La reputación de Izuku Midoriya está por los suelos y en realidad a él no le afecta para nada. Ser visto por sus amigos con otro hombre le agrada, sabiendo que rápidamente le dirían a su para nada infiel esposo, le da muchísima gracia como es que sus inútiles amigos son tan hipócritas al saber que Katsuki tiene otra familia y nadie se lo dijo, hasta que se enteró por el mismo ya que observó a una mujer en el hospital pidiendo que su hijo lo nombraran un Bakugo.
— Eres un imbécil, Katsuki te ama.
Se rió frente a Ochako, ella también se había acostado con Katsuki y como el idiota del rubio no la escogió a ella, el odio creció en el fondo de esa regordeta chica.
Pronto sería más odio que chica.
— Katsuki te ha amado mucho.
De igual forma se rió, tomó su celular y vió algunos mensajes de su novio esperándolo en su casa.
Muchas personas lo odian y está perfectamente bien, todos quieren pensar que es el único culpable pero, ¿alguien se puso a pensar sobre como se sintió al saber que su esposo imbécil iba a tener un hijo con otra persona?
Nah.
— ¿Deku?
Izuku dejó de besar al peliblanco, el chico sonrió y tomó de la cintura al pecoso, Katsuki apretó sus puños y eso le causó más gracia a Midoriya.
— Ni te esfuerces en mentir, cariño, toma.
Touya le dió un folder a Katsuki quien lo miraba, los ojos rojizos se abrieron por la sorpresa y miró nuevamente a Izuku.
— Disfruta tu nueva familia Katsuki, también está el papel de divorcio. Gracias por estos años a la basura.
El ojiazul tomó la mano del ojiverde y se levantaron del sofá, dejando solo a Katsuki y su inútil mentira de esposo feliz y fiel.
