Juanjo III y la guerra de unificación

Mensajes vía halcón

A la mañana siguiente me llegó una carta de Luis diciendo que me preparará, que ese mismo día los 12 nos íbamos a reunir en Tara.

Hacía mucho que no nos reuníamos todos, y que fuera en Tara era una novedad.

Entre todos montamos una improvisada sala de reuniones en mi cabaña donde hubiera espacio para los 12.

No tardaron en llegar. A algunos los recordaba, otros ni los conocía, pero pese a todo, nosotros éramos los 12 del sur.

-Hola a todos. Bienvenidos a Tara.-Saludé.
-Buenas Juanjo-Dijo Alfonso.
-Luis, si se puede saber, ¿para qué nos has reunido en mi ciudad?-Pregunté intrigado.
-Vamos dentro, os contaré todo.-Sugirió.

Entramos a la cabaña y volví a hacer la pregunta.

-Luis, ¿Qué pasa?
-Hace unos días recibí esta carta.-Dijo mientras nos la enseñaba.
-Está a nombre de Eric…¿Quién es Eric?-Dijo Pol.
-Yo soy Eric.-Dijo uno de ellos.
-Deben saberlo.-Le dijo Luis.
-Puede…
-¿Quién es Eric?-Pregunté.

-Nuestro espía.-Respondió Luis.
-¿Qué?-Preguntó Pol sin entender nada.
-La verdad es que Eric nunca ha estado con nosotros. Lleva ya más de un año en una misión secreta, está infiltrado entre los romanos. Gracias a él sabemos lo de la invasión.
-Joder…-Reflexionó Alfonso.
-¿Qué dice la carta?-Pregunté.
-Os la leo.-Siguió Luis.-”Luis, por fin tenemos una buena noticia. Los romanos han tenido algunos problemas en su hogar y nos dejarán descansar durante algunos meses. Pero estad alerta, mandaran un par de partidas a explorar la península.”
-¿Y cúal es el problema?-Dijo Gabriel.
-Que quizás sea falso.-Respondí.
-Exacto.-Dijo Luis.
-¿Y cómo lo podemos saber?-Preguntó Alfonso.
-Enviando una respuesta.-Respondí de nuevo.
-Pero…No podemos enviar cualquier cosa, no?-Dijo Gabriel pensativo.
-Para estar seguros deberíamos decirle algo que solo él pueda saber…-Seguí.
-Entonces…¿Le escribimos otra carta?-Sugirió Unai.
-¿Qué otra opción tenemos? ¿Plantarnos allí, en medio del imperio más grande de todos los tiempos y decírselo en persona?-Dijo Jan.
-Creo que sería buena idea hacerle más de una pregunta, para estar seguros.-Sugirió Marc.
-Vale, pero…No lo entiendo.-Dijo Alberto.-¿Por que iba a querer mentirnos?
-Imagina que Albion ha descubierto información esencial sobre Eric y le está suplantando. Nos mantendría ocupados y cuando menos lo esperemos atacaría.-Le respondí.
-Eric es el mejor en lo suyo, es imposible que hayan descubierto tanta información sobre él.-Siguió Enrique.
-Nunca se sabe…-Dijo Jan.
-Tenemos que estar seguros.-Acabé.
-Bueno, a escribir.-Dijo Pol cansado, como si no quisiera hacerlo.

Después de pensar mucho y de leer varios libros terminamos la carta que enviaríamos en respuesta.

-Así ha quedado.-Dije listo para leer el resultado.-”Eric, sentimos tener que hacerte esto, pero es lo único que se nos ha ocurrido para estar seguros. No sería la primera vez que suplantan la identidad de uno de nosotros, y por ello te haremos unas preguntas.

Nombre de cada miembro de los 12:

Primera batalla en la que participaste:

Nombre de tu ciudad más importante:

Nombre del general que nos arruinó la vida:"

Enviamos al mismo halcón que llegó con la supuesta carta de Eric a hacer el camino de vuelta.

Unos días más tarde, aquel mismo halcón volvió con una carta en su pico.

No nos movimos de Tara ya que sabíamos que el siguiente mensaje no tardaría en llegar.

-¿Juanjo, qué dice esa carta?-Preguntó impaciente Alfonso.
-Vale vale, tranquilos, leo para todos-Respondí.-”Esto es una tontería, Luis. Los romanos vienen, ¡el peligro es real! Pero entiendo tus dudas, así que responderé a tus preguntas.

Nombre de cada miembro de los 12: Luis, Eric, Alfonso, Gabriel, Jan, Unai, Marc, Enrique, Pol, Víctor, Alberto y Juanjo.

Primera batalla en la que participaste: La batalla en la muralla, en Dasar, una de tus ciudades hasta hace poco. ¿Es que no lo recuerdas? ¡Tú también estuviste allí! Esto es ridículo…

Nombre de tu ciudad más importante: Dasar. ¡Tú mismo me hiciste rey tras esa batalla!

Nombre del general que nos arruinó la vida: El general Táriq. ¡Cualquier habitante del sur de la península sabe eso!

Menudas preguntas tan estúpidas, pero en fin, si realmente era necesario ya he respondido.

-Eric”

-¿Entonces es él?-Preguntó Enrique.
-No cabe duda.-Dijo Luis.
-En ese caso tenemos tiempo para reponer fuerzas hasta que vengan los romanos.-Siguió Pol.
-Te olvidas de un pequeño detalle…-Intenté responder.
-Las partidas.-Me interrumpió Alfonso.
-Yo me refería a Albion, pero eso también.-Terminé.
-Podemos descansar, pero no bajar la guardia.-Concluyó Unai.