-¡Tú! –Le gritaron a Tad por detrás- Oh, qué onda, Azerou.
-Hola, Deon –dijo Azerou.
-¿Ya lograste que este tipo se disculpe por haber golpeado a la querida, dulce, dulce Vega? –preguntó Deon.
-Soy Tad –le dijo Tad un poco desesperado- Y no la golpee, fue un accidente.
Azerou miro a Tad como regañándolo. Azerou era un chico de veinte años, pero actuaba como un padre. Tad suspiro, y miro a Deon.
-Está bien, me disculpo –dijo Tad relajando sus hombros.
-Pero no me lo digas a mí, dile a la querida, inocente, dulce, dulce Vega –dijo Deon.
-Bien, ¿Dónde está?
-Aquí estoy –se escuchó la voz de una pequeña niña y Tad bajo la mirada.
-Oh, hola ¿Cuánto llevas ahí? –dijo Tad inclinándose y hablando dulcemente.
-Lo suficiente para escuchar tu disculpa, te perdono, Tad –dijo Vega abrazándolo.
Vega era muy pequeña, y Tad muy alto. Así que Vega le estaba abrazando la cintura nada más.
-Me alegra que se hayan arreglado, talvez podamos ser amigos todos, Tad, Deon, Vega y Yo. ¿Pero que creer Vega? –le dijo Azerou dulcemente.
-¿Qué? –dijo la niña levantando la mirada.
-Ya acabo el ensayo de Cadenas, así que nos tenemos que ir –le dijo Azerou cargándola- Deon, tú te encargaras de los nuevas Cadenas sub 25 –le dijo caminando a la salida.
-¿¡Qué?! ¡¿Pero porque yo?! –le reclamo Deon muy tarde.
Tad le dio palmaditas a Deon.
-Voy por mis amigos –dijo Tad.
Tad fue por Miltara y Harris. Luego volvió con Deon.
-Aquí estamos Deon.
-Entonces enséñanos, maestro –bromeo Harris con su gran sonrisa de siempre.
Deon asintió, parecía asustado, busco a alguien entre los chicos y chicas que estaban esparcidos en el gimnasio entrenado, y Deon soltó una risa nerviosa.
-Esperen aquí. Tomen un palo, o algo así –dijo nerviosamente mientras se iba.
Deon salió del gimnasio corriendo y saludo a algunas chicas coquetamente. Pero rápidamente volvió a su estado nervioso. Camino un poco cuando choco con alguien. Cormac.
-¡Cormac! El chico que quería ver –dijo Deon quitándose su pelo negro de la cara.
-¿Qué quieres, Deon? –le pregunto Cormac apartándolo de él.
-Quiero que tú me ayudes con unos Cadenas.
-¿Los nuevos? Olvídalo.
-¡Por favor, cuate! Te lo ruego –dijo Deon casi sudando.
Cormac rodo los ojos.
-¿Y que gano yo? –le dijo algo así como enojado.
-Pues… -pensó Deon- le diré a Azerou lo bueno que eres como Fuego entrenando a Cadenas –le dijo Deon sonriendo como si hubiera tocado un punto especial en Cormac.
-¿Por qué querría que le dijeras eso a Azerou? –le pregunto Cormac arqueando una ceja.
-Creo que tú sabes –dijo Deon con una sonrisa de malicia.
Cormac suspiro y rodo los ojos una vez más.
-Bien –dijo mirando a Deon a los ojos.
Deon y Cormac entraron al gimnasio, directo hacia Tad, Miltara y Harris.
-Genial ¿Por qué trajiste al cascarrabias? –pregunto Miltara poniendo su mano en su cintura.
-El me ayudara en la clase de hoy –explico Deon.
-Va a ser la única clase en la que me veas, considérate afortunada –le dijo Cormac defensivamente con una cara seria, parándose cerca de ella.
-Hey estas demasiado cerca para mi gusto –le dijo Tad enojado.
-Claro –dijo Cormac apartándose.
-Pelearan con palos. Soy Fuego así que no recuerdo ni como mierda se usan estos –dijo Deon riendo un poco- así que… peleen como puedan. La rubia con el novio y el de ojos verdes con Cormac.
Tad y Miltara se pusieron enfrente de ellos.
-Osea, solo te tengo que golpear como si fueras una piñata –dijo Miltara.
-¿Te puedo preguntar algo? ¿Por qué tú eres rubia y Capri castaña? –pregunto Tad en forma de distracción.
Miltara se puso firme.
-Oh, pues yo saque los genes de mi mama, rubia y ojos verdes cafés. Capri salió más como mi padre, ojos y pelo café –dijo Miltara.
Tad tumbo a Miltara con su palo.
-Rudo –dijo Miltara parándose del suelo.
Harris y Cormac estaban a unos metros de ellos, aunque no habían empezado a pelear todavía.
-No entiendo porque escogiste a Jana como novia –le dijo Cormac- Es toda una…
Cormac no termino lo que dijo porque Harris lo intento golpear en la cara con el palo pero lo esquivo.
-Wow –dijo Cormac riendo- Pero en serio ¿Jana? Arco está mucho más bonita.
-No me guio por el físico –dijo Harris intentando golpearlo de nuevo.
-Ah claro que sí. Tú eres un mujeriego torpe, el rubio pequeño que anda con ustedes es un mujeriego de los jugadores –dijo Cormac.
-Sabes mucho de hombres –dijo Harris agitado tratando de golpearlo de nuevo.
-Más de lo que crees –dijo Cormac esquivando otro golpe de Harris.
-Oye ya en serio ¿quieres seguir platicando o vas a pelear? –le pregunto Harris poniéndose firme.
-¿Quieres que pelee? –le pregunto Cormac.
-Claro –dijo Harris.
Cormac tomo su palo y empezó a golpear a Harris sin aviso. En el estómago, espalada, piernas, brazos pero nunca en la cara. Hasta que Harris intento esquivarla y por accidente Cormac lo golpeo en la cara.
Harris cayó al suelo sobre su trasero. Cormac tiro su palo al suelo y agarro levanto a Harris tomándolo del brazo casi agresivamente.
Cormac puso sus manos en las mejillas de Harris, y examino su cara de cerca. Harris se sonrojo por la cercanía de sus caras y abrió los ojos como platos.
-Uhmm ¿Qué haces? –le pregunto Harris confundido.
-Quiero ver si no te deje un araño o algo así. Si Jana te ve un rasguño lo más seguro es que me mate –dijo Cormac seriamente pasando sus ojos por la cara de Harris lentamente.
-¡Hola! ¿Que? –pregunto una voz femenina a uso metros de ellos.
Cormac soltó a Harris y lo sujeto del cuello de su camisa y lo elevo débilmente del suelo.
-Mira Jana, como nuevo –dijo Cormac seriamente y luego soltando a Harris, causando que casi se cayera.
Cormac camino aceleradamente a la salida del gimnasio y la golpeo a propósito con su hombro al pasar a su lado.
Jana camino hacia Harris desconcertada.
-¿Qué fue eso? –pregunto.
-No lo sé, pero ese chico necesita ayuda –dijo Harris sobándose el cuello.
-Déjalo, es Cormac –le dijo Jana- ¿Estas bien?
-Soy todo un chico clásico así que te contestare que estoy mejor ahora que estas aquí –le contesto Harris dándole su primer beso real.
Aunque fue un corto. Ambos pudieron sentir todo ese fuego y chispas y con eso, ambos estaban más que felices.
-¡Listo, el entrenamiento termino! –Grito el General- Los veo pasado mañana.
Jana tomo la mano de Harris y salieron de ahí.
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The Mortal Experiment
Science FictionElla vive en una ciudad gobernada por 6 presidentes anónimos, que obligan a los ciudadanos a vestirse de cierta manera y peinarse de cierta manera. Cada año la generación que cumpla 16 años tiene que participar en el Sufragio, donde ciertas persona...