Frente a Frente

206 20 11
                                    

- Déjame ver si entendí bien... ¿Me estás diciendo que sospechas de que Kazemaru ahora se llama Nathan Swift? Y que quieres que vayamos a buscarlo a pesar de no tener pruebas de que sea realmente él... Lo que implica que correremos el riesgo de encontrarnos a Goenji a pesar de que el entrenador Kudou nos prohibió acercamos ahí... Y a su vez pondríamos en peligro todo el plan para desmantelar el sector...

- Básicamente... - Respondió suspirando el albino - Vamos Midorikawa... Eres el único al que le puedo pedirle este favor...

- ... - El peliverde hizo un gesto de pensar las cosas con seriedad - Adrenalina, tensión, investigación como detectives, un rescate y sólo Aprhodi sabrá que más... ¡Me apunto! - Exclamó llevándose ambas manos a la cabeza - Eso sí, te costará cientos de litros de helado pagar mis servicios como compañero.

- Sabía que dirías eso... - Dijo con una suave risa - El asunto ahora es... Por donde comenzar... No podemos ir simplemente a la sede del sector sin esperar llamar la atención, recuerda que para ellos, somos muy conocidos.

- Mi amigo, eres consciente de todo lo que está en juego ¿Verdad?

- ¿A qué te refieres?

- Tu matrimonio, tu familia y tu mejor amigo, y si quieres que esto salga bien, más te vale tener un plan.

- Ah... Eso... - Respondió suspirando - Siendo sincero... Estoy preocupado por ellos... Los conozco tan bien, que podría apostar mi vida a que están sacrificándose por nosotros, y no digo que esté mal, es bueno pensar y actuar por el resto, pero...

- Pero pudieron pedirnos ayuda - Complemento apretando los puños el peliverde - La verdad es que no esperé que Kazemaru hiciera esto... Al menos no después de haber estado lejos de Endou durante más de dos años cuando estuvo en Canadá... Yo creí que esa experiencia le quitó todas las ganas de desaparecer como cuando éramos unos niños.

- En ese entonces, él sufría mucho por culpa de la mala relación con sus padres... Recuerdo que se aislaba en el muelle durante horas, pensando en que hacer para solucionar las cosas sin involucrarnos, diciendo que no era justo que nosotros la pasemos mal por sus problemas...

- Han pasado tantos años que no puedo evitar sentirme viejo con estas historias...

- Eso es porque lo estás, padre - Bromeó Kariya, quien se asomaba por el pasillo de la casa correctamente uniformado - Buenas tardes Fubuki-san.

- ¡Mira nada más que afrenta! - Gritó con algo de burla el mayor - Por decirme eso, te quedas sin postre esta noche, y... ¿Qué se supone que haces? - Preguntó al notar como el menor volvía a colocarse el maletín al hombro - ¿Vas a salir?

- Sipi - Respondió sonriendo - Nos dejaron un proyecto de biología el día de hoy, así que iré con Matsukaze y Hyouga a casa de Endou-san para hacer la tarea.

- Dile a Hyouga que apenas termine, venga directo a casa, nada de quedarse en el parque entrenando a solas - Pidió el albino con suavidad.

Tras asentir, el peliteal se despidió de Fubuki con una leve reverencia y de su padre con un corto abrazo, recibiendo una caricia que lo sonrojó como un tomate maduro, aunque claro, no se iba a quejar de las muestras de afecto de su tutor, después de todo él también lo amaba con intensidad.

Apenas Kariya desapareció nuevamente de la escena, ambos adultos se miraron fijamente en silencio, volcando sus pensamientos hacia el plan que tenían que estructurar para descubrir si el tal Nathan Swift era su amigo.

Ninguno de los dos se atrevía a decir absolutamente nada, mantenían sus brazos cruzados como si estuvieran en un juego de quien se ríe primero.

De manera sincronizada, ambos estuvieron de acuerdo en que la mejor forma de solucionar esto era darse un tiempo para pensarlo, y luego ver si sus ideas encajaban entre sí.

¿Fácil? ¡No! (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora