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—Enzo.

La voz de mi madre traspasaba las paredes de la casa que estaba recién pintada de una tonalidad azulada que me gustaba mucho. Me quite un auricular y mire hacia la puerta de madera negra con un poster de la barca.

—¿Qué quieres mama?— le conteste.

—Ve a recoger la ropa de la azotea y me la traes.

Al instante puse los ojos en blanco porque odiaba hacerlo. No me gustaba ir a por la ropa y sobretodo me daba mucha pereza hacerlo. Me quedaban unos escasos días de vacaciones y la vuelta al instituto se acercaba más y más. Quería pasarme el día completo tumbado en mi cama con una limonada y viendo episodios de Modern Family sin parar.

—Ahora voy.

Me volví a poner el casco con el álbum al que yo llamaba la banda sonora de mi vida. Ultraviolence de Lana del rey. Haber, tengo que aclarar algo. Soy Gay pero no se lo he dicho a nadie, juego en el equipo de fútbol de mi instituto y si alguien se entera podría morirme, así que mi personalidad cambia completamente cuando estoy con mis amigos y en el instituto. Solo escucho reggaeton y si no aguanto más pongo algo de trap en inglés. Mis amigos no saben mi obsesión con Lana del rey y tampoco saben que el inglés se me da muy, per que muy bien aunque tenga que hacer como que no.

—Ahora no. ¡Ahora!— dijo mi madre abriendo la puerta.

—Joder, que susto mamá.

Mi madre había pegado un portazo que me había puesto los pelos de punta y justo al instante en el que entro me solto en el suelo una cesta de color azul celeste donde llevaba y recogia la ropa. Yo mire la cesta con una cierta cara de odio y me levanté de la silla del escritorio.

—Venga, rápido.

Yo caminé hacia la puerta donde estaba la cesta y al cogerla me miré al espejo que tenía a mi lado. Llevaba unos Short blancos y una sudadera de color azul mas oscuro que el de la cesta. Tenía el pelo revuelto y oscuro ya que me había duchado hacía poco y mi pelo seguía húmedo. Al ver como mi madre se iba por el pasillo que aún olía a recién pintado cerré la puerta y tiré la cesta en la cama. Hundí las manos en mi pelo y caminé lentamente hacia una de las dos ventanas que había en mi habitación. Una a cada lado de la cama de matrimonio que había en el centro. El paisaje de Barcelona era algo que a estas alturas ya cansaba.

I'm a brooklyn baby...— tarere. Últimamente estaba obsesionado con esa canción que escuchaba una y otra vez sin cansarme. ¿Por qué sería?

Respire profundamente y pensé en las cosas que podría hacer este año. Bueno en las tonterías que podría decir cuando empezamos las clases. Dios odio la vuelta al colegio es algo que nos podrían quitar perfectamente y que no me influiría nada en mi vida. Mi móvil vivro en el bolsillo derecho de mi short y rápidamente lo cogí.

Inefable (COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora