Una Vida, Dos caminos.

Capítulo 64

Anoche fue lo máximo. Habíamos disfrutado que no pudimos salir para conocer Londres con todos. Pero igual nos reunimos en una cena.

Dos días después, Daniel y yo pensamos por fin en regresar a Nueva York con todos. Pero apenas estamos abriendo y tiene miedo que algo suceda. Así que me pidió que yo regresara a Nueva York.

Habíamos regresado al departamento. Teníamos a los sobrinos de Daniel aquí y no me molestaba la verdad. Ellos me caen súper bien, pero Jazmín es algo cerrada. Según Hannah me contó que no tiene amigas de su edad, me sentí muy mal porque me comentó que también es la única chica de la familia de su edad. Pero eso cambiaría, en unos pocos años.

Daniel y yo no hemos pensado en tener hijos, solo estamos esperando el momento indicado.

—Está bien que tú regreses a Nueva York. Ve y disfruta de unas pequeñas vacaciones.-Me dice Daniel cuando estamos en la habitación solos y tenemos a sus sobrinos en la sala viendo un maratón de películas.-Estaré bien aquí. Solo será unos meses.-

—¿Y que haré en Nueva York? Además de visitar a mamá en California.-

—Tienes mucho que hacer. Puedes ir buscando algún terreno que te guste y puedo comprarlo. Crearemos otro imperio ahí.-

—Bien, pero estaré por un mes, ni un día más.-

—Hecho.-Asiente Daniel.-

Todos ya están preparados para marcharse, James y yo decidimos ir a California antes de ir a Nueva York.

En el aeropuerto, nos despedidos de todos, pero nos volveríamos a encontrar muy pronto. Obvio Daniel se quedó. James y yo fuimos los primeros en montarse del avión e irnos.

—Después de ocho años sin montarme en un avión.-

—Regresaras de donde viniste.-

—Solo será una pequeña vacaciones.-

Le pedí a mi jefa Gisela unas vacaciones y ella lo acepto. Me dio un mes lo cual siento que es mucho. Pero dijo que me lo merecía.

—Disfrutaremos al máximo.-dijo James emocionado.

Estuve aburrida en el avión. James se había puesto ver una película en su tableta y yo lo único que hice fue dormirme en su brazo izquierdo.

Cuando aterrizamos a California, San Francisco. James me ayudo con las cosas. Nos fuimos a quedar en un hotel cercano, ya que solo estaremos por tres días y dos noches.

Llegamos al hotel y James pregunto por la reserva. Nos asignaron habitaciones separadas y yo descansé al llegar a la mía. La hora de la cena, nos fuimos a un restaurante italiano cercano que hay. Pedimos cada uno un platillo y una entrada.

Regresando al hotel, nos quedamos para mañana en ir a visitar a mi madre. En la habitación le escribí a Daniel que llegamos bien en nuestro vuelo.

Al otro día, ya siendo las diez de la mañana, ya habíamos desayunado e irnos a comprar unos ramos de flores.

Compre tulipanes como le gusta mi mamá, también habíamos pedido prestado al personal del cementerio algunas cosas para limpieza.

Cuando llegamos al lugar, está algo sucio.  El personal hace su trabajo en hacerle cortes al césped. Pero no una limpieza a las lápidas. James me ayudo ha hacer la limpieza.

—Gracias por ayudarme, James.-

—De nada. Para eso estamos los amigos.-

Termino de acomodar las flores y quedó limpia el lugar. James dijo que se adelantaría en llevar las cosas prestadas de regreso. Así que estoy sola para hablar con mamá un poco.