【23】

234 18 5
                                    

                          Sus pies dolían, había corrido bajo el Sol por un buen rato y el calor comenzaba a aumentar, siempre tenía ese odio por las altas temperaturas en las que no podía tapar sus emociones con una capucha, cosa tonta porque jam...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


                          Sus pies dolían, había corrido bajo el Sol por un buen rato y el calor comenzaba a aumentar, siempre tenía ese odio por las altas temperaturas en las que no podía tapar sus emociones con una capucha, cosa tonta porque jamás podía, pero era una forma de verlo suya. Suspiró cansado, su habitación seguía sucia y no iba a arreglarlo por nada del mundo, exceptuando una visita sorpresa de quien él ya sabía. Tenía una llamada perdida de Jane pero desconocía el motivo, mucho menos se lo esperaba.

—¡Mierda! Que calor...

Eyeless, su amigo más confiable en ese hogar estaba a su lado sufriendo la temperatura, unos pantalones doblados todo lo que podía hasta justo debajo de la rodilla y una camisa de manga corta no era suficiente. ¿De dónde había salido ese calor infernal? De un día al otro la lluvia desapareció.

El chico endemoniado estaba a punto de caer de la cama de su compañero, el asesino, dueño de la cama y la habitación en sí, estaba apoyado en la pared sintiendo como su amigo se resbalaba por sus piernas.

Solo se preguntaba por qué la chica le había llamado hacía ya una hora, no le mandó ningún mensaje por que esperaba el suyo explicándose. Pero nada.

—Tu perro estaba acostado en el jardín como una alfombra...¿Y si se asa? ¿Nos lo comemos?

Tras decir aquello empujó al chico de piel grisácea al suelo, haciendo que cayera de cabeza. Con un solo empujón de su pie le demostró lo imbécil que se le hizo, aunque solo bromeara.

—No seas tonto...ese perro es más fiel que tú a mí.

—Normal, ninguna chica te lo sería jamás.

Escuchó varios pasos simultáneos moverse cerca, la casa al ser de madera se escuchaba cada vez que alguien se movía cerca, los pasos en el pasillo llamaban siempre la atención y esa vez no solo a Jeff. Jack se levantó del suelo y miró hacia la puerta, la voz grave y distorsionada de Slenderman estaba al otro lado pero no se llegaba a entender bien el qué decía, como si susurrara.

De un momento a otro la puerta se abrió.

—Y aquí está tu hermano, como siempre...haciendo el tonto.

Detrás de la puerta la figura alta de su hermano Liu sujetaba la cintura de la chica que hacía poco tiempo le había llamado, observando de lleno sus bóxer, su camisa de manga corta y al chico que también parecía vestir no de forma muy cómoda arremangado por el calor. La cama estaba terriblemente desecha por cómo se había estado moviendo el chico de cuencas vacías.

Lo admitían, la imagen no parecía muy santa, repletos de sudor, cama desecha y mal vestidos.

—Liu, Jane...Espera ¿¡A quién llamas tonto?!

La chica solo soltó una suave risa entre sus labios.

—Vaya...mi hermano siendo tan cerdo, no me lo puedo creer.—El castaño estaba siendo sarcástico y él lo notó.—Hola Jeff.

Gruñó, no se llevaba para nada bien con él y no por el incidente, Liu no lo recodaba debido al grave trauma que causó su mal estado psicológico, tanto como a él, sino que la actitud que había tomado gracias a la influencia de Sully y su resentimiento picaba, tanto como el de Jane. Por algo convivían, a Liu la presencia de la chica era tranquilizadora, porque sabía que se llevaban bien, que ella le comprendía y ambos iban de la mano.

Literalmente, cosa que hacía que el calor del verano empeorara, suponía. Solo era el agobio de la situación.

—Jeff...¿Estás bien?

Sentía su cara arder, no sabía si era la rabia o la vergüenza. Volvió al mundo real, sus manos no estaban agarradas, simplemente la mano de su hermano estaba bastante cerca de la suya, por un segundo había visto cosas que no eran.

—Ah...esto...sí. ¿Qué hacen aquí?—Se acercó a la puerta, sin si quiera preocuparse por su amigo que estaba ahí, parado y observando todo.

—Liu y Jane vinieron de visita, hace mucho que no tenía a los dos Woods en la cabaña.—Slenderman comenzó a caminar por el pasillo.—No sé si me gusta o me perturba...más bien me hace gracia verte tan inquieto.

Apretó los puños, ¿Por qué ese bicho solo le hacía las gracias?

—Ahora regreso, tengo que hablar unas cosas con Jack.

Jane entró en la habitación desastrosa bajo la mirada del hermano mayor, algo confundido solo asintió y se fue siguiendo los pasos de Slenderman. El de la piel quemada suspiró en cuanto la chica cerró la puerta y fue a ponerse unos pantalones.

—¿Por qué me llamaste?

La chica puso ambas manos detrás de su espalda, no sabía cómo explicar lo que sucedía y se sentía algo nerviosa. Antes de poder decir nada recapacitó, como si realmente su mente se hubiera reiniciar buscando palabras nuevas con las que justificar esa llamada inocente. Quizás fue mala idea lo que dijo.

—Nada importante...Liu ha venido a ver cómo está los demás, no a ti precisamente.—Tomó aire.—Quería decirte que no le digas nada de que...nos vemos, es todo.

Los dos varones se miraron entre sí algo confundidos, Jack ya había escuchado lo que pasaba últimamente y al tanto de cómo se sentía el Killer solo tenía el pensamiento de "Catástrofe" por qué ese era su amigo y sus planes, todo lo que intentaba atraía a la mala suerte y posiblemente la chica le estaba mintiendo, dejando de sentirse segura a su lado y decidiendo llegar con alguien que pudiera con él.

Sus pensamientos de desconfianza eran así.

—Ajá, ¿Por qué te tienes que ir tan rápido con Liu?—La frenó, antes de que pudiera salir de la habitación.—Tenemos cosas que hablar.

—Si quieres quedarte aquí hazlo, los Proxy no están y la casa está casi vacía, te vas a aburrir. ¿No es eso lo que quieres, no?

La chica se quedó en silencio agarrando el pomo de la puerta, tenía manchas secas y estaba ligeramente pegajoso, pero no era nada a lo que ya estuviera acostumbrada.

—Lo siento, tengo que ir con Liu.

La figura femenina desapareció de su habitación, simplemente se negó a decir nada más e incluso a pesar de parecer sospechoso se fue corriendo en búsqueda del mayor que le había ofrecido asilo en su hogar. Ambos asesinos se miraron, Jane no estaba siendo clara.

—Qué raro...¿Le molestaría a Liu si vosotros os veis?—Jack se cruzó de brazos.—¿Y si Jane tiene una relación con tu hermano?

Jeff gruñó, evitando mirar a su amigo obviamente molesto.

—Era solo una teoría.

—No me estés jodiendo Jack, mañana duermes en tu habitación.

Hemotoxin-

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Hemotoxin-

Text me back 『Janeff』HIATUSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora