Una semana después. He estado adaptándome a esta vida.Lena y yo salimos a las calles para mostrarme lo que es Londres en verdad.
Por suerte no hacía tanto frío, pero tampoco diría que hace calor. Ya que siempre está nublado. Con el dinero que aún me queda, solo pude comprarme una caja de lápices y dos cuadernos como apuntes.
No he conseguido trabajo todavía. Fui a dos tiendas cercanas de la universidad y me decían que no necesitan más trabajadores.
Lena había salido y me quedo en la habitación dibujando bocetos.
La puerta se abre dejando ver a Scott.
—Lena Necesito que...ups...lo siento mucho.-
Scott mira hacia otro lado y yo sonrío tímidamente.
—No te preocupes. La próxima vez tocas la puerta.-
—¿Eh? ¿Tu dibujaste esto?-Scott se acerca a mi escritorio viendo los bocetos.-Es hermoso.-
—Gracias. Pero solo es un hobby.-
—¿Que? Pero, esto se ve muy bonito, el bordado más que todo. Sabes, estoy trabajando con una tienda de modas aquí en Londres. ¿Has escuchado la marca La Villa Rosé?-
—No.-Muevo mi cabeza negándolo.-Primera vez que escucho algo así.-
—Tengo mis prácticas en esa tienda. Es la única tienda que está aquí en Londres y muchas mujeres vienen hasta acá solo para verla. Mi trabajo ahí es solo de asistente para los diseñadores y aveces ayudo en la hora de crear el traje. Quiero decir, si estás urgente en trabajo, puedo ayudarte buscar un espacio ahí.-
—¿en serio? La verdad, me encantaría ir por una vez a ver cómo es el lugar.-
—¿Que tal mañana? Hablaré con la gerente y te aseguro que estará encantada en tener a alguien más en la tienda.-
—Bien.-Asiento.-
(...)
Al otro día. Scott vino a la habitación a las nueve de la mañana. Puse mi mejor ropa, porque iré a una tienda de moda y no quiero verme mal.
Tenía puesto una camisa manga larga de lana color rojo, un pantalón blanco y mis tenis. Tome mi teléfono y salí de la habitación.
Scott ya estaba en la entrada esperándome. Él con mucha calma me explico donde tomar el autobús para ir al lugar que vamos.
El camino fue alrededor de treinta minutos, es algo lejos la verdad. Llegamos a una calle con casi mucha gente, calles de muchas tiendas. Podía ver hasta marcas de lujos.
Caminamos como cinco tiendas más adelante y cuando llegamos el lugar se ve muy grande, había una mini televisión mostrando secciones de fotos de sus diseños. También la pancarta es hermosa, Scott abre la puerta para mi y yo entro.
Veo mi alrededor y había muchas personas moviéndose de un lado a otro.
Scott me hacía señas que lo siguiera y llegamos a recepción. —Señora Anna.-
—Si, señorita...si...intentaremos entregarle el vestido mañana...de acuerdo...gracias.-La mujer cuelga la llamada.-Esa mujer está loca! Hace dos semanas vino a probar el vestido y ahora lo quiere para mañana! Y eso que el encaje del vestido no está listo, Camry además no está en el país. -
—Señora Anna.-Scott la llama por segunda vez y la señora por fin nos presta atención.-Traje a mi amiga, la chica que te conté de ayer.-
La señora voltea a verme y ella abre sus ojos tan grande. Ella queda sorprendida hasta que ve a Scott.
ESTÁS LEYENDO
Una Vida, Dos caminos.
Science Fiction¿Que tan doloroso es perder a tu único pariente? ¿Ser una persona pobre y que al otro día te dicen que vienes de una familia reconocida? Kate Miller pierde a su único ser vivo en el planeta, su madre. Ella colapsa al ver las deudas que quedan todav...