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29- Caballitos de Mar

29-Caballitos de Mar

XiaoXue

Era un día hermosos en cierta isla tropical en medio de cierto mar, el agua cristalina de un pequeña arrecife coral lamia la orilla de la playa de arena limpia, donde una pequeña niña corria y schapoteaba al contenido de su corazón.

La pequeña parecia una niña humana de cinco años muy adorable con su vestido diminuto, cabello en dos bollos y misteriosos ojos blancos, salvo por varias diferencias notables.

Para empezar la niña no tenia orejas y en su lugar un par de aletas verdes sobresalian de su cabeza, y otra aleta sobresale en su columna y cuello, ademas de la parte superior de sus brazos y ambas piernas, en su cuello sobresalian dos lineas negras y sus dientes filosos.

No solo eso, si no que al rededor de esta aletas en varios tramos de su piel crecian diminutas escamas de pescado verdes como jade de bambú, y los dedos de los pies y las manos estan unidos por membrana semitransparente, describiendolos como palmeados.

A pesar de todas estas extrañesas la niño no era diferente a cualquier otra niña humana mientras se divertia jugando en la playa, hastas se podrian ignorar si no fuera por una diferencia fundamental.

A diferencia de los niños humanos la pequeña no se conforma con chapotear muchos tiempo, en cuando algo en el fondo del arrecife llamó su atención soltó la caracola con la que jugaba para nadar hasta el fondo de dicho arrecife con tanta facilidad como caminar.

No importa la edad ningun niño humano podría nadar con tanta habilidad, muchos menos aguantar tanto la respiración como esta niña que hata daba la impresión de poder respirar bajo el agua.

Más de diez minutos la niña de cinco años salto a la superficie y corrió por la arena cargando un cubo dorado lleno de agua hasta detenerse frente a un hombre humano que estaba sentado fuera de una choza de mareda vigilando a la niña no muy lejos.

Si lo miran bien, la niña y el hombra en realida comparten varios rasgos.

—Papi, papi ¡Mira lo que encontre! —Grito emocionada la niña queriendo molestrarle su hallazgo a su padre, cangando con dificultad la cubeta de oro llena de agua. —¡Mira, mira!

—¿A ver que tienes aquí A-Qing? —Los movimientos de Xiao Xingchen eran suaves mientras tomaba la cubeta de oro de las manos de su hija.

El cubo de oro en sus manos es un regalo que su esposo le entregó a su hija por su ultimo cumpleaños, y aunque XIao Xingchen desaprobó el ostentoso regalo, A-Qing lo ama tanto que no tiene el corazón para quitarselo.

Tuvo que conformarse con regañar a su esposo para que no vuelva a dar un regalo así, pero conociendo a Xue Yang y su obseción con el oro no le sorprendería que apareciera con una corona de diamantes para su proximo cumplaeños.

—¡Encontré algo raro! —A-Qing estaba muy encantada con su descubrimiento.

Viendo el entuciasmo de su hija finalmente observa el contenido del cubo, parpadeando dos veces ante el extraño pez dentro.

Es un pez que reconoce de sus viajes por el mundo, es amarillo y no tenia piernas ni aletas grandes, solo una cola prencíl y cabeza de caballo.

—Es un Caballito de Mar ¿Donde lo encontro A-Qing?

—¡En el arrecife! Eran dos pero no pude atrapar el otro. —Hace un puchero adorable recordando molesta como se escapó.

Justo en ese momento un apuesto joven con ropa ligera oscura salió de la choza de madera cargando un bebé de ni 1 años con aletas igal a la niña, solo que sin escamas.

—Nuestra pequeña ciega debe regresar al caballito de mar junto con su amigo pronto si no quiere que muera. —Apenas Xue Yang entendió la situación no tardo en regañar a su hija.

—¿De verdad morirá Papá? —La pequeña abrió adorablemente lo ojos alarmada por la noticia.

—A menos que la devuelvas, si. —No se molestó en endulzar la noticia, en su opinión ningu hijo suyo debe ser mimado en exceso. —Es una criatura sagrada para nuestra especie, no debe ser molestada y mucho menos separada así.

—¡A-Qing lo devolvera ahora! Papi damelo rápido. —Le hace señas a su papi y este le devuelve el cubo de oro. —¡A-Qing ya vuelve!

A-Qing es una niña muy responsable porque nada más tomar el cubo regresó corriendo al arrecife desapaerciendo apenas tocando el agua.

Xiao Xingchen se rie de sus payadas y le hace un gesto a su esposo para retrener al bebé. Xue Yang ya lo habia amamantado y dormido, por lo que se lo entregó sin problemas.

—¿De verdad son tan importantes los caballitos de mar? —Pregunta con curiocidad mientras mece al pequeño A-Lan.

—No tienes idea de lo importante que son para varias tribus tritones. —Duda por un momento antes de decidir explicarlo, no importa si lo hace sonar como un romantico. —Pero son un simbolo de un buen matrimonio.

Al ver el interes en su pareja sigue explicando.

—Son monógamos y sus parejas duran toda la vida, tanto así que si uno muere el otro morirá de soledad. La tribu Tritón Hippocampus y sus decendientes en otras tribus tambien heredaron estos rasgos, por lo que todas las tribus tratan de ser cautelosos al elegir pareja. Nunca sabes si hay un tritón hippocampus en tu linaje familiar.

Xue Yang recuerda la historia del fundador del Clan Lan, su esposa era de la tribu Hippocampus. Por lo que todos sus decendientes heredaron esos rasgos.

—Por esto lo tritones le damos mucha importancia al matrimonio, cuando juramos estar juntos de por vida no mentinos. Nuestra biologia hace que sea imposible para nosotros cambiar luego de opinión.

Por otro lado Xiao Xingchen esta asombrado por este aspecto de la cultura tritón y hasta tiene un poco de curiocidad por saber si su esposo tambien comparte sangre Hippocampus.

—Entonces por eso A-Yang es tan romantico, esta en su naturaleza. —Dice con voz cantarina aguantando una risita.

—¡XingXing no te rías!

—Jajaja.

Al final elige no preguntar, tienen tantos años casado con dos hijos y dos huevos en camino. Ya es feliz con su pareja así, no necesita pruebas para saber que su esposo lo ama.