que después de lo de anoche querrías algo de compañía, quizás.

Yo lo miro y me lanzo sobre el abrazándolo, quizás no lo sepa, pero me siento protegida por él.

-Gracias James, pasa justo estaba preparando café- El entra y me da el paquete de Muffins.

Nos dirigimos a la cocina mientras voy preparando todo para desayunar.

-Te ves horrible Amalia- Abro los ojos ante lo que dice.

-Pues ¿Gracias? - Ríe.

-Perdón, me expresé mal, quiero decir que veo que has pasado una mala noche- Lo miro- ¿Henry te busco?

-Pésima, creo que me quede dormida de tanto llorar y no me vino a buscar, pero tengo llamadas y mensajes que no pienso contestar.

-Pero quieres hacerlo- Vuelvo a mirarlo.

-Es complicado, no se trata de querer se trata de poder y ahora no puedo ni escucharlo- Suspiro- Todo el tiempo me mintió y no me dio la posibilidad de elegir.

-De haberlo sabido hubieras estado con él? - Pregunta.

-No creo, no lo sé. En definitiva, no me dio esa opción- El asiente.

-De verdad te enamoraste de él?

-Si, como una estúpida-Mis ojos se empañan y sé que el llanto es inevitable.

-Ey, ven aquí- Me abraza- No debes llorar por alguien que no lo merece, pero si eso te hace sentir mejor entonces hazlo yo me quedaré contigo lo que sea necesario cuidándote.

-Gracias- Apenas puedo decir.

Nos quedamos un rato más así hasta que estoy más calmada y el café está listo.

El desayuno transcurre entre charlas sobre la vida de ambos y risas, James es muy gracioso y me gusta ver esa faceta suya ya que siempre lo vi como el serio amigo de mi hermano.

Ese momento fue como una bocanada de aire porque me siento rota completamente.

Cuando terminamos él se ofrece a lavar las tazas y yo subo a arreglarme un poco ya que me invito a que vayamos a caminar un rato, él dijo que eso me va a despejar un poco la cabeza.

Caminamos un largo rato, llegamos a Central Park y buscamos un lugar donde sentarnos. El otoño ya comienza a florecer y junto con el invierno son mis épocas favoritas del año.

Por momentos hablamos y por momentos me quedo en silencio y él lo entiende dándome mi espacio y no forzándome a hablar. Me invita a almorzar, pero le digo que ya quiero volver a casa pero que podemos pedir algo y comer allí.

El acepta y emprendemos el camino de regreso a casa. La pregunta de porque no le cuento a Thomas lo que Henry me hizo se hace presente, no sé qué decirle, ni siquiera lo pensé.

Pero supongo que si no lo hago es porque no quiero que una amistad de toda la vida se arruine porque sé que Thomas lo va a matar si lo sabe y si bien toda la culpa de haberme mentido es suya, también es cierto que fue mi decisión haberme involucrado con él y debo ser responsable por ello.

Además, ya no quiero más problemas y contarlo no solucionaría nada, por el contrario, sería agregar un problema más.

Ahora la realidad es que debo olvidarme de él, no hay otras alternativas más que esa.

Llegamos y James pide comida mexicana, mientras esperamos vemos un capítulo de "The Witcher", yo no soy muy fan de la ciencia ficción, pero él me convence diciendo que está muy buena.

Y para mi sorpresa si lo está, me gustó mucho, sobre todo el actor principal.

El timbre suena y voy a abrir con la billetera para pagar la comida, pero me quedo paralizada cuando abro la puerta.

-Puedo pasar? - Me pide.

-No- Digo sin pensar.

-Amalia por favor, necesito hablar contigo- Su voz está llena de angustia.

-Pero yo no Henry, que no te dije anoche que me dejes en paz. ¿Cuánto más rota me quieres ver? -Inevitablemente comienzo a llorar, él quiere acercarse, pero yo me alejó y eso es suficiente para que James se acerque.

-Qué haces aquí? - Pregunta con el ceño fruncido y todo su cuerpo tenso.

-Vine a ver como estaba Amalia, Henry no creo que sea buena idea que estés aquí- James trata de tranquilizarlo, pero parece ser peor.

-Ya veo, ¿Pero si es buena idea que tu si estés aquí y te aproveches verdad?

-De que estas hablando? - Decimos los dos al mismo tiempo.

-Que no soy idiota- Grita-Ya me di cuenta de tu jugada, vas a hacerle creer que eres su amigo y la vas a apoyar cuando en realidad estás buscando meterte en su cama.

-Estas totalmente demente- Le digo, James en cambio lo mira totalmente furioso.

-Y si quiera llevarla a la cama cual sería el problema? - Dice James a lo que yo lo miro incrédula- No tiene que rendirle cuentas a nadie y tú eres el menos indicado para hacerle reclamos no te parece Henry?

-Por dios Amalia como no te das cuenta! Se quiere sacar las ganas contigo- Escupe con odio y yo no puedo creerlo-Nunca te voy a dejar tenerla entendiste James.

Sin pensarlo mi mano va directo a su mejilla en un golpe que me duele hasta a mí.

-Entonces debo ser demasiado estúpida porque tampoco me di cuenta que tú también te querías sacar las ganas conmigo- Me mira estático en su lugar y rompe a llorar, jamás lo vi así y algo muy dentro mío se rompe por él.

-Perdón, yo... yo soy un imbécil. Perdón por haberte lastimado no era mi intención, yo te extraño tanto Amalia- Me abraza sin dejar de llorar- Mi vida fue un infierno estos días, te necesito tanto.

Yo estoy quieta sin decir nada, porque en realidad no hay nada que pueda decir ante esta situación, sé que debemos hablar, pero no así.

James lo separa de mí y me dice que lo va a acompañar hasta su departamento.

Yo también lo necesito y también lo extraño, más de lo que debería, pero el ya eligió y no fue a mí.

Es momento que comience a hacer el duelo por esta fallida relación y siga adelante.

Tengo que ser fuerte y decirle adiós a Henry...