Miraculous: Demasiado Pequeño

//Chapitre 45//

Nathalie veía desde la acera como Adrien conversaba con la chica que había defendido hace tan solo unos días, repentinamente una sonrisa de orgullo y satisfacción se formó en el rostro de la mujer, parecía una madre viendo como su hijo empezaba a caminar en el largo terreno del amor.

─¿Mon Coeur?.

Dijo alguien, aunque ese alguien y dicho apodo ya no son desconocidos, la mujer se giró levemente sin borrar su sonrisa y observó a la persona que la llamaba.

─¿Que haces aquí?─ agregó Samuel con notorio desconcierto

─¿Acaso me sigue señor Burden?─ replicó con gracia y un poco de seducción

─Para nada. . .¿tu quizás si?.

─Para nada. . .solo vine a hacer mi trabajo, traje a Adrien a la escuela─ lo señala a lo lejos, el chico ahora estaba abrazado a la azabache

─Amor adolescente. . .¿recuerdas?.

─El más hermoso y más cruel─ acotó ─¿Tu que haces aquí?

─Vine a ver a mi prima Calie, ¿te gustaría venir conmigo?.

─Me da curiosidad, siempre tuviste una relación estrecha con ella pero jamás tuve la oportunidad de verla─ extiende su brazo

─Hoy es el día.

El hombre entrelaza el suyo con el de ella y ambos suben las escaleras; todo paso tan rápido que Nathalie no lo podía creer, jamás pensó que la grandiosa prima que Samuel tanto nombraba se trataba de ella, las dos ahora se miraban con desafío sin entender como la vida las ponía nuevamente del mismo lado. . .resulta que "Calie" no era un nombre, sino un diminutivo, de nada más ni nada menos que "Caline", si, la maestra de cuarta, usurpadora y trepadora que se metió con su jefe aprovechándose de que estaba ebrio.

─¿Por qué no me di cuenta?─ se quejo Nathalie

─¿Ella es la mujer de la cual tanto hablas?─ bufo la docente

─La mujer más hermosa de toda París y el mundo─ sonrió Samuel

─Basta, no tengo tiempo para esto─ bufo Nathalie ─Y lo peor que no te puedo culpar por las cosas que hace tu prima─ se da la vuelta y se va de ahí pegando un gran portazo

─¿No te quiere?.

─Me odia por haber tomado su trabajo unos días. . .

─Es muy posesiva. . .pero en el fondo una buena persona, dale tiempo, te querrá.

─No me interesa ganarme el amor de la señorita Sancoeur. . .

─A mi si me interesa y eres la única familia que me queda, asíque espero que puedas llevarte bien con ella.

─¿De verdad están saliendo?.

─No oficialmente, pero si todo sale bien será mi novia muy pronto.

─¿No tienes competencia?.

─Si─ acomoda su cabello ─Pero él la daño lo suficientemente como para que pueda tener mi oportunidad

─¿Puedo saber quién es ese "él"?.

─No Caline, es algo suyo, tanto que ni siquiera yo debería saberlo, pero Theo es un poco idiota.

─¿Theo su hermano?─ el asiente ─¿Se conocen?─ el vuelve a asentir ─Deberias invitarlo a cenar un día de éstos

─¿Soy yo o pusiste tus ojos encima de Theo?.

─Me parece alguien interesante, pero no te confundas, me gusta alguien más, y de verdad.

─Espero no salgas lastimada.

─Prometo que no. . .iré a dar clases, te veo en la noche─ besa su mejilla y se va

Samuel sonríe y luego también se va, a la salida reviso los alrededores para ver si Nathalie seguía por ahí, pero la realidad era que de verdad se había ido, eso lo entristeció, esperaba que ella estuviera ahí, por suerte ya tendría tiempo para verla.

Mientras tanto la susodicha llegaba a la mansión, rápidamente se encaminó al atelier, allí encontró a Gabriel con una modelo, la mujer estaba en ropa interior y esté tomaba algunas medidas en ella, ninguno de los dos se percató que estaban acompañados, luego Gabriel tomo un par de telas y las acercó al cuerpo de la joven.

─No me convence─ musito ─Tienes la piel demasiado clara─ se quejo ─No me mal intérpretes─ acotó después de darse cuenta que podría ser tomado de mala manera ─Es una gama de colores que se verán mal en ti─ se aleja

─¿Hay algo que pueda hacer?─ pregunto con pudor

─Por el momento no, vístete─ se gira y ve a Nathalie, está estaba ahí observando la escena ─Hola─ dijo completamente embobado, detrás suyo la modelo se colocaba sus prendas

─Hola─ replicó ella con desconcierto

─Con su permiso me retiro señor─ musito en tono bajo la modelo y sin esperar respuesta salio del lugar

─¿Llevas mucho tiempo aquí?─ niega ─Que bueno─ se acerca ─¿Podemos hablar?

─Adelante─ se cruza de brazos

─He estado algo conflictivo estos días. . .comencé a sentir cosas que antes no me hubiera imaginado.

─Si me disculpa no quiero hablar de eso─ el contrario se sorprende

─¿Te molesta?.

─Sinceramente sí─ suspira ─No es algo que me gustaría escuchar, ni ahora, ni nunca

─No sabía que te molestará. . . perdón.

─No se disculpe, es su vida, pero creo que acordamos que si me disgutaba algo se lo diría, esto me disgusta, no lo puedo aceptar, me hará sentir incomoda el resto de mi vida y prefiero evitarlo.

─¿Enserio?.

─Si señor.

─Jamas creí que esto iba a pasar.

─Yo tampoco, pero está pasando y prefiero que las cosas se queden así como están.

─Ya veo. . . estaré en mi habitación, que nadie me moleste.

─Entendido.

Gabriel sale del atelier viviendo por primera vez lo que se siente que te rompan el corazón, todo este tiempo creyó que ella lo iba a corresponder, que podrían ser felices, pero la realidad era otra, todo indicaba que le disgustaba tanto al punto de incomodarla.