VI: Solo esta vez

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La joven Felicia se encontró con Thor en un estado de confusión, su boca solo soltaba disparates y su mirada estaba perdida, asi que ella lo llevó a un lugar seguro dentro del barco y lo ayudó a sentarse. Lo mismo hizo con el Capitán, y con Natasha, se los veía muy asustados.
Continuó caminando con cautela, muchos de los disparos habían cesado y sabía que la persona que estaba actuando, era la chica Maximoff. Por lo que decidió buscar a Clint para mantenerse juntos, pero eso no salió bien.

-Felicia, ¿qué haces aquí?- Wanda se atravesó en su camino y tiró de su brazo para ambas protegerse de los disparos mientras hablaban.

-No, ¿tú que haces aquí? ¡Y con esos poderes! Creí que habías abandonado la base en Sokovia

-Y yo creí que tú me entendías.. Pero ya vi que no. Estás con Stark- su mandíbula se tensó y sus ojos se tornaron rojos al mencionar ese apellido.

-¡Abajo!- Wanda se agachó, Felicia le lanzó un cuchillo a un guardia que venía hacia ellas. El hombre estuvo apunto de dispararle a Wanda en la cabeza. Felicia habló nuevamente -Estás en el bando contrario, sabes que no debo dejarte ir, pero no quiero ni voy a hacerte daño Wanda...

-Chicos, ¿Es un código verde?- preguntó el Dr Banner a través del comunicador interrumpiendo la conversación que mantenían las chicas.

-No, Bruce, aún no. Yo te avisaré

Mientras Felicia respondía a la pregunta y notaba que Bruce no podía oírla por un fallo en la señal de la nave, la sokoviana se esfumó. Felicia optó por seguir buscando a Clint.

Luego de unos largos minutos en los que Felicia se enfrentaba a los últimos guardias en pie que se abalanzaron sobre ella, un robot controlado por Ultrón la sorprendió y comenzó a dispararle. Una bala entró por su hombro y otra atravesó su abdomen. Estaba derrumbada en el suelo cuando alguien destruyó al androide.
Levantó la vista y se encontró con Pietro cargando a su hermana, a quien se la veía aturdida.
Felicia no entendía por qué había hecho eso. "¿No se supone que quieren asesinarnos?" pensó antes de que el chico hablara.

-Solo esta vez Clark. Por mi hermana...- señaló Pietro con su acento sokoviano y desapareció en un nanosegundo dejando un aura azul y plateada tras él.

-Si hay alguien ahí, necesito un poco de ayuda- dijo Felicia a través del comunicador cerrando sus ojos por el dolor que pinchaba en su abdomen.

En cuanto volvió a abrirlos, se encontraba en el jet con todos los Vengadores en igual o peor estado que ella, sobre todo Bruce. "Creo que el fortachón se pasó esta vez" pensó Felicia. Escuchaba a Maria Hill hablando con ellos desde alguna instalación de S.H.I.E.L.D., o desde la sala de operaciones en el edificio, no estaba muy segura.

-Los programas de noticias los aman, chicos. Pero son los únicos. No hay ningún pedido oficial para el arresto de Banner, pero lo están debatiendo... ¿Cómo está el equipo, Stark?

-Todos...-comenzó a hablar- Fue un golpe duro, pero lo superaremos.

-Por ahora yo mantendría un perfil bajo, y me alejaría un tiempo de aquí- aconsejó Maria.

-¿Entonces debemos correr y escondernos?- preguntó Tony.

-Hasta que encontremos nuevamente a Ultrón, no tengo nada más para ofrecerles chicos, de verdad lo siento.

Tony cortó la comunicación y giró su cabeza al escuchar un quejido de Felicia, quien intentaba sentarse. Se acercó a ella rápidamente y todo el equipo imitó su acción, a excepción de Clint que estaba manejando la nave.

