12. Vernos

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Antonella.

Luego de varios días y decidí comprar varios libros.

Para comenzar a tener mi nueva biblioteca

Llené las paredes de mi habitación de dibujos del cielo y frases de libros.

Me pasaba las noches en vela escribiendo poesía.

A veces me colocaba a pensar en todos lo momentos en los que me sentía feliz.

Y no son muchos.

Mis recuerdos me colocaban peor.

Por eso Margot siempre me preguntaba de que por qué nunca tenía ánimos de nada.

Yo la verdad cuando una persona está mal es porque quiere estar mal.

A veces todo es mental.

Pero nos aferramos a los malos recuerdos que simplemente nos hacen daño, y yo soy muy terca

Cada día que me levantaba tenía mas ojeras.

Salía con mi mamá y mi hermana a comprar ropa y cosas así.

A mi eso no me importaba mucho.

Nunca me gustó verme bien para llamar la atención de los demás.

Al llegar a mi casa lo primero que hacía era escuchar música y volver a escribir. Ya esto se volvió mi rutina diaria.

A veces solo quería ver la sonrisa de Margot que muy pocas veces mostraba.

Pero era contagiosa.

Fue el amigo que siempre necesité para contarle mis problemas y que él siempre me iba a escuchar y dar su opinión.

¿Será que lo extraño?

Pasaron meses desde que nos vimos por última vez, de seguro él ya continuó con su vida y tampoco quiero ser un estorbo.

¿Algún día nos volveremos a ver de nuevo?



La Relatividad del AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora