Amor por el Proyecto. (Jelsa, Kristanna, Mericcup, Eugenzel)

Capítulo 17.

POV Elsa.

-Y es por eso el que debemos de ir.

Una bolsa de Ruffles descansaba en mi regazo mientras miraba a mis amigos, que estaban atentos a la plática del por qué "deberíamos ir a una fiesta".

-No creo que sea algo muy maduro de nuestra parte -comentó Hiccup, ¡al fin alguien que estaba de acuerdo conmigo!

Todos estaban sentados alrededor de la mesa enfundados con la pijama y nuestros cabellos alborotados.

-¿Por qué no? Es algo maduro.

-¿Maduro? -pregunté yo, con una pizca de ironía.

-Es domingo, mañana tendremos clases, ¿y quieres ir a una fiesta en la noche?

-¿Por qué no? -volvió a repetir al peliblanco que había apoyado sus manos en la mesa, mirándonos a todos con detenimiento.

-Los bebés -señaló Rapunzel-. Estamos en un proyecto de maternidad, no creo que los padres se vayan a una fiesta al primer fin de semana.

-Sólo son de plástico -se quejó-. ¡Ya sé! Podemos quedarnos en la fiesta unas dos horas, después regresamos y continuamos como si no hubiéramos ido a ningún lado.

-¿Por qué tanta insistencia a ir a una fiesta, Frost? -Kristoff se cruzó de hombros, mirándolo con una ceja arcada.

Él suspiró, un poco abatido.

-¿Conocen a la chica fea de primer grado? -les preguntó a ellos, y nosotras nos volteamos a ver confusas-. Es la primera fiesta organizada por uno de primer grado en el año, necesito saber cómo será.

-¿Un domingo?

-Según leí en el periódico de la escuela, ella quiere que sea recordable.

-Me niego -sacudí la cabeza depositando la bolsa vacía en la mesa.

-¿Qué? -automáticamente Jack giró la cabeza hacia mí-. Por qué?

-Es irresponsable de nuestra parte.

-Ya sé -dijo él un poco ansioso-. Dos horas, sólo estaremos dos horas ahí -ofreció.

Yo suspiré hundiéndome un poco más en mi asiento, haciendo una mueca mientras vacilaba sobre la mirada expectante de mis amigos.

-Las odio, ¿saben? -comenté sentándome en la cama de Anna, logrando que el colchón de hundiera por mi peso.

Varias prendas de ropa se encontraban esparcidas a lo largo de la cama. Anna y Rapunzel se encontraban escogiendo algunas opciones que "nos sentarían bien". Mérida se encontraba sentada en el suelo, entretenida en su celular.
Al final me habían obligado a ceder a la idea de Jack. Sólo serían dos horas, ¿qué cosa podría pasar en dos horas?
Al parecer los chicos se encontraban emocionados por la razón que había dado Jack en la mañana. Aún mi cabello parecía un lindo nido de pájaros y aún la pijama cubría mi cuerpo, no tenía ninguna intención de arreglarme para nada.

-¿Prefieren vestido, pantalón o falda? -preguntó Anna, mirándonos expectantes a Mérida y a mí.

-Pantalón -respondió la pelirroja sin apartar la mirada de su celular, mientras escribía sobre la pantalla rápidamente.