Esa misma noche y luego de que todos se tomaron un pequeño descanso, el salón del edificio estaba repleto de gente conocida por los Vengadores. Se estaba dando un mini festejo por el triunfo en la misión, a pesar del escape de Strucker, habían recuperado el Cetro de Loki. Felicia estaba allí tratando de dejar atrás los recuerdos que atacaban su mente. Pensó en que tomar algún trago sería una muy buena idea para olvidar.
-¿Qué crees que estás haciendo, niña?- Clint le quitó la copa de sus manos.
-¡Oh, vamos! Casi te mueres y ni siquiera así puedes dejarme hacer lo que quiera por una noche. Además, no soy una niña- Felicia blanqueó sus ojos y se fue de la barra en la que estaba.
-Que bien la educaste, eh Clint?- dijo Steve sonriendo hacia un costado mientras se llevaba una copa a su boca.
-Si no tuvieras 100 años, también podría darte unas clases de modales, ¡Aunque creo que con el lenguaje vas bien!- Clint le dió unas palmadas en la espalda y dejó a Steve solo en la barra mientras él negaba con la cabeza.
-Jamás dejarán que lo olvide.
Al cabo de un tiempo, el salón empezaba a quedar vacío. Todos los Vengadores junto a James Rhodey, Maria Hill y Helen Cho se encontraban en los sofás ubicados al centro del lugar, hablando sobre el martillo de Thor.
-Si lo ponemos en un ascensor, el martillo subiría, ¿Cómo explicas eso?- preguntó Tony.
-Técnicamente lo estaría levantando. ¿Entonces el ascensor reinará Asgard?- agregó Felicia y los demás rieron. Esas conversaciones en las que se veía a todos felices eran las que hacían sentir a Felicia como en casa. Disfrutaba mucho pasar tiempo con ellos.
-¿Saben qué es lo que pasa? Es que ninguno es digno- explicó Thor y todos comenzaron a abuchear y murmurar cosas sin sentido. Eso hizo reír a Felicia y a Steve. Sin embargo, todas las palabras y risas cesaron rápidamente en cuanto un robot de la legión de hierro que había creado Tony, entraba en el lugar. No era como los demás de la legión, este estaba destruído casi por completo.
-Claro que no son dignos...¿Cómo lo serían? Todos son asesinos..
-¿Stark?...- habló Steve.
-Jarvis- dijo él hablándole a un pequeño aparato en su mano- Reinicia a la Legión de hierro, creo que hay un problema en el sistema- ordenó esperando a recibir como respuesta al robot apagándose, pero no sucedió.
-Lo siento, estaba dormido. O estaba en un sueño- el legionario destruido seguía hablando- Oía un terrible ruido y... estaba enredado en.. hilos
-¿Qué es lo que te pasó?- preguntó Felicia pero él no contestó.
-Tuve que matar al otro...era buen tipo- el robot descompuesto se acercaba hacia ellos y todos se habían puesto a la defensiva de la manera más cautelosa que habían encontrado para hacerlo. En el caso de que el robot no tuviera malas intenciones, tampoco querían alarmarlo y producir una pelea.
-¿Alguien está muerto?- preguntó Steve dando unos pasos por delante de Felicia.
-Pero no había nadie más en el edificio- comentó Bruce confundido. Pero cada vez que los demás Vengadores salían y Felicia quedaba sola en el lugar, alguien le hacía compañía, nunca estaba sola por completo. Ató los cabos sueltos rápidamente.
-Jarvis...- respondió Felicia en lo que para ella era un susurro, pero todos la escucharon.
-No habría sido mi primera opción, pero este es el mundo real y hay que tomar decisiones difíciles.
-¿Quién te envió?- preguntó Thor empuñando su martillo.
-Solo veo una armadura alrededor del mundo- el robot no respondía a ninguna pregunta, parecía programado para dar todo un discurso sin pausas, o eso era hasta que el Dr. Banner habló nuevamente.
-¿Ultrón?
-En carne propia- contestó él -Y tengo una misión... Paz en esta era.
