trauma

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TW: CHILD ABUSE (NOT SA), dom/sub dinamics, blood play, nictophobia, SH.

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Su cuerpo temblaba ligeramente, veía esa pequeña rendija en donde la luz del pasillo entraba a ese oscuro lugar, sollozó mientras se abrazaba a si mismo mientras sentía toda su ropa mojada por las lágrimas que habían estado saliendo por más de una hora, enterró sus uñas en sus palmas con fuerza y sintió como algo escurría al piso, la poca luz que entraba le hizo ver el rojizo en su piel y las gotas de sangre en la loza de su cuarto.

“¡Cuando dejes de llorar te abriré!”

Saltó en su lugar al escuchar el grito de su padre, se alejó de la puerta gateando y se subió a la cama, miró el techo y de nuevo las ganas de llorar cubrieron su pequeño e indefenso cuerpo.

No tenía caso gritarle a su padre que abriera la puerta, no tenía caso huir, sabía que en algún lugar lo encontraría.

Se tapó con sus cobijas, no quería dormir, tenía que prender su pequeña lámpara de su mesita de noche pero su padre cortó el cable.

Se hizo bolita en su cama, se abrazó a si mismo, intentando dormir.

No sabía que hora era pero sabía que ya había pasado su hora de dormir.

Y si no dormía, papá vendría a pegarle nuevamente con su cinturón.

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Quince años después

El cinturón pasó por su piel, la sangre seguía saliendo de sus brazos y muñecas y observó como el mayor se ponía de cuclillas, tomaba su brazo y pasaba su lengua con suavidad para limpiar el líquido rojizo, el azabache besó y succionó, haciendo que una mueca de dolor apareciera en su rostro lleno de pecas y lágrimas, los ojos azules lo miraron y la otra mano del hombre de traje negro acarició sus mejillas, limpió la humedad en estas y pasó su pulgar por sus labios llenos de mordidas y sangre seca.

Touya lo tomó de las piernas, lo abrazó y lo subió a la cama, separó sus piernas y sacó de nuevo el bisturí, pasó la hoja por su ingle y la sangre empezó a brotar, el pelinegro besó su pierna y llegó hasta la cortada, empezó a lamer y saborear mientras veía al peliverde quien estaba acariciando sus cabellos, el mayor sonrió y se separó de su piernas y se acercó a los labios del menor, lo besó delicadamente y lo obligó a saborear su propia sangre.

“¿Cómo se dice?”

“Gracias señor”

Touya asintió, besó su frente y el cuerpo de pecoso tembló al ver el cinturón negro, cerró sus ojos y se escondió en el pecho del turquesa, escuchó la risa del hombre y suspiró.

“Podemos usarlo después”

“Me parece bien, señor”

El azabache asintió, abrió un cajón y sacó un botiquín y lo abrió para luego sacar vendas, curitas y agua oxigenada.

“Esto dolerá un poco, cariño”

Asintió, cerró sus ojos y sintió el ardor a lo largo de su brazo izquierdo, después la rasposa sensación de la venda y un beso en la palma de su mano. Sintió de nuevo el ardor en su otro brazo, lo rasposo y un beso.

“Lo hiciste bien, mi pequeño conejo”

El pecoso sonrió, separó sus piernas y sintió las manos grandes en su piel y una de ellas acarició su entrepierna, suspiró y observó como un curita de color rosado ahora estaba en la cortada de su ingle, Touya se inclinó un poco y besó el monte de venus que la prenda de color rosa pastel cubría su intimidad.

El mayor le ayudó a ponerse su pijama, las manos calientes del azabache hacían que leves gemidos salieran de sus labios, haciendo que su cuerpo también se calentara y su entrepierna tuviera esas cosquillas que sentía al sentir como su señor cortaba y abría su piel con el bisturí o cutter.

“Gracias señor”

Recibió un beso en su frente, observó como el mayor comenzaba a desvestirse enfrente de él y apretó sus piernas, comenzó a moverlas en círculos para poder sentir ese frote que hacía que su ropa interior se humedeciera.

El mayor se puso el pantalón de su pijama y los ojos verdes observaron la espalda llena de rasguños que sus manos habían hecho la noche anterior.

La cama se hundió, el peliverde se acercó a los brazos de Touya y este lo cubrió con sus extremidades pálidas, besó su frente y suspiró, aplaudió tres veces y las luces se apagaron, dejando sólo la pequeña lamparita que le había comprado a su conejo en su cumpleaños.

𝗢𝘂𝗿𝘀Donde viven las historias. Descúbrelo ahora