EXCLUSIVA (Mitsuya Takashi x OC)

28. Todos

⚠️ ATENCIÓN.

En este capítulo no hay narración de la protagonista, solo de personajes secundarios.

.
.
.
.
.
.
.

Hakkai Shiba.

— ¿Entonces dices que en ese momento buscaste la camioneta y al personal de seguridad de la victima? — dijo el hombre que tenía frente a mi.

— Si señor — respondí sin ánimos.
.
.
.

Desperté en la cajuela de un auto robado, estaba amordazado y me dolía el cuerpo. Nadie escuchaba mis "gritos" ni la forma desesperada en que trataba de zafarme de aquellos plásticos que impedían mis movimientos, escuchaba solo ruidos por fuera de autos que pasaban como si el auto estuviera abandonado en algún camino algo transitado.

Pensaba si ya terminaría mi vida o si aún tenía la oportunidad de permanecer aquí un poco más. No sé qué pasa a mi al rededor solo se que ya no me quedan ganas de seguir, mi estómago ruge y eso apunta a que no he comido en días.

No se qué pasó, solo se que deje a Lila-chan en la entrada de la heladería para buscar al chofer y a los simios que Ran Haitani envió para cuidarla pero cuando llegue al auto no había ninguno de ellos, solo estaba un tipo mal encarado frente a mi,  cuando pregunté quien era solo sentí un golpe en la cabeza que me dejó en el piso, mi vista se nubló y lo ultimo que pude escuchar fue "ya eliminamos todos los obstáculos jefe, ¿matamos al peliazul gigante?". Cuando ese hombre dio esas últimas palabras recuerdo haber apretado los ojos con fuerza mientras en mi cabeza aparecía la imagen de Yuzu-chan y mis lágrimas comenzaron a brotar hasta que la imagen de Mía apareció, nos vi el día que nos despedimos tomados de la mano y algo tristes pues tenía que regresar a mi país por trabajo.

" — Te prometo que regresare con bien.

— Te esperare todo el tiempo que sea necesario Hakkai.

— Espérame en casa con los brazos abiertos y muchas ganas de hacer el amor.

Ambos sonreímos y recargamos frente con frente.

— Te amo Hakkai."

Abrí los ojos asustando y comencé a intentar desatarme mientras sentía como corrían algunas lagrimas sobre mi rostro. Esa fue la primera vez que Mía dijo que me ama, esa fue la primera vez que sentí que alguien me amaba ¡por favor Dios no me quites esta vida!

Seguí moviéndome de manera brusca y fuerte hasta que escuché que algo estaba por fuera de la cajuela.
- Sniff sniff - se escuchaba un siseo, más bien un tipo de olfateo ¿es un perro? Me pregunté.
Después se escuchó un ladrido y pasos apresurados hacia mi dirección, la voz de alguien diciendo "por favor que sea él y esté vivo". Unos minutos de ruidos y forcejeos por la parte de afuera y vi como la cajuela se abrió de golpe mientras me apuntaban con unas lámparas que obstruían mi vista.

— ¿Estas bien? ¿Sabes tu nombre?

Afirme con la cabeza.
Comencé a sollozar mientras me quitaban aquella cosa que me impedía hablar libremente.

— Tranquilo muchacho, ya casi te liberamos.

Mientras con tijeras cortaban y me ayudaban a liberarme. en mi mente solo apareció mi novia sonriendo con los brazos abiertos.

Espera por este idiota un poco más, hermosa.

Aún no aparece mi preciada amiga y si ella no aparece con bien me daré la tarea de buscar por cielo, mar y tierra para vengarme del culpable.

Tú también espera con bien Lila-chan.

.
.
.
.

Kamille Fu