34

15.5K 813 447
                                    

Ashton miró a todos y miró a todos.

- Calum, ¿verdad o reto?

- Reto.

- Desnúdate y aviéntate al agua -todos comenzamos a reír.

-Juego de gemelas af -rió Calum-. Pero está bien, malo que la tuviera pequeña.

- Pero si chueca -dijo Luke.

-Es hermosa -dijo Calum.

Se levantó y bajó sus shorts. Madre santa.

-Life goals -dije yo.

- De esto hablo yo, mmhm -dijo la Maynard. Maya de quedó congelada.

- ¿Saben que antes de conocerlos era Calum girl? ¿Si, no? -Calum se dio la vuelta y Luke tapó los ojos de Bea.

-Creo que me mojé -admití mirando el trasero de Cal.

- ¿Por qué todas pueden ver? -preguntó Bea.

-Esto no es sano -dije al ver a Calum correr hacia el lago y lanzarse.

- ¡Mierda! ¡Está congelada! -gritó.

-Se te hará chiquita -dijo Ashton riendo.

- Hay peces aquí, no jodan -dijo.

- Cuidado que muerden -dijo Johna y comenzamos a reír.

-A ver si te lo ponen normal -se burló la Maynard.

Reímos.

- Bien que te lo comes todo -le dijo y no pude evitar reír. Él salió tapando su miembro y se enrolló en una cobija.

-¿Te da pena porque se te hizo pequeño? -bromeó Luke.

-Ya, ya, sigues tú, Cal -le dije.

Se puso calzoncillos mientras pensaba.

- Bebé -volteé y él comenzó a reír.

- ¿No que no? -le levanté el dedo medio-. ¿Verdad o reto?

-Mmm... Reto -dije sonriente.

- Uhh... Esto se pondrá bueno -dijo Jonathan frotando sus manos.

- Te reto a... -entrecerró sus ojos-. Que beses a Beatrice Miller.

- ¿Qué? -dijo ella y al mismo tiempo Luke alzó sus brazos.

¿Acaso estaba soñando?

-Puta madre, ¡sí! -exclamé.

Bea rió y negó con la cabeza. Me acerqué a ella.

- ¡Esperen! -dijo Luke y sacó su teléfono.

- ¡Luke Hemmings, te mataré sí lo subes! -amenazó Miller.

Puse mi mano en su cuello y rápidamente la besé. Sus labios eran suave y sabía a fresas. Oh dios, chica perfecta. Su lengua se encontró con la mía mientras que movíamos nuestros labios.

- ¡Puta madre! -gritó Luke extasiado. Podía sentir la sonrisa de Michael a distancia.

Subí mi mano y apreté su seno. Bea rió a carcajadas y se separó.

-Lo siento, quería llegar a tercera base -admití aún excitada.

- De eso me encargo yo -sentí una mano en mi trasero.

-Eh, la bebé quiere su lechita ya -se burló la Maynard.

-Ya tengo dieciocho, es legal -dije yo.

- No estas en Inglaterra zorrita -le dije-. Aquí eres legal hasta los 21.

-Para algunas cosas sí -dije-. Soy libre, además tengo el consentimiento de mi padre.

Luces, cámara, acción » m.c.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora