-ALICE
Capitulo 46
Perfecto, ahora debía lidiar con un Nate completamente cabreado de verme.
Porque si, estaba muy segura de que era el.
Cerré los ojos y suspiré tratando de mantener la calma, cuando los abrí volví a avanzar pero cuando trate de poner un pie fuera del puente otro disparo resonó en el suelo a unos centímetros de mi pie.
—Nate.—murmure.—Ya basta.
Trate de salir y...otro disparo que me hizo retroceder.
—¡Nate!—espete implorando paciencia.—oye, se que quizás estás molesto...y que no quieres verme, pero... necesito hablar contigo.
Alterne la vista entre los árboles y arbustos pero no vi nada, estaban cubiertos por la nieve y se me dificultaba, sin más opción, opte por intentar nuevamente, así que di otro paso.
Y volvieron a disparar.
Maldita sea.
—Nate.—espete esta vez demandante.
Logré dar un paso pero retrocedí dando un respingó cuando dos disparos impactaron sobre el suelo.
—¡Ya basta Nate!, ¿Me escuchaste?, ! Basta!, ¡Se que eres tú y más te vale que dejes de hacer eso!—amenace—yo...necesito hablar contigo.—de pronto hubo un silencio tensó, no sabía si me estaba escuchando o si se había marchado, pero yo solo me dispuse a hablar—es...es importante.
Y entonces fue cuando lo vi, aquel cabello rubio, aquellos ojos indecifrables e intimidantes, aquel cuerpo amenazante y aquellas manos, una de ellas sostenía un rifle dejándolo reposar en su hombro, estaba vestido casual, camisa negra de mangas cortas dejándome ver sus tatuajes, note que habían algunos que no había visto, ¿Eran nuevos?, Además, tenía aretes, si... pequeños aretes de hombre en sus orejas, el cabello le había crecido un poco más, estaba más rebelde que de costumbre, y parecía haber trabajado incluso más en ese perfecto cuerpo.
Maldición, estába guapísimo.
Concéntrate estúpida.
Nate me observaba fríamente, cuando lo mire a los ojos me sentí desnuda por tener su penetrante mirada sobre mi, trague saliva.
—¿Que es tan importante?.—cuestiono, tenia la mandíbula tensa, note que me analizaba de pies a cabeza dejando sus ojos nuevamente sobre los míos, lo que revolvió algo en mi estómago fue la forma en la que me habló, y el presentimiento que tuve al darme cuenta de que el no se veía feliz de verme ahí.
Cuando yo ni siquiera lo había tocado y me sentía muy feliz de verlo frente a mí.
—Un hola no vendría mal, ¿Eh?.—bromee con una mueca de disgusto.
El endureció su expresión.
—Vete.—mascullo.
—¿Eh?.
—Que te vayas, Alice.
—Nate...
—Regresa por dónde viniste, y vete de una jodida vez.—zanjo, me dio la espalda y comenzó a alejarse.
—No.—masculle, el se volteo para mirarme con una expresión de cansancio.
—Mira, no tengo ánimos de hablar, y mucho menos contigo, vete antes de que envié a alguien por ti.
—Nate, solo quiero explicarte por q...
—¿Explicarme?—me corto y soltó una risa amarga.—¿A caso dejaste tu que yo te explicará la última vez que nos vimos?, ¿No cierto?, Preferiste ignorarme y como si fuera poco, irte.
ESTÁS LEYENDO
Mas Allá De Mis Ojos
عاطفيةDespués de esa noche muchas cosas habían cambiado dentro de mi, me volvieron débil, pero estaba dispuesta a protegerme de cualquier sentimiento que pudiera arruinarme nuevamente. Ahora una bestia amenaza con tocar mi corazón y dice que la mirada es...