El divorcio

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Emma y Kristin por fin están de acuerdo en algo ¿Se unirán contra la Regina?

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- ¿Qué le pasó? ¿Se siente mal? - Preguntó Emma preocupada cuando vio llegar a Regina con Valeria en brazos.

-No, para nada, todo bien.

-Entonces ¿Por qué no está en la guardería?

-A Arizona se le ocurrió poner una guardería aquí para las mamás del cowork, y obviamente, ofrecí a Valeria para el programa piloto que inicia hoy- Besó la carita de su hija.

- ¿Y no se te ocurrió preguntarme antes de decidir? - Preguntó molesta- Habíamos quedado que enviaríamos a Valentina a la misma guardería que Valeria para que pasen más tiempo juntas.

-Emma, tienes toda la razón, perdóname, de verdad se me pasó- Dijo realmente apenada.

-Sí, se te pasó, claro- Negó con la cabeza.

-No te enojes por eso ¿Por qué mejor no te involucras y traemos también a Valentina? Nos puedes ayudar a afinar los detalles del programa piloto.

-¿Y Robbins está de acuerdo o también se te va a pasar decirle?- Escupió con acidez.

-No inventes Emma ¿Por qué no estaría de acuerdo? También trabajas aquí, por favor- Puso cara de cachorrito necesitado y la rubia se derritió.

-Bien- Aceptó a regañadientes y tomó a Valeria en sus brazos y Regina sonrió- Hola mi amor- Llenó su carita de besos y la niña balbuceó riendo.

-Gracias, además tendremos a las niñas cerca, podemos verlas en cualquier momento, no paso suficiente tiempo con Valentina y te has estado quejando de lo mismo con Valeria.

-Sabes cómo convencerme Mills- Dijo fingiendo un gruñido- Tu mami morena hace lo que quiere conmigo ¿Verdad mi princesa? Sí, tu mami Gina sabe cómo encantarme- Dijo fingiendo la voz y Regina las miraba embobada.


-Siento una mala vibra horrenda ¿Eres tú la de la mala vibra? - Cuestionó Cora- Tú te traes algo Fiona.

-Me acosté con Neal- Habló demasiado rápido- En el viaje que hicimos para nuevos empresarios.

-Ya sabía yo que había algo raro.

-Ay mamá ¿Qué voy a hacer? No quiero perder mi negocio por una calentura, y Regina no va a estar contenta si se entera que me acosté con el hermano de August

-Pero ya sabías hija, mezclar placer con negocios siempre es muy complicado, en cuanto a Regina, no le digas nada.

-¿Es ese tu gran consejo?

-Aja.

-Mamá, no necesito de tus magias para saber eso, gracias por nada- Resopló.


Alice y Margot estaban en una acalorada sesión de besos en la cama de la joven Swan, la gamer comenzó a tocar el cuerpo por encima de la ropa de Alice, ambas estaban excitadas, cuando Margot metió su mano bajo la falda, Alice se sobresaltó y se sentó de golpe.

-¿Qué pasa?- Preguntó jadeante Margot.

-Yo, no sé si estoy lista.

-Alice, tu mamá no está y Granny está viendo la novela, no creo que...

Madre solo hay dosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora