Cuando era joven, conocí un grupo católico. Poco a poco me fui integrando, y llegue a compartir muchas de sus ideas.
Fuera del grupo conocí un chico estupendo. cuando llevábamos unos meses me propuso intimar, yo le mostré el camino que creía correcto, y que solo después del altar intimaríamos.
Fue muy paciente y cariñoso conmigo, me quería. Tres años después nos casamos. Los dos primeros años muy bien, pero después empezó a distanciarse, a ser mas reservado, cada vez hablaba menos, y yo creía que era el estrés del trabajo.
unos meses después un día me dijo que había conocido a otra mujer y ese mismo día hizo la maleta y se fue para nunca volver.
Yo confié en sus reglas, pensando que me darían la felicidad, pero me equivoqué.
Mi amiga Marta por la misma regla, conoció varios chicos, que la dejaron.
Ahora vive sola y amargada. Yo tuve la suerte de conocer a otra persona, a los pocos días intimamos. Es una persona maravillosa y ambos estamos enamorados desde hace mas de 9 años.
Un cierto día, en una confesión un sacerdote me dijo que obligase a mi nueva pareja a usar profiláctico, yo experimentada de la primera norma, seguí mi intuición y no hice caso.
No se cuanto durara mi amor, pero sea como sea me dejaré llevar de mi intuición femenina, y estoy segura de encontrar la manera de resolver cualquier problema que me surja.
Hoy me asombra ver como las nuevas generaciones ya no siguen aquella norma machista, y hacen mas énfasis en la fidelidad mas que en la virginidad prematrimonial.
A mi amiga le arruinaron la vida ( ella colaboró) y a mi estuvieron a punto.
Si dios es amor, obra como tal. Algunos consejos no parecen dados desde el cariño, si no desde otra parte menos honesta.
El amor es siempre sin condición.
Puedo ser amable con algunas personas, pero no puedo perdonar.
Si no logro ser consciente todo el rato, al 100% como puedo evitar pecar ?
Y si muero y me voy al infierno, yo no estaré allí para sufrirlo.
No estaré, gracias a dios.