Los demás Legionarios, en mucho mejores condiciones que el robot al que denominaron "Ultrón", entraron al salón atacando a los Vengadores. Steve lanzó una mesa a uno de ellos, destruyéndolo y generando una pequeña explosión. María empezó a disparar. Clint fue directo hacia Felicia arrastrándola detrás de una columna.
-Ni se te ocurra salir de aquí- ella abrió su boca para decir algo pero Clint no la dejó y la obligó a sentarse- Sé que quieres ayudar, ¿ok?. Pero podemos con esto, no necesitamos que uno de estos malditos robots ponga una bala en tu brazo, o peor, en tu cabeza. Asi que hazme feliz y quédate
No esperó por ninguna palabra más y la dejó allí escondida. Escuchaba algunos disparos, explosiones y muchos sonidos de queja. "Los están lastimando" pensó Felicia, pero aún así permaneció detrás de la columna como Clint lo pidió. A los minutos escuchó un vidrio romperse, seguido por alguien lamentándose del dolor.
-¡Steve!- exclamó al verlo a metros de ella. Él se llevó un dedo a su boca para indicarle a la chica que se mantuviera en silencio.
-Estoy bien, ya casi lo tenemos, tú solo mantente a salvo.
El capitán se levantó rápidamente y corrió hacia otro punto cercano a él. Cuando terminaron las quejas, gritos y explosiones, solo una voz retumbaba por el lugar.
-Eso fue dramático- era la voz de Ultrón. -Lo siento, sé que tienen buenas intenciones, solo que no pensaron bien sobre ello. Quieren proteger al mundo, pero no quieren que el mundo cambie -todos lo miraban atónitos- ¿Cómo salvarán a la humanidad? Si no la dejan... evolucionar.
Ultrón tomó a uno de los legionarios en el suelo para seguir hablando.
-¿Lo harán con ellos? ¿Con estos títeres?- destruyó su cabeza. -Existe solo un camino a la paz.... La extinción de los Vengadores.
Thor lanzó su martillo hacia él y lo eliminó. La voz había cesado, y un Tony Stark con el labio partido apareció junto a Felicia.
-¿Te quedarás aquí? ¿O vendrás a escuchar el sermón que me dan los demás por esto?- le ofreció su mano y la ayudó a ponerse de pie. Felicia lo siguió a la sala de operaciones junto a los demás. Si Tony había hecho esto, sabía lo que se venía.
La discusión que siguió después de eso no fue de agrado para Felicia. Todos estaban furiosos con Tony y Bruce, quienes explicaron lo que en realidad debía ser Ultrón, una capa protectora para el mundo. Pero hubo un fallo, y ahora la inteligencia artificial quería eliminarlos a ellos.
Uno de los robots de la legión había logrado escapar con el cetro de Loki y fue seguido por Thor, pero lo perdió a 160 kilómetros hacia el norte.
-Debemos recuperar el cetro. Otra vez- comentó el asgardiano.
-Sí eso creo que quedó claro- dijo Natasha- Ahora nuestra amenaza principal es Ultrón, y quien sea que pueda reclutar
-Pero tú creaste el programa Tony, ¿por qué ahora quiere asesinarnos?- consultó Felicia y Tony rió.
-¿Esto te divierte Stark?- Thor lo fulminó con la mirada- Esto se habría evitado si no jugaras con fuerzas que no entiendes
-¿Sabes que me parece gracioso? Que tú no entiendas por qué necesitamos esa armadura. Hace tres años un ejército alienígena nos atacó a través de un agujero de gusano- dijo mirando a todos- Somos los Vengadores, podemos pelear con mercenarios todo el día, pero eso...no era ningún juego. ¿Cómo planeaban terminar con eso, eh?
-Juntos- respondió Steve.
-Nos vencerán.
-Nos vencerán juntos entonces- agregó el capitán y una pequeña curvatura de esperanza se asomó en las comisuras de Felicia.
ESTÁS LEYENDO
Corriendo | Pietro Maximoff
Fanfiction-¿Tú?- preguntó el chico que ahora apenas la sostenía. Ella casi no lo reconoció. -¿Maximoff? Esta es la historia de Pietro Maximoff y Felicia Clark.
