🔞 CONTENIDO ADULTO
No tengo derechos de autor.
Nombres de los personajes e imágenes de ellos pertenecen al autor del manga, Ken Wakui.
Las imágenes que salen en este fanfic no son mías así que por favor si alguien ve su imagen por aquí pídame que l...
— ¿Que planeas? — Ese vestido se te ve hermoso – respondió – combina conmigo.
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(Adjunto imagen xd)
— ¿Combina contigo? – respondí irónicamente. — ¿Ese vestido te lo hizo el jodido costurero? – ignoro mi pregunta. — Es un diseñador y si fue él. — Por fin hace algo bien. — ¿Por qué tanto odio a Mitsuya-san? — No lo odio princesa...
Llegamos a la entrada de la mansión en donde todo estaba lleno de luces blancas y el jardín se veía espectacular. Nos recibió el valet parking.
— Fugi-sama bienvenida – se inclinaron algunos presentes. — Gracias — me incliné devolviendo el saludo a todos. — Fugi-sama — era la voz de Kou — estamos felices de tenerte en tu casa nuevamente.
Se acercó para abrazarme pero una mano lo detuvo, era Ran.
— Chico aléjate un poco — la mano de Ran estaba sobre el pecho de Kou — ella viene conmigo.
Kou puso una cara de molestia pero aún así se contuvo.
— Disculpe Haitani-san. — ¿Qué mierda? – dije haciendo que varios que venían llegando regresaran a verme — ven aquí Kou — me acerqué estirando los brazos y rápidamente correspondió a mi abrazo. — Perdón por enojarme contigo – dijo en mi oreja – pero pensé que realmente estabas con la competencia. — Tristemente si estoy con ellos pero será por el bien de todos.
Me separé del abrazo y solo me miraba como intentando descifrar lo que intenté decir.
Ran me tomó de la mano sin pedir permiso, me moleste un poco pero no quería hacer algún desfiguro frente a toda la gente. Entramos a la mansión y como siempre el abuelo luciéndose llenando todo de lavandas y flores color rosa. Al entrar las miradas comenzaron a posarse sobre mí. Mitsuya y Hakkai estaban juntos y con ellos también estaba la señorita Cristina, los tres tenían algo en común y era esa mirada de fastidio... Olvide por completo que venía de la mano Haitani Ran. El abuelo me miró con algo de molestia pero sabía que no sería grosero con Ran porque su imagen es primero. Se acercó a nosotros.
— Buenas noches Fugi-sama — Ran saludo a mi abuelo con un apretón de manos. — Buenas noches... — lo miraba molesto — te dije que te alejaras de ella — hablo en el tono más bajo posible y aún sonriendo pero yo si lo escuché. — Me gusta lo prohibido — respondió Ran burlesco.
El abuelo solo le dio una mirada de pocos amigos y me abrazó, correspondí al abrazo y la gente nos miraba.
— Siempre la más hermosa Lily. — Gracias abuelito — sonreí. — ¿Por que no llegaste con tu prometido? — Ehhh... Necesitamos hablar sobre eso — hice una señal a Mitsuya-san para que viniera.
Mitsuya se acercó y se notó el cambio radical que el abuelo tuvo al saludarlo ya que con Ran no fue así.
— Takashi bienvenido — dijo abrazándolo — ¿quieres hablar conmigo mi muchacho? ¿Cosas de hombres o qué pasa? — Gracias Akio-sama — dijo separándose del abrazo — bueno me parece que no son cosas solo de hombres — me miró y sonrió — pero necesitamos hablar los tres en privado. — Con permiso entonces – interrumpió Ran dando una reverencia – iré a dar una vuelta y te espero – me guiño el ojo y se fue.
