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-¿Estás bien, Olivia? -me preguntó Kit rascándose la nuca.

Asentí con la cabeza sin desviar mi vista del móvil, viendo el nombre Joe sobre la pantalla.

-¿Y Joe lo está? -susurró.

Esta vez si lo miré, moviendo mi cabeza de izquierda a derecha.

-No lo sé.

Miré mis pies, con mi vista sobre mis zapatillas converse. Kit, al notar mi desconfianza, me rodeó con su brazo izquierdo y me dio un apretón, como un abrazo. Seguidamente apoyé mi cabeza sobre su cuello.

-Gracias. -le dije.

-¿Por qué? -dijo. Sentía su respiración sobre mi cabeza.

-Por estar aquí.

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Apoyé mis dedos sobre el timbre y lo hice sonar. Se oyeron unos gritos provenientes del interior de la casa de Joe. Sonreí desconcentrada y vi la puerta abrirse, encontrándome a la madre de Joe.

-Hola señora Locke. -le sonreí.

-¡Olivia! ¿Qué tal?

-Bien, ¿y usted? 

-Bien, pasa. -dijo, abriendo más la puerta- Joe está en su habitación.

Asentí y le di las gracias. Acto seguido subí las escaleras hasta llegar a la habitación de Joe. Llamé a la puerta, y segundos más tarde se abrió.

-Olivia. -susurró, sonriendo.

-¡Joe! -me lancé a abrazarlo. Al principio no reaccionó, pero luego me rodeó con los brazos. Ahí entendí que Joe realmente necesitaba ese abrazo.

Una vez nos separamos, entré a su habitación.

-Y.., bueno, ¿que querías decirme? -inicié la conversación.

-Oh, eso.., es largo. -me hizo un hueco a su lado sobre su cama.

Me senté a su lado y apoyé mi espalda sobre la pared. 

-Pues empieza a contar. -musité.

-Pues, a ver... Hoy, había quedado con Sebastian, y estaba realmente emocionado por.., bueno, verlo de nuevo. Quedamos en la biblioteca, a unos metros del centro de la cuidad. Me entraron ganas de mear, y fui al baño. Sebastian me siguió, y acto seguido, unos segundos después.., me besó. Se sintió bien, estaba feliz. Al fin y al cabo me había besado la persona con la cual yo tenía un crush, ¿no? -dijo.

-¡Que bien, Joe! -dije, animada.

-La historia no termina ahí, Olivia. Luego, cuando salimos del recinto, se nos acercó una chica, la cual se supone que era la novia de Sebastian. Sebastian actuó como si no me conociera, se separó de mí, me dejó solo.., y la besó. Delante de mí, después de hacer lo mismo conmigo.

Su rostro cambió, al igual que sus ojos y su voz. Escondía sollozos, lágrimas y enfado. Y supe que Joe era lo más sensible que vería jamás. Era tierno, un amor de persona, demasiado para este mundo.

-Joe... -lo abracé- Cuanto lo siento, de verdad.

Me abrazó, comenzando a llorar. -tranquila, no es tu culpa siquiera...

Ambos nos separamos, y él me sonrió dolorido. 

-Dios, como odio este mundo. -dijo- No sirvo para nada, ni siquiera debería existir.

-¡Joe, no digas eso! -me reprimí- Eres de las personas que más amo en mi vida, ojalá hubieras llegado antes, en serio.

Soltó una risa por lo bajo y yo sonreí. Al fin y al cabo, ambos nos alegrábamos el día mutuamente.



Hola. Disculpen las horas JAJAJA, no he tenido tiempo de escribir, solo este poco. Mañana subo otro cap o actualizo este. Disculpen si fue muy malo o dramático, no sabía que poner. 

Al final, este capítulo no se lo he dedicado a nadie, no he tenido tiempo tampoco. Voy a dormir, no debería estar escribiendo.

Adiós. <3

Casualidad / Kit ConnorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora