-Tú eres la que habló con mi hermana hace un año... -Él había dejado de sostener a Felicia y en su cara se reflejaba una mezcla de confusión y sorpresa.
-Sí. Perdón por esto- le propició un golpe en la cara que dejó aturdido al chico de cabello platinado y se fue lo más rápido que pudo cambiando su forma a la del primer guardia que noqueó. Tomó el arma que había dejado en el pasillo y trató de parecerse lo máximo posible a un guardia de Hydra. "¿Qué es lo que hace un guardia de Hydra además de estar demente y decir Hail Hydra?" pensó Felicia saliendo del edificio.
El chico con el que había estado segundos atrás pasó por su lado como un rayo, sin notar que en realidad ella no era uno de los guardias.
-Hay un alterado fuera del edificio. Es muy rápido y casi me asfixia hasta morir- comentó Felicia a sus compañeros a través del comunicador.
-Sí, creo que ya noté su presencia- dijo Clint con un quejido mientras se levantaba del suelo.
-¿Acaso no lo viste venir?- otra voz se escuchó lejana. Era esa voz con acento sokoviano que Felicia escuchó antes.
La batalla contra los de hydra continuó. Steve estuvo cara a cara con el Barón Wolfgang von Strucker, e informó sobre otra mujer alterada de la que debían cuidarse aún más. Felicia de inmediato supo de quien se trataba. Una hora más tarde se encontraban en el quinjet de regreso al edificio de los Vengadores, y querían llegar lo más rápido posible.
Ya nadie estaba pendiente a darle un sermón a Felicia por haberse metido a la nave, estaban todos atentos a Clint, quien estaba herido y necesitaba que la Dra Cho lo atendiera de inmediato. Todos estaban muy preocupados por él, y Felicia aún más. Ella quería a Clint como si fuera un padre, el suyo ya no estaba y la persona que debía cumplir ese rol, no lo hacía tanto como ella esperaba.
-Los gemelos Wanda y Pietro Maximoff. Sokovianos. Fueron voluntarios en los experimentos de Strucker- contaba Felicia mientras Tony mostraba a los demás imágenes de los alterados. Había una cierta nota de enojo en la voz de Felicia, "Clint se distrajo por culpa de Maximoff y por eso no pudo esquivar las balas." Era el pensamiento que cruzaba en su mente al ver a Clint removiéndose del dolor.
-¿Y eso lo sabes porque...-dijo Bruce esperando a que la chica completara con una respuesta, y eso fue lo que hizo.
-Hace un año Clint y Nat me rescataron de una base de Hydra. Pasé meses encerrada en una celda, y cuando esos terroristas se dignaron a sacarme, no fue para nada bueno.
-Levántate, tengo ordenes de llevarte, ahora.
-¿A dónde vamos?- preguntó Felicia confundida. Estaba segura de que no la liberarían hasta conseguir lo que buscaban, porque secuestrarla a ella entre tantas personas significaba algo, y Felicia sabía qué, y por qué.
-No te lo repetiré, ponte de pie.
Felicia no tuvo más opción que seguir las órdenes del hombre. Salió del lugar con los ojos vendados y las manos atadas, mientras alguien le apuntaba en la nuca con un arma para que ella caminara. La metieron en la parte trasera de una camioneta y la esposaron allí dentro.
-¡Felicia! Hola. Veo que te trataron bien por aquí- dijo la persona sentada frente a ella cuando le sacó la venda de los ojos. El hombre hacía referencia a las marcas en el rostro y cuerpo de Felicia, que fueron prueba de los golpes que recibió cuando intentó escapar por tercera vez días atrás.
-Demasiado bien, gracias por preocuparte- respondió ella sarcásticamente y el hombre con monóculo soltó una risa.
-Eres muy divertida Felicia Clark, espero que te diviertas también en tu próximo destino- comentó poniéndose de pie, aunque bajando un poco su cabeza para no chocar con el techo del vehículo.
-¿A dónde me estás llevando?- preguntó ella intentando levantarse también, pero sin lograrlo por las esposas que enganchaban su muñeca al asiento de la camioneta.
-Ponte cómoda y abrígate. El clima es para congelarse en Sokovia- respondió él y le entregó un abrigo.
-Las veces que intenté escapar no sirvieron de nada, me daban palizas cada vez que podían. Jamás tuvieron ningún tipo de piedad -continuó contando a los Vengadores - Pero prefería eso por sobre lo que sufrí en Sokovia. Todo por culpa de Strucker- las últimas palabras hicieron que los ojos de Felicia brillaran por dos segundos en un tono naranja que muy pocas veces habían visto.
-¿Qu..qué te pasó?- Preguntó Bruce con nerviosismo en su voz.
-¿Cómo crees que conseguí mis poderes? Dones, los llamarían algunos.. Yo no lo veo así- sonrió con amargura -Ahí conocí a los Maximoff, en la base de Sokovia. Pero eso fue antes de que se convirtieran en lo que son ahora, y me habría encantado que ese recuerdo se mantuviera así.
La chica se recostó en la cama que Natasha preparó para ella y se durmió rápidamente. Ninguno de los Vengadores había escuchado antes a Felicia hablar sobre como consiguió sus poderes, solo sabían gracias a Fury que Hydra había experimentado con ella hacía más de un año atrás. Al cabo de unas horas, Thor despertó a Felicia.
-Lady Felicia, llegamos.- la sacudió levemente y ella abrió los ojos asustada- Lo siento, no quería asustarte...Estamos en el edificio, ya bajaron a Clint y creo que deberíamos ir a ver qué tal está.
-Sí, por supuesto, vamos- se levantó y, en un par de segundos, entraba junto al asgardiano en la sala donde Clint estaba siendo atendido.
-Hola Dra Cho, ¿Cómo está él?- preguntó Felicia con más tranquilidad que la de ayer al saber que estaba en buenas manos. El hecho de que Natasha estuviera sonriendo junto a su mejor amigo, también le daba calma.
-Felicia. Thor.- les sonrió brevemente- Él está mejor, su tejido está regenerándose gracias a esta pequeña máquina- le dio unos pequeños toques al artefacto con orgullo -Pronto estará más que bien y ni su novia notará la diferencia.
Felicia le dio una mirada rápida a Natasha cuando mencionó las últimas palabras. Ambas conocían a la familia de Clint, pero él prefería mantenerla en secreto para mayor seguridad. No quería alguna vez llegar a casa y encontrarse con la sorpresa de que sus hijos fueron llevados por Hydra, o por algún otro enemigo que generara en sus años activo como agente de S.H.I.E.L.D. Muy pocas personas sabían de ellos, entre esas personas estaban Natasha y Felicia, a quienes Clint consideraba parte de su familia.
-No tengo novia- comentó él mientras se removía en su lugar.
-Con eso yo no puedo ayudarle señor Barton- comentó Helen Cho mientras limpiaba sus herramientas de trabajo. Natasha sonrió divertida ante el comentario.
Si los Vengadores se habían olvidado del sermón a Felicia, Fury no había olvidado el sermón que debía darles a ellos por descuidarse de esa manera. Asi que una llamada con algunos cuantos gritos se oyó desde el cuarto de operaciones. Fury estaba enojado, les había pedido estrictamente que no dejaran a la chica participar para que no volviera al lugar donde sufrió tanto, y más tarde entendieron por qué. Pero para su más grande pesar, no pudieron evitar ese dolor que le produjeron sus recuerdos.
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Corriendo | Pietro Maximoff
Fanfic-¿Tú?- preguntó el chico que ahora apenas la sostenía. Ella casi no lo reconoció. -¿Maximoff? Esta es la historia de Pietro Maximoff y Felicia Clark.
