ALPHA PRIDE || ♡KiriBaku♡ || ♂Omegaverse♂

♡ 17 ♡

Bakugou lo conoció en la academia de policía cuando de tenían dieciocho años pero no fue hasta que comenzaron a patrullar formalmente que él rubio energético les contó su historia. 

        Kaminari Denki había nacido en el seno de una familia pobre, pasó carencias y abusos por parte de su padre Beta. La fortuna lo favoreció cuando su madre se volvió a casar después de la muerte de su padre; se trataba de un Alfa de una familia acomodada. Él también adoptó a Denki y lo cuidaba como si fuera su hijo biológico. Lo apoyaron y amaron profundamente. Tuvieron una hija después pero jamás lo descuidaron. Había sido un verdadero reto para él entrar a la policía y posteriormente ser ascendido a detective en el departamento de homicidios pues los estudios no se le daban bien. Bakugou lo había ayudado a estudiar hasta que el cansancio lo derribara y junto a Sero lo auxiliaron en sus exámenes físicos en un par de ocasiones.

          Kyoka y él se conocieron cuando Kyoka estaba embarazada pero no fue hasta después del divorcio de ella que se dieron una oportunidad, en contra de lo que la sociedad dictaminada como "correcto". Su vida era maravillo, Bakugouno se cansaba de pensarlo. A pesar de ser Omega y de todos los obstáculos que se le ponían en frente sólo por haber nacido así creía con firmeza que era tan feliz como para envidiarle.

        Y ahora, todo le había sido arrebatado de la forma más cruel. Esos bestias que lo ultrajaron, golpearon y  mataron estaban por salirse con la suya; habían dejado a una esposa sin su esposo, a unos padres sin su hijo, a Bakugou, Todorokiy Sero sin amigos y al departamento de Homicios sin un valioso detective. 

         Bakugou ardía en ira uno iba a permitir que salieron impunes.

        Todoroki permaneció lívido e inmóvil sobre la silla frente al escritorio de Bakugou, como si no terminara de procesar lo que había dicho en ese momento, el Alfa rubio podía verlo en sus ojos; desesperación. No era momento para quedarse en shock. Bakugou sacudió a Sero, cuyos ojos ya comenzaban a llenarse de lágrimas, éste salió de su ensimismamiento y por su mirada pudo entender que era lo que debían hacer a continuación. Todoroki, en cambio, estaba demasiado involucrado en todo y aunque volviera a trabajar seguía sin estar dentro de ese caso que finalmente (y para su desgracia) había escalado a homicidio.

— ¿Kyoka ya lo sabe?— pregunto Bakugou y Shouto lo miró.

—Se le informaron a ella y ella me lo dijo. Está destrozada... no creo que pueda vaya a hablar con nadie, sus padres están con en el hospital, consolándola, también mi madre.

—Entiendo. Por él momento llamaré a los forenses para recoger el cuerpo, solicitaré la necropsia de urgencia— trataba con todas sus fuerzas que su voz no se cortara y podía notar la mirada borrosa por las lágrimas —. Mientras tanto, Sero, ve con Awase a entrevistar al dueño del estudio de tatuaje en la Sexta Avenida. Vieron a un par de hombres que coinciden con la descripción dada por Kyoka. Yo le avisaré al Capitán.

— ¡Entendido!— exclamó el Beta, tomando su chaqueta y caminando con rapidez hacia el escritorio de Awase, donde éste estaba escribiendo algo en unos papeles.

       El rubio sacó su arma del interior del cajón de su escritorio y se la acomodó en el soporte de su cadera. Con su teléfono en mano marcó el número de la morgue, donde Setsuna Tokage antendió la llamada, ella era la encargada del lugar y pasó el reporte de Bakugou, le enviarían dos forenses al hospital para recoger el cuerpo y ella en persona realizaría la necropsia. Cuando colgó, Todoroki elevó la mirada para encontrarse con los ojos de Bakugou, más que desesperado y preocupado parecía que le hubieran succionado la vida.

         Le tocó el hombro y suspiró. 

—Todo va a estar bien— le dijo, lo más inmutable posible pero sin perder su seriedad —. Te lo prometo.