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—¡POTTER!—grito Eros entrando furioso al gran comedor.
—¡Eros ven aquí!—exclamó Lily detrás del Slytherin con Pandora a su lado.
—¡No te detengas Eros, partele toda la cara! ¡Nadie daña a mi pelirroja!—dijo la rubia tratando de detener a Lily quien a su ves intentaba detener a Eros.
—Cornamenta...—dijo Peter capturando la atención del de gafas—¿Que hiciste como para que Parkinson te mire y camine hacia aquí con ganas de quererte matar?
—Eros no querría matarte a menos... ¿Que le hiciste a Evans?—dijo Sirius mirando a un nervioso James Potter.
—Nada... Es solo...
—A ti te estába buscando Potter—dijo el Slytherin sobresaltando a James. Lo tomo de la camisa y lo elevó dejando sus pies a unos centímetros separados del suelo.
¿Confundidos? Yo creo que sí, porque mejor no regresamos una hora atrás.
Pandora y Eros se encontraban en la habitación de Lily la cual compartía con varias chicas de su curso, las cuales no se encontraban ahí. Los alumnos de Gryffindor los habían dejado pasar y subir a la habitación, puesto que ya se les había hecho costumbre ver a la Ravenclaw y al Slytherin juntos con la Gryffindor: Lily Evans.
—Y ¿Como van las cosas con el mini Black?—pregunto Eros lanzando una pequeña pelota al techo y atrapandola de nuevo entre sus manos mientras la rubia tarareaba con la cabeza acostada en sus piernas.
—Todo va m...
Lily ingreso a la habitación rápidamente interrumpiendo a Pandora, pero a penas ingresó a la habitación, cerró la puerta y se deslizó en ella, dejando que lágrimas corrieran por sus mejillas. Eros detuvo lo que estaba haciendo para observar mejor a Lily y darle tiempo a Pandora de levantarse de sus piernas.
ーLily, por Merlin
El Slytherin y la Ravenclaw corrieron hacía ella, haciéndole preguntas sobre que le pasaba, pero ninguna fue contestada, Eros la abrazo parando el interrogatorio, segundos después Pandora se les unió dejando que Lily se desahogara hasta que ella misma decidiera hablar.
ーJames sabe lo que pasó con... Ya saben quién en mi quinto año—dijo entre sollozos fijando su vista en el suelo. Eros y Pandora compartieron una mirada, entendiendo perfectamente el porque del estado de su amiga.
Eros posó su vista en el brazo de la pelirroja. Tenía una mano marcada, era recién, puesto que aún estaba roja.
—Pelirroja, ¿Que te sucedió?—Lily rápidamente dirigió su mirada a la marca en su brazo y trato de ocultarlo, pero ya era demasiado tarde, Eros y Pandora ya la habían visto.
—James... No sé cómo lo supo, pero quería que le diera explicaciones de porque me había acostado con Crouch, ni siquiera me dió tiempo de decirle que todo había sido una apuesta por parte de el y sus estúpido amigos...—Lily sollozo aún más—Me...tomo del brazo fuertemente y me dijo cosas... horribles, que jamás creí escuchar de nuevo.
Eros le dirigió una mirada a Pandora la cual paso desapercibida por Lily, Pandora asintió y lentamente atrajo a Lily hacía ella apartandola de la puerta. Cuando estuvo un poco lejos de la puerta, Eros beso su coronilla para después susurrar: Tranquila pelirroja, se arrepentirá de haberte dicho cada una de esas palabrasy sin más salió por la puerta a toda prisa. Lily quien después de unos minutos volvió en si, corrió detrás de el siendo perseguida por Pandora.
Ahora sí, regresamos a dónde nos quedamos...
—¡Señor Parkinson, deje al señor Potter en el suelo!—exclamo Mcgonagall bajando por las escaleras de dónde se encontraba la mesa de los profesores.
Eros dejó caer a James quien cayó sentado en el suelo para rápidamente ser levantado por Sirius y Remus. Eros dirigió su mirada a Mcgonagall, quien lo observó seriamente—Usted lo dijo, a mí no me diga nada.
—¡No puede arreglar todo a golpes, señor Parkinson!—recrimino la profesora.
—¿No?—cuestiono divertido.
—¡No!
—Aun así profesora, no iba a golpearlo por respeto a todas las señoritas y profesoras que se encuentran aquí. Pero antes que nada...Potter deberías empezar a usar cinturón.
—¿Por qué?—pregunto James confundido, mientras Remus apretaba los labios tratando de contener la risa.
—Para que no te puedan hacer esto—se acercó a el y de todo lo que podía haber hecho... Bajo sus pantalones y las risas no se hicieron esperar al ver sus calzoncillos.