-Yo me quedaría ahí por un rato más- dijo Steve bajando sus hombros suavemente para acostarla otra vez-Recibiste unas heridas muy feas, pero pronto te recuperarás

-Sí, creo que puedo sentirlas- dijo ella poniéndose una mano sobre una de las heridas ahora vendada.

-Tuviste mucha suerte allá, si una bala más te tocaba podríamos haberte perdido Felicia- dijo la lejana voz de Clint- Se ve que tienes un ángel guardián, niña

"Si supiera que el alterado me hubiera dejado morir de no ser por su hermana, no diría lo mismo" pensó ella en ese momento. Los demás sonrieron porque Felicia despertó aunque no dijeron nada. Todos durmieron unas horas hasta llegar a donde Clint dirigía el quinjet. La cara de Felicia se iluminó cuando se abrió la cabina de la nave y dejó ver la granja en la que se quedarían esos días.

Estaban en casa de Clint. Y en unos segundos, con ayuda de Thor y Steve, se encontraba dentro de ella abrazando a Laura, la esposa del Vengador.

-Te extrañé mucho Felicia, me alegra que estés bien a pesar de... Bueno, tú sabes- señaló en un movimiento rápido las heridas y Felicia volvió a abrazarla.

-También te extrañé Laura, gracias por recibirme tan seguido en tu hogar, y disculpa si eso causa alguna molestia- sonrió y Natasha también lo hizo al sentirse identificada con las palabras de la chica.

-Claro que no, siempre serás bienvenida aquí..

-Okey, estoy muy confundido en este momento- Dijo Bruce observando la situación.

-¿Confundido por qué? Está claro que ella es una agente- habló Tony- ¡Y esos son los mini agentes!- agregó cuando los dos hijos de Clint entraron a la sala para darles la bienvenida.

-Perdón por llegar así- dijo Steve, muy apenado, a la Señora Barton.

-Sí, habríamos llamado antes pero estábamos muy ocupados no sabiendo de su existencia- Dijo Tony sarcásticamente mientras Felicia abrazaba a Lila, la hija menor.

-Fury me ayudó cuando entré a S.H.I.E.L.D, lo mantuvo en secreto y me gustaría que siguiera así- sonrió Clint abrazando a su esposa e hijo, Cooper -Es un buen lugar para esconderse.

Una conversación comenzaba a darse entre las personas dentro de la casa, y Felicia notó cuando Thor pisó y rompió uno de los pequeños bloques con los que Lila jugaba. Estaba apunto de decirle que fue un accidente y que no se preocupara ya que luego podrían arreglarlo, pero Thor la dejó con las palabras en la boca y salió sin dar explicación alguna. Los demás se miraron confundidos. Steve fue el que salió a buscarlo, pero no volvió a entrar. Luego de un rato cuando Felicia y Tony dejaron la casa para ver cómo había resultado la situación, recibieron la noticia de que Thor había regresado a Asgard en busca de respuestas, según lo que dijo.

Todos quedaron aturdidos con lo que sea que Wanda Maximoff les hubiera mostrado. Felicia solo esperaba que pudieran recuperarse pronto, y agradecía porque no le había tocado vivir aquello. Steve y Tony cortaban leña mientras ella observaba a su alrededor. "Los atardeceres son más lindos aquí" pensó con una sonrisa mientras admiraba los tonos naranjas y rojos mezclándose a lo lejos en el cielo. Horas más tarde, mientras Felicia ayudaba a Laura a colocar los platos y vasos sobre la mesa para cenar, recibieron una visita que entraba a la casa junto a Tony.

-Que buen olor tiene eso, Señora Barton- Felicia levantó la vista del dibujo que Lila le mostraba y corrió para abrazar al hombre que habló. -Si si, yo también te extrañé, pero no porque seas mi ahijada puedes abrazarme hasta destrozar los huesos de mi columna. Ya perdí un ojo, no perderé otra extremidad...

Corriendo | Pietro MaximoffDonde viven las historias. Descúbrelo ahora