Capítulo 30.

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POV Rapunzel.

Por los pasillos llenos de alumnos pasaban ocho chicos curiosamente vestidos de negro, claro, los chicos, mis amigas y yo. Por alguna razón estúpida acordamos vestirnos todos de negros, y aquí nos tenían. Parecíamos la mafia de negro, claro, con bebés.
Después de haber quitado todo lo que Ester había echo, consolar a Elsa y Anna. Todos juramos masacrar a Ester. Pero poco a poco. Todos se nos quedaban viendo y yo sólo podía reírme al ver de reojo como los chicos fulminaban con la mirada a aquellos que se atrevían a posarla en nosotros.

-¿Cómo le haremos? -preguntó Anna, aunque habíamos dicho el "plan" como dos mil veces y Anna seguía preguntando.

-Haré como si nada hubiera pasado -dijo Elsa.

-Y para empezar, le vaciaremos el casillero y esconderemos su mochila en... ¿en dónde? -Voltee a ver a Mérida y ella nos miró a todos por separado.

-Piensen en algún lugar en donde no vaya nadie y donde no buscaría. ¿Ya les he dicho que me parece una venganza que harían unos niños de preescolar?

-Ya lo has dicho. Aunque a todos nos parezca lo mismo.

-¡Pero entiendan! Poco a poco, ahora empezamos con algo inofensivo.

-¿En la biblioteca? -preguntó Jack, harto de que ninguno pusiera atención.

De alguna forma Jack y Elsa en tan poco tiempo se habían unido más, él toda la noche cuido de ella.
Serían muy buena pareja. Pero eran demasiado tercos para admitir que se gustaban, o para perder el orgullo y decírselo a la cara.

-No, sería muy obvio. En las películas casi siempre acaban en la biblioteca de la escuela.

-Esperen... -Se detuvo y todos giramos a verle-. ¿No sería muy malo hacer eso? Pobre chica...

Todos bufamos y rodamos los ojos.

-Es una venganza que harían los niños de preescolar. ¿Crees qué le va a afectar en algo?

Sólo Eugene se comportaba como una chica o peor que una cuando se trataba de momentos importantes. ¿Cómo es que me gusta?
Esperen... yo no he dicho nada.

-Amigo. -Jack se acercó a él lo suficiente para poner una mano sobre su hombro-. Es una zorra.

-Vocabulario, Jack -dijo Elsa, riñéndole.

-Lo siento -susurró y seguimos caminando como al principio.

Y Elsa sería el hombre de la relación.

-Bien, todos vamos a dejar a Elsa sola para que se acerque Ester -ordenó Hiccup.

-Bien. ¿Ya o...?

-¡Ya!

-Y recuerda Eugene, esto es un juego de niños. No es ofensivo.

Nosotros resoplamos al escuchar las últimas palabras de Mérida al mismo tiempo y que corríamos a nuestros casilleros. Pero como los casilleros de los chicos no se encontraban cerca cada uno se fue con una de mis amigas, junto a mí Jack y Eugene. Escuché los tacones de Ester detenerse enseguida de Elsa.

-¡Hola, chicos! -gritó haciendo un saludo con la mano a cada uno, y claramente pude ver cómo le guiñaba un ojo a Jack. Éste hizo una cara de asco.

Todos la saludamos con un "hola" y tan y como lo habíamos planeado se acercó más a Elsa.

-¡Elsa! ¿Cómo has dormido?

Amor por el Proyecto. (Jelsa, Kristanna, Mericcup, Eugenzel) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora