15

4.6K 489 61
                                    

Un alma débil puede
ser corrompida dos veces.

..

Se sentía temblar bajo las sábanas, su cuerpo caliente desprendía ligeros espasmos que no entendía, pues no tenía ni estaba haciendo frío ¿qué le pasaba?

Abrió los ojos poco a poco encontrándose con la oscuridad de la habitación. Su respiración era irregular y toda su piel era bañada con una fina capa de sudor.

-¿Taehyung?- llamó en un susurro, moviendo su brazo ligeramente al otro lado de la cama con la intención de encontrar un cuerpo. Sin embargo, solo pudo dar con el vacío-. ¿Taehyung?

No obtuvo respuesta.

Se incorporó poco a poco con la intención de levantarse y buscarlo, pero no pudo ir más allá cuando alguien se abalanzó sobre él. Una mano se aferró a su cuello cortandole la respiración.

-Mi lindo Jungkookie.

-T-Taehyung...

-¿Dime, cariño?

-¿Q-qué ha...haces?

-¿No es muy obvio?- el mayor se inclinó dejando un beso en la frente empapada de sudor-. Te quiero solo para mi, amor. Y si estás vivo corro el peligro de que te vayas de mi lado...

-¿Qué...?

-Por eso, tengo que matarte.

Jungkook intentó pelear. Arañó su piel, le pegó en los brazos, incluso le jaló el cabello. Pero nada funcionaba para que Taehyung se quitara de encima, y cada vez el oxigeno llegaba menos a sus pulmones.

-Que tengas dulces sueños.

Aquellas palabras fue lo único que pudo escuchar antes de que todo se volviera completamente negro.

-¡NO!

El grito resonó en toda la habitación haciendo eco. Su pecho subía y bajaba con intensidad dificultandole respirar.

-¿Jungkook? ¿Qué pasa?- Taehyung encendió la pequeña lámpara que estaba sobre la mesita de noche. Parpadeó varias veces antes de enfocar el rostro de Jungkook completamente descolocado.

-Tu...

-¿Qué te pasa? ¿Por qué gritas?

-Tu querías asesinarme.

-¿Qué?

-En el sueño, tu querías asesinarme- dijo esta vez. Sus ojos se llenaron de lágrimas y su cuerpo se estremeció.

Kim frunció el ceño confundido, pero de igual manera se acercó hasta abrazarlo y envolverlo en sus brazos.

-Q-querías matarme pa...para que no estuviera con nadie más...

-¿Qué cosas extrañas está creando tu mente?

El lugar se sumió en completo silencio, lo único que se escuchaba eran los sollozos del menor que iban desapareciendo al pasar los minutos.

ESTOCOLMO | KTH&JJKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora