Desayunaron riendo, Taehyung tenía un mal presentimiento, pero ignoró porque a veces era muy desconfiado.
- Papito, ya estoy listo, ¿puedo esperar afuera mientras te cambias?
- Si bebé, solo no salgas a la calle ¿sí? Quédate en el jardín.
- Lo sé papito, no hace falta que lo digas siempre, soy un grande.
- Jajaja bien grandote espérame allá, bajo en unos minutos.
Hyuk jugaba con su perrito Yeontan, reía a carcajadas cuando podía ganarle al perrito en coger la pelota más rápido, lo que llamó la atención de más de un vecino.
Quien al verlo se acercó al niño, cuando lo vio, sintió la necesidad de abrazarlo, el niño tenía unos ojos hermosos que él conocía muy bien, pero eso no podía ser.
- Hola... soy Jungkook, vivo al frente acabo de llegar con mi familia... ¿tú vives aquí?
- Si. —fue todo lo Hyuk respondió se sentía un poco incómodo, él no hablaba con personas extrañas.
- ¿Tus padres?
- No hablo con extraños.
- Bueno... ¿puedo saber tu nombre? Ya te dije el mío, ya no seriamos extraños.
- Me llamo Hyuk...
- Hyuk... me gusta tu perrito.
- Mi papi me lo regaló cuando cumplí seis.
- ¿Cuántos años tienes?
- Cumpliré siete el 11 de octubre.
- Pareces más grande.
- Sí, quiero serlo, mucho más, para cuidar a mi papá. —Jungkook quería descubrir que era lo que le llamaba tanto la atención de ese niño quizá esos ojos que había extrañado tanto.
- También tengo una hija de siete años, está en casa ahora.
- Estoy esperando a mi papito, me llevará al parque.
- ¿Cómo se llaman tus papás?
- Solo tengo un papá, se llama Taehyung. —el corazón de Jungkook se paró ese instante, pero se imaginó muchas cosas entre ellas la más coherente para Jungkook que Tae hubiera adoptado, aun así, los ojos de ese niño eran igual a los de Taehyung.
- ¡Bebé!! ¡Ya estoy listo vámonos! —Jungkook al escuchar su voz, esa que había imaginado que podía escucharla solo en sueños, se quedó helado.
Quería saludar, quería ponerse de rodillas y pedirle perdón, quería llorar, estaba hermoso, mucho más hermoso, delgado y perfecto, mucho más de lo que ya lo era.
Pero Taehyung no lo reconoció y si lo hizo, su lobo no lo dejó ni pensar porque Mutó y se fue encima de Jungkook, lo atacó de una manera furiosa y Jungkook no tuvo de otra que convertirse en lobo también, Taehyung seguía siendo el lobo más hermoso que haya visto en toda su maldita vida.
Trató de calmarlo, pero Taehyung estaba furioso quería atacarlo de verdad, quería dañarlo, quería matarlo, pero Jungkook lo atrapó con todas sus fuerzas y se puso sobre él haciendo que Taehyung quedaba bajo suyo, pero Taehyung no se mostró sumiso ni derrotado, de verdad quería matarlo, quizá no Taehyung, pero sin duda su Omega quería despedazarlo, pudo sentirlo y le dolió, su lobo quería que su Omega lo matara.
"¡Aléjate de mi hijo, no te le acerques jamás! ¡no dudes que voy a matarte si lo haces!" el Omega habló amenazante y el Alfa se sintió herido, Taehyung estaba luchando por soltarse y aulló al no poder hacerlo.
Hyuk vio como el lobo negro estaba inmovilizando a su papá, no lo pensó dos veces, mutó y mordio una pata a Jungkook haciéndolo chillar de dolor al lobo mayor, quien soltó a Taehyung, cojeando y se alejó, asombrado de que ese niño, haya podido mutar y morderlo, se alejó hacia su casa mientras Taehyung tomó a su bebé y se metió a su casa.
Jungkook entró a su casa y su madre al verlo herido corrió a curarlo, no era profunda la herida, aun así, estaba sangrando.
- ¿Qué pasó Jungkook? —su madre estaba preocupada.
- Mamá... Taehyung me desconoció, me atacó, me dijo que no me acercara a su hijo jamás o va a matarme, no lo dijo Taehyung, en realidad es su Omega quien tomó el control cuando me vio, me odia y mi lobo esta tan herido.
- ¿Hijo? Taehyung no...
- Si, tiene un niño muy hermoso, no sé si lo adoptó, pero tiene sus ojos.
- Seguro lo adoptó cariño, ahora todo es posible, dale tiempo, tal vez se sintió amenazado y por eso te atacó, pero dale un poco de tiempo debió impactarle tu presencia.
- Espero mamá, mi lobo me está odiando, él lobo de Taehyung me quiere muerto, ni siquiera Taehyung pudo controlarlo y yo me siento una mierda.
- Calma hijo y ¿cómo esta Tae? —preguntó su madre mientras desinfectaba su herida.
Hermoso... mamá, más hermoso que antes. —dijo mientras una lágrima se le escapaba inevitablemente.
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Sweet Night-Kookv
Fanfictionellos eran amigos desde que tienen memoria... Perdóname... no volveré.