La primer Weasley | Remus Lupin

Capítulo 138

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-Cielo...- Repetía Remus mientras agitaba el hombro de Anne

-No me quiero levantar- Dijo la chica enterrando su rostro en las almohadas

-Sirius nos necesita en Grimmauld Place, cariño- Dijo Remus riendo un poco y besando múltiples veces la mejilla de la chica

-Quiero mucho a Sirius y a Harry, pero son las cinco de la mañana y no tengo ganas de hacer un pastel- Dijo la chica levantándose y recostándose sobre Remus mientras le daba un breve beso en los labios

-Puedo decirle que te duele la cabeza y que llegarás más tarde y yo comienzo el pastel- Sugirió el licántropo

-Esa es una genial idea, pero si tú cocinas ¿Quién va a decorar? Sirius no es muy cuidadoso y podría despertar a Harry-

-Bien, entonces vamos a levantarnos- Dijo Remus mientras dejaba breves besos sobre la cabeza de Anne que estaba en su pecho

Si bueno, la razón por la que Anne no quiera levantarse no es realmente un misterio, principalmente son las cinco de la mañana lo cuál no la pone muy contenta. Segundo, ayer después de llegar de la pequeña fiesta de Neville y finalmente estar otra vez en casa, resumamoslo a que Remus estaba muy delicado en cuanto a sus sentidos, y un solo beso de Anne bastó para que toda la noche estuvieran amorosos, claro que la situación no llegó a algo más allá de besos y caricias en la habitación de los enamorados.

Media hora después, la pareja ya se encontraba en la sala de estar de Grimmauld Place, o como Sirius quería llamar a la vieja  mansión "El rincón Merodeador", aunque el nombre estaba en debate con Harry.

-Llegan 1 minuto tarde- Les reclamó un atareado pelinegro mientras cargaba una gran cantidad de cajas

-¿Desde cuando eres tan sensible con la puntualidad?- Le preguntó Anne mientras le ayudaba con algo de peso

-Desde que mi único ahijado cumple 16 años y desde que me urge que habrá los 50 regalos que le compré personalmente- Dijo Sirius aunque al instante cerró la boca al oír su error

-¿50 regalos? Sirius, te dije que no debías comprar tantas cosas- Le reclamó Remus

-Es que... compré los 20 que le daría yo y también compré los que le darán ustedes... si, ¡Si! Eso...- Se excusó el animago

-Sirius, a este paso vas a pagar la boda de toda tu familia- Le dijo Anne antes de soltar una risa

-Ese es mi mayor sueño... ese y tener otros 20 sobrinos, 10 de ustedes y los demás de Dora y Deidre...- Dijo Sirius con una boba sonrisa

Después de 4 horas y media de decoración y repostería además de un par de desastres, lograron terminar de organizarse para darle un buen cumpleaños a Harry James Potter.

-... Y entonces cuando despierte yo le aviento la cubeta de confetti mientras Anne le extiende el pastel- Dijo Sirius contando el plan

-Me sorprende lo organizado que estas hoy- Comentó Anne

-¡Oye! Estuve toda la noche dibujando el plan y después del rotundo éxito que tendremos hoy lo voy a enmarcar para presumirselo a Ben cuando despierte-

Así que el plan se puso en marcha, Remus traía unos globos, Anne llevaba un pastel con decoraciones solo para un gryffindor y Sirius, quien era el evidentemente más emocionado de los tres, estaba casi dando saltitos con una enorme cubeta llena de confetti solo para su ahijado.

Al entrar a la habitación de Harry lo primero que podías notar eran todos los posters de Quidditch, Gryffindor y unos cuantos relacionados a Defensa Contra Artes Oscuras llenando las paredes, no se escontraba muy ordenada pero no era un desatre como la de Fred y George; la jaula de Hedwig se encontraba en una esquina de la habitación más la blanca lechuza apenas aterrizaba en el alfeizar de la ventana con un par de regalos y en la esquina contraria de la habitación se encontraba Harry descansando sobre su cómoda cama y soltando un par de ronquidos casi imperciptibles.