Bienvenida a casa de nuevo

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-Hola- Se acercó Regina a Alice- Perdón por lo que pasó con tu mamá, no quería meterlos a ti y a Henry en problemas.

-No te preocupes, está bien ¿Dónde están las niñas?

-Están dormiditas, como unos ángeles, después de agotar toda mi energía por supuesto.

-Lo sé, dos bebés son una locura, quiero mostrarte algo- Le tendió su celular.

- ¿Y eso? - Preguntó al ver la imagen de una muñeca con un tatuaje- ¿A poco te quieres hacer un tatuaje?

-Me encantaría, pero mi mamá me mata- La morena asintió- A menos, de que tú me ayudes- Sonrió con picardía y la sonrisa de la morena se desvaneció.

-Oh no, no, no, no quiero problemas con tu madre- Sacudió negativamente la cabeza- Además ¿Qué te hace pensar qué tengo una posibilidad de convencerla?

-No sé, vives aquí, no ha hecho un escándalo cuando andas sin sostén, deja que cuides a Valentina, entre otras cosas que mamá no tolera, creo que le agradas- Dijo con sinceridad y Regina sonrió involuntariamente.


Al día siguiente, Regina y Ruby felicitaban a Alice por lo bien que se le veía en tatuaje atrás de la oreja, con el cabello suelto lo taparía.

-No te había regañado ya mi mamá por meter extraños a la casa- Apareció Henry.

- ¿Y qué vas a hacer? ¿Ir con el chisme? - Preguntó Ruby.

-Lo que ustedes no saben, es que estoy en una encrucijada, Alice siempre se pone del lado de mi papá, entonces, a veces tengo que ponerme del lado de mi mamá, si no, sería ella sola contra todos- Regina lo miró con cariño, aun sabiendo que la rubia era intransigente al borde de rayar lo irracional, Henry se ponía de su lado para que no se sintiera sola.

-No le vayas a decir nada a mi mamá Henry.

-Hagamos algo, tú no dices nada, y yo te doy una foto de mis bubis.

-Ruby- Regañó Mills.

-Trato- Dijo el adolescente y Regina lo regañó con la mirada.

Ruby arrebató el celular de Henry, lo metió bajo su blusa y se tomó una foto.

-Ruby, no manches, es un niño carajo.

-No te dejes engañar, es un adolescente con hormonas locas, además ven peores cosas en internet, relájate.

-Emma le revisa el teléfono, me vas a meter en una bronca- Espetó molesta.

- ¿En serio te enojaste? Si Henry le decía a la señora Swan, te iba a ir mal, te estaba defendiendo Regina.

-No necesito que me defiendas de...

-No te pelees con tu novia por mi culpa Regina- Intervino Alice, en ese momento, Emma se acercaba y escuchó a partir de ahí, sus puños se apretaron

-No es mi novia- Dijo Mills en automático y los puños de Swan se destensaron.

-Wow, llevamos siete meses saliendo Regina- Dijo dolida.

-Yo tengo una bebé pequeña, ahorita no puedo tener novia.

-Tienes toda la razón, no sé que estoy haciendo aquí- Se puso de pie.

-No Ruby, perdón por portarme como una idiota- La tomó de la muñeca y estuvo a punto de besarla, momento en el que Swan decidió darse a notar.

Madre solo hay dosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora