Capitulo 29 - ¿Quieres estar con alguien como yo?

45 4 0
                                    

-"Tengo el trabajo perfecto para ti" -murmuro Harris- Estúpido.

Harris estaba caminando hacia el gimnasio. Su gran trabajo era limpiar después de las peleas y entrenamientos. Al abrir la puerta salió el presentador de peleas, en otras palabras, Garcach.

-Oh muy bien, tú debes ser nuevo, hay sangre por todos lados. Suerte -le dijo el hombre de baja estatura.

Harris lo miro confundido, y el señor se fue. Él entro al gimnasio, y activo su optimismo, mostrando su sonrisa resplandeciente que casi se le borra cuando vio a alguien ahí.

Cormac.

-Genial, tú eres el nuevo -dijo Cormac- me dijeron que ya no tendría que limpiar esta masacre yo solo, me alegre, pero ahora que eres tú me gustaría volver a limpiar solo.

-Yo estoy alegre de verte también -dijo Harris mostrándole su sonrisa.

Era muy difícil molestar a Harris, pero Cormac de alguna forma rompía su paz interior.

-Y... ¿Quién más trabajaba en esto antes? -pregunto Harris tomando el trapeador mojado y empezando a limpiar la sangre del piso.

-Arco -dijo Cormac quitándose su flequillo de la cara- Pero gracias a Jana, ahora está en silla de ruedas y tú estas aquí -dijo tomando un trapo.

-¿Porque culpas a Jana de todo? -le pregunto Harris molesto.

-Si Jana hubiera dicho que estaban haciendo una pelea sin asistencia médica nada de esto hubiera pasado -le dijo Cormac.

Harris no le contesto nada, simplemente continuo barriendo.

-Yo era amigo de Jana ¿sabes? No creas que la odio sin razón -dijo Cormac mientras limpiaba las gradas.

-No me importa -dijo Harris.

-Ella solía tener el pelo largo, y usaba lentes -dijo Cormac.

Harris simplemente asintió.

-Y vaya que era un perr...

Cormac no pudo terminar su frase porque Harris lo tomo del cuello de su camisa y lo golpeo contra las gradas.

-¿Eso es todo? Si quieres golpearme hazlo -le dijo Cormac.

Harris apretó los dientes pero Cormac lo lanzo al suelo. Pare evitar que Harris forcejeara se sentó a horcajadas sobre él y tomo de las muñecas.

Harris tenía el ceño fruncido, pero se enojaba como un bebe, su rostro estaba rojo, y se veía muy adorable.

-Eres muy débil para ser un hombre -se burló Cormac acercando su cara a la de él.

Harris estaba más enojado con esa cercanía, y más sonrojado. Ojos verde gris contra ojos verde neon.

-Vaya, ¿estoy causado algo en ti sentándome así? Pensé que eras gay, pero no demasiado -rio Cormac.

Cormac lo golpeo en el estómago y se paró. Ayudo a Harris a pararse y le dio el trapeador.

***

Farah entro al cuarto de hospital de Caliban. Caliban estaba acostado hablando con Eber que estaba sentado en la cama.

-¡Ah! ¿Tú que haces aquí? -le pregunto Eber enojado.

-¡Escuche que estabas aquí, chico rudo! -Le dijo Farah- ¿Te sientes mejor, chico rubio? -le pregunto Farah aun con su energía.

-Mejor, gracias -murmuro Caliban- chica rara...

-¿¡Y qué hacían?! -les pregunto Farah sentándose a lado de Eber.

-Hablábamos de cosas de hombres -dijo Eber enojado.

-Ah ¿Por qué tan enojado, chico rudo? -le pregunto Farah frotando su cabeza contra la mejilla de Eber, causando que él se hiciera a un lado.

La puerta se abrió revelando a una chica en silla de ruedas y Jana.

-Caliban, ya te puedes ir -le dijo Arco sonriendo.

-Genial -dijo Caliban bajándose lentamente de la cama.

Eber noto que Farah al momento de ver a Arco se puso... seria.

-¡Hola, Jana! -dijo Farah- Hola... Arco -dijo seriamente.

-Hola -le dijeron ambas con una sonrisa.

Arco salió del cuarto, seguida de Caliban y Farah, y Eber salio al último con Jana.

-Oye -le susurro Eber a Jana- ¿Farah tiene algún problema con Arco?

-No me preguntes a mí -le dijo Jana.

-¿A quién le pregunto? -pregunto Eber.

-No a mí -le dijo Jana.

A Eber no le importaba en lo más mínimo los problemas que Farah tuviera con Arco, pero ya que Farah odiaba a Arco ¿Qué mejor que empezar a juntarse con Arco para alejar a Farah?

Eber camino hacia Arco pero justo antes de hablarle Farah lo abrazo por detrás.

-¡Eres súper adorable, chico rudo! -le dijo Farah.

-¡Chica, suéltame! -le ordeno Eber gritando.

Jana tomo a Farah de la cintura y la jalo.

-¡Arco! -le grito Eber desesperado.

Arco dio vuelta a su silla de ruedas.

-¿Qué pasa? -le pregunto.

Eber corrió hacia ella.

-¿Quieres que te acompañe a algún lado? ¡Te puedo acompañar a todos lados! -le dijo él.

-Ah.... claro, acompáñame ¿pero solo si enserio quieres? -le pregunto Arco levemente sonrojada.

-Claro, vamos -le dijo Eber preocupado.

Farah observo en los brazos de Jana a Eber y Arco irse.

-¡Adiós, chico rudo! -le grito Farah algo triste.

<<Pobre Farah. Esto solo alimentara su odio por Arco>> pensó Jana.

-Mi mejor amigo me acaba de dejar -dijo Caliban parándose enfrente de ellas.

-Bueno, estamos nosotros tres -dijo Jana aun con Farah en brazos- ¿Quieren ver cómo le va a Hannah en la cocina?

-¿Hannah en la cocina? ¡Claro! -dijo Caliban riendo.

The Mortal ExperimentDonde viven las historias. Descúbrelo ahora