Perfectamente imperfectos ©

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—¿Ya tienen alguna idea de cómo será la boda? ¡Tengo una idea! Busquemos tipos de boda en Google— comenta Azul muy entusiasmada, mientras, yo me como todo el delicioso pastel de limón que tengo enfrente.

El trío que tengo frente a mi  se burlan de mi por cómo me atraganto con el pastel, claramente los ignoré.

—Yo digo que se casen primero por el civil y después pueden hacer un evento en grande—sugiere Alan después de darle un sorbo a su jugo de naranja.

Tom chasquea la lengua—Mejor no se casen, eso solo hace gastar dinero.

—Pues entonces no te cases tú— espeta mi prometido.

—A ver, a ver...—canturrea Azul mirando la laptop— me lleva la pinga... ¿Qué tal una boda en la playa? ¡En Disney! ¡Oh, una en las Vegas!

Ella comenzó a hablar, hablar y hablar sobre muchos tipos de boda; decoraciones, vestido, arreglos etcétera. También hablo para ella misma porque sacaba su español, necesitaba urgentemente aprender el español. El inglés americano lo aprendí rápido con Samantha... al principio mi asento seguía siendo el inglés británico que siempre había tenido.

Aún se me escapa mi asento pero al parecer a nadie le importaba o nadie lo había descubierto.

Alzo mi vista encontrándome con los ojos brillosos de mi prometido, conserva su cara de amargura como siempre y cuando me ve la cambia y me dedica una sonrisa encogiéndose de hombros. Con sus ojos miel señala el pasillo que lleva a las habitaciones —siendo específica, nuestra habitación— niego con la cabeza, él hace mohín.

—¡Una boda desnudos!

Parpadeé muchas veces al escuchar la sugerencia de Tom.

»Imagina, existen las playas nudistas. Se casan en la playa desnudos y... ¡dos pájaros de un tiro!

—Por mi no hay ningún problema.—George me guiña un ojo.

Aparto la vista y comienzo a sonrojarme.

—Ignorando a estos idiotas— empieza Alan mirándome—, ¿a ti como tú gustaría, linda?

Había pensando muchas veces en algún día llegar a casarme; pero jamás me puse a pensar cómo y dónde la haría. Me encogí de hombros sin saber cómo actuar.

—Oye, oye... la boda es de los dos, la decisión es de los dos. Así que George, tú también tienes que opinar— Azul cierra la laptop y mira a George.

—¿Quieren una boda sencilla o extrema? Es decir, una donde tenga miles de invitados y todos eso— ahora fue Tom quien habló.

George y yo no respondimos.

—Aquí es donde dicen algo, Azul y Tom ya les dieron muchas ideas.

Me siento algo presionada con todo esto, tenemos que tomar una decisión para hacernos más ideas sobre esto. Bajo la mirada tratando de pensar o algo que se me venga a la mente. Quiero muchas cosas y a la vez no quiero nada.

Escucho a George carraspear llamando nuestra atención.

—Lo pensaremos un poco, y después les diremos. Necesitamos espacio y pensar tranquilamente.

Los tres asienten mientras yo dejo caer mis hombros.

—Si nos casamos, vamos a invitar a todo el mundo—le dice Azul a Alan, quien se pone rojo.

Ella se acerca a él y le rodea el cuello, comienzan a besarse. Tom hace una mueca graciosa mientras los mira. George solo esta mirándome con las cejas alzadas.

—Podemos hacerles competencia, apuesto a que ganamos.— dice. Me pongo de pie lentamente sentándome a horcajadas en su regazo. Obviamente comenzamos a besarnos dramáticamente.