♣ · Capítulo 17 · ♣

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Capítulo 17

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Capítulo 17. Primer motivo.

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—Vas a ir, ¿No es cierto?

—Necesito ir.

Del otro lado del teléfono escucho a Rhett maldecir.

—Estás loco. No sabemos si lo que dijo Matteo es cierto, además de que hay otras mil maneras de traerla de vuelta donde no arriesgas tu vida de manera innecesaria.

—No van a matarme, si es lo que te preocupa.

—¿Y cuáles son tus fuentes? ¿Un enemigo que ni siquiera sabías que tenías? Por favor, Aleksandr, piensa fríamente las cosas. Esto es una locura.

—Ya he tomado mi decisión —le respondo con tranquilidad, aunque sé perfectamente que lo que él dice es en parte cierto. Por suerte la mitad de la policía de Las Vegas está en mi bolsillo y la gran mayoría de los oficiales que quedan son cien por ciento leales a su trabajo, así que si no me resisto no hay motivo por el cual matarme, y la pequeña porción que trabaja para Raffaele y su gente no pueden mover piezas de este lado—. Tú ocúpate de todo por allá hasta que vuelva.

—¿Y se supone que le diga a Madness? Además, ¿Qué pretendes que haga con Matteo?

—Es de madrugada, para cuando sean las a ocho estaremos en el búnker. No tienes por qué preocuparte por la enana. Y sobre Matteo, lo dejo a tu cargo hasta que vuelva.

Rhett vuelve a maldecir, esta vez en innumerables ocasiones, mientras yo miro fijamente al horizonte con ayuda de unos binoculares, viendo hacia el pie de la colina en la que nos encontramos a varios policías empezar a cubrir la zona.

De seguro creen que me deshice de Matteo en el camino.

—Escúchame, Rhett, no tengo todo el tiempo del mundo. Ya tengo que irme.

—Aleksandr, espera...

—Cuida bien a la enana.

—Si, pero...

—Que cuides bien a Madness.

—¡Que sí, que te he escuchado, hombre! Pero, ¿Y cómo piensas salir de ahí? Desde que pises esa comisaría van a llenar de policías y agentes el lugar.

—Llama a Caleb. Él sabrá qué hacer.

No le doy tiempo a replicar y cuelgo, luego quito los binoculares de mis ojos y se los entrego a Nikolay.

—Váyanse. No podemos arriesgarnos a que alguien los vea irse. Lo más probable es que un helicóptero aparezca por aquí en cuanto el FBI sea avisado del secuestro de Matteo.

Nikolay toma los binoculares y, luego de haber echado un vistazo a través de ellos, los baja y suspira.

—Si Caleb no aparece...

Blackjack, Reina  {A #2}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora