Imperfect - Isabela Madrigal ✓

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Luisa Madrigal, una jóven obligada a ser fuerte pase lo que pase, siempre tenía que acomodar casas y recuperar burros que se perdían todo el tiempo.

Ella nunca se quejó, siempre obedecía cuando la llamaban a buscar los burros y mover iglesias, ella tenía que ser rápida en encontrar a los burros si no los pueblerinos se decepcionarían, tenía que serle fiel a su 'trabajo' todo el tiempo, tenía que ayudar a todo y a todos...Tenía que ser la valiente y fuerte Luisa.

-¡Luisa!, ¡Los burros se escaparon de nuevo!

-¡Luisa, la iglesia!

•••

Mirabel Madrigal, una chica juzgada por la matriarca y los pueblerinos por el simple hecho de no tener un don, su familia siempre intentó incluirla en todo, pero después de todo, Alma mandaba. Y no podían hacer nada al respecto.

Alma le dijo a Isa que no se dirigiera mucho la palabra con la de rizos, ya que según la vieja era una "mala influencia",

La anciana le imploró ideas erróneas sobre su hermana, diciendo que no era especial por no tener ese don mágico.

Y como es lógico, Mirabel también con el tiempo fué distanciándose de la niña de las flores, formando tensión entre las dos hijas de Julieta.

Mirabel sólo intentaba ser incluida, ser como el resto de su familia, sin embargo esta tratando de ser aceptada "arruinaba" los intentos de Isa por ser perfecta, generando furia en la última.

Luisa y Mirabel se llevaban muy bien, la primera mencionada intentaba no excluir a su hermana menor en nada, le parecía una tontería que la traten como inferior sólo por no ser bendecida con un don. Y no quería que la de rizos se convierta en una oveja negra de la familia como su tío Bruno, Luisa recordaba las miles de quejas de los pueblerinos hacia el menor de los trillizos, y no quería que se repita la historia con Mirabel.

Isabela, por su parte, fingía indiferencia cuando se trataba de Mirabel, aunque muy en el fondo de su corazón la quería tanto como a los demás, tal vez se enojara por algunos actos de su hermana menor, pero en verdad se preocupaba por ella.

•••

Aunque sea difícil de creer, Isabela envidiaba a Mirabel, ella no tenía presiones, podía decir lo que quiera, actuar como quiera, y ser como quiera. Mientras tanto Isa tenía que hacer su mayor esfuerzo por ocultarse a si misma bajo el perfíl de la perfección.

Todos conocían a Mirabel Madrigal por como era, una extrovertida y alegre chica, mientras que Isabela no tenía una personalidad propia, sólo seguía las reglas de etiqueta al pie de la letra.

Ella era libre, y a Isa le habían cortado sus alas y encadenado en la perfección.