Ver a Amie entrar por la puerta de la iglesia es como observar miles de estrellas en el cielo, como ver estallar fuegos artificiales en una noche de año nuevo. Ella está allí, vestida de blanco, con un vestido corte princesa, escote corazón, mangas de encaje y pedrería, una trenza en su cabello estilo corona, y el resto del cabello suelto en rulos. Tiene un velo que cubre su rostro por delante y atrás es largo como dos metros ¡Está bellísima!
Va de la mano de su papá, ambos se miran, luego ella mira a ambos lados, y ahora me mira ¡ME ESTÁ MIRANDO A MÍ!
No puedo describir el sentimiento de su mirada, parece sorprendida, consternada y a la vez emocionada de verme.
—¡AMANDA! ¿QUÉ RAYOS HACES?
¡Ah no! ¡Eso sí que no! ¿Cómo se atreve a gritarle a MI Amie en mi presencia. ¡Ohh no! Amie se cae al suelo al escuchar la voz de John.
—¡AMIE!
Gritamos al unísono John y yo y corremos al rescate de Amie.
—¿Estás bien?— le digo mientras la tomo de las manos y la levanto con suavidad, ella no deja de verme a los ojos. Los tiene brillosos como sí quisiera llorar, pero me sonríe ¡WOW! Verla así me dan ganas de besarla y llevarla corriendo lejos de todo este caos.
—Amanda, por favor explícame qué ocurre, porque no entiendo nada.
Nos interrumpe John de nuestro hermoso momento. Parece furioso, y tiene razón ¡Yo lo estaría! Es solo que Amie no tiene la culpa de nada.
—John por favor, yo puedo explicarlo
—No estoy hablando contigo— ¡WOW! John me acaba de empujar, y yo me contento para no responder de la misma forma ¡O peor!
—¡Hey! ¡Tranquilos! Hay que discutir esto en otro lugar porque yo tampoco entiendo.
Nos calma el pastor Josué, me mira desconcertado, él quiere una explicación.
—Papá, yo te puedo explicar .
¡Vane no! ¡Rayos! Ahora Amie estará enojada con su hermana.
—Vane ¿Tú sabías todo?— Le pregunta Amie a Vane con lágrimas en los ojos.
¡Dios! Detesto verla llorar, esto se salió de control. Vane la mira, llora y asiente con la cabeza.
—Adam, por favor. Explícame qué es lo que pasa, y quiero la verdad— esta vez Amie me pide una explicación, con lágrimas en los ojos, el día más importante de su vida y yo lo arruino, no quería que fuera así.
—Amie...John...pastor...yo...les diré la verdad — me alejo un poco, me aclaro la garganta, y comienzo a hablar.
—Desde que conocí a Amie en un servicio de jóvenes me impactó por completo. En ese momento no entendí que había pasado en mí. No sabía si era solo el hecho de su belleza, o su amor por Dios, tal vez la manera de estar en paz a pesar del caos de su alrededor, creo que el solo hecho de ser ella me conmovió desde el primer día. Yo no supe cómo manejar esa situación, mi corazón no estaba preparado para el amor.
—¡Nadie lo está Adam!— me interrumpe John
—Es verdad—miro a Amie fijamente.
—Nadie está preparando, así que no me justifico— me acerco, tomo a Amie de las manos, John me mira como si quisiera matarme pero no me importa, mi mirada está puesta en ella en este momento.
—Sé que te hice mucho daño. Y me arrepiento tanto de eso— mis lágrimas empiezan a salir, y ahora hablo en gemidos.
—Perdóname Amie, en serio perdóname. No quería lastimarte, lo que yo más quería era amarte, pero no sabía que podía hacerlo, pensé que era incapaz de amar, y no me sentía digno de ti. Gracias a tu gran amor pude ver el gran y maravilloso amor de Dios, ese amor que me sanó, y entonces entendí lo tonto que fui, pero ya era tarde, tú estabas a punto de casarte, y mi mayor miedo era perderte, me desesperé tanto que até a John para que no viniera— me detengo y miro a John, y luego a Amie otra vez.
—Y vine yo en su lugar, quería probarte que ya no quería hablar en puntas. Quería que vieras que le decía ¡Adiós a las puntas! Y que era capaz de ser valiente y admitir que no puedo vivir sin ti— suelto sus manos y me alejo ligeramente, miro esta vez a todos, incluso los de las sillas, que tienen sus celulares arriba grabándome.
—Pero obviamente no fue una buena idea. Ustedes se aman, y la prueba es que tú pudiste llegar a pesar de mis intentos por alejarte, John. Perdón por esto Amie, perdón pastor, perdón John. Y por cierto, Vane fue obligada a participar, ella no quería, no es su culpa— Con el dolor de mi alma camino unos pasos hacia adelante, tomo la mano de Amanda y la de John, las uno y les digo.
—Que sean muy felices juntos. Dios los bendiga.
Siento que se me parte el alma mientras me alejo de ellos por la alfombra roja en dirección a la puerta. La abro miro hacia atrás, y está Amie mirándome <<¡No Amie! ¡No me mires así por favor, porque corro a besarte y raptarte para siempre!>> No, no, no. "Dios ayúdame a controlarme" trago saliva, y salgo de allí sin mirar atrás. Voy a casa, confío en ti Señor, perdóname por lo de hoy, te pido que dirijas mi vida, porque ahora no tengo más fuerzas, estoy quebrado y no puedo más. Te necesito.
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Puntas
Teen FictionPuntas, misiles, mejor conocidas como indirectas muy directas. Esta es una historia donde Adam y Amanda, dos enamorados, no pueden expresar sus sentimientos por sus conflictos internos, y la manera que encuentran para hacerlo es por medio de las lla...