Sweet Night-Kookv

CAPÍTULO 3

Jungkook se golpeaba a cabeza contra la pared por ser tan malo con Tae, jamás había tratado así al castañito, no quería hacerlo llorar.

Tomó su chamarra y salió a la casa de Tae.

- Señora Kim ¿puedo ver a Tae?

- Pensé que estaba contigo cariño... tal vez está con Yoongi

Fue a casa de Yoongi y no estaba ahí, Yoongi quería ir a buscarlo con él, pero debía acabar de hacer una tarea con un compañero así que solo salió Jungkook, lo buscó por el vecindario, por el parque, pero no estaba en ninguna parte, fue al otro parque que estaba un poco más lejos.

Y ahí estaba sentado en un asiento, podía sentir su aroma perfecto y dulce, estaba con la misma camisa cuando fue a su casa, estaba haciendo frio, pero Tae parecía no sentir o no le importaba, se acercó cautelosamente.

- Tae. —pero el castaño apenas escuchó a Jungkook, se puso de pie y le dio la espalda, no quería que viera sus ojos rojos e hinchados por su llanto.

- ¿Qué quieres? Si mamá te mandó a buscarme ya le mande un mensaje diciendo que ya voy, vete. —dijo con su voz ronquita.

- Tae...

- Solo vete, Jungkook. —dijo sin mirarlo.

- Tae, lo siento, yo...

- No me interesa, solo vete. —dijo comenzando a caminar en dirección contraria a sus casas.

- Tae espera ¿a dónde vas? —se acercó y quiso tomarlo del brazo, pero Taehyung lo esquivó de una manera demasiado brusca.

- ¡Déjame! ¿Por qué vienes si no quieres verme? ¿por qué me buscas si no te importa? solo vete, déjame. —Jungkook lo tomó de ambos brazos y cuando vio el rostro empapado de lágrimas, quiso golpearse nuevamente.

- Tae perdón... perdóname, soy un tonto—lo abrazó, aunque Tae no le devolvió el abrazo lloró en los brazos de Jungkook mientras este le daba besitos en su cabecita.

Jungkook y Taehyung eran del mismo tamaño, pero Taehyung era mucho más delgado.

- Bebé, vamos a casa, por favor no llores, me siento la peor persona de mundo.

- Lo eres... pensé que ya no me querías, nunca me gritaste.

- Lo siento Tae, realmente lo siento, no quise hacerlo solo estaba celoso... volvamos a casa ¿sí?

- Está bien... mamá va a matarme.

- Quédate a dormir conmigo.

- ...

- Le diré a tu madre.

- Está bien. —Jungkook volvió a abrazarlo, se quitó su chamarra y se la puso a Tae.

- Tú te enfermarás Jungkook, no me la des. —pero Jungkook se la dio igualmente.

- Tú me importas más que yo, pero nos abrazaremos hasta llegar a casa y así no sentiré tanto frio. —Tae lo abrazó y así fueron a casa de Jungkook.

Siempre hacían eso, pero sentía diferente, podía oler el aroma de Taehyung aun cuando nadie más podía hacerlo, pero no necesitaba decirle a nadie.

Tae salió de la ducha avisó a su madre que se quedaría con Jungkook, llamaron a Yoongi, pero no podía ir porque seguía con su tarea, así que solo quedaron los dos.

Jungkook se sentía nervioso, no sabía la razón, cuando ya estaban acostados con la luz apagada, Jungkook hizo la pregunta que tanto había casi carcomido su cabeza.

- Tae... si no fuéramos mejores amigos ¿serias mi Omega? —Tae se había planteado tantas veces esa pregunta, pero jamás tuvo una respuesta.

- Jungkook no quiero perderte jamás y creo que la única manera de tenernos siempre es siendo amigos, ¿no lo crees? —Jungkook no quería esa respuesta, pero sabía que Tae tenía razón.

- Entonces... ¿hacemos una promesa?

- ¿Cuál?

- Prometamos que pase lo que pase, no vamos a alejarnos, no vamos a separarnos, prometamos que siempre estarás para mí y yo para ti, sin importar que, prometamos que nos amaremos hasta el final.

- Está bien Jungkookie, prometo amarte hasta el final y estar para ti siempre sin importar qué y que pase lo que pase siempre serás mi prioridad y lo más importante para mí.

Por siempre...

Tal vez no sabían cuanto tiempo era un "por siempre"