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—Vamos. Haganlo. No podremos progresar si no hacen las pases. —dijo Lily de brazos cruzados.
—Pero... Pelirroja, no me puedes pedir esto—Eros la miro suplicante.
—Lily-flor—se quejó James—No puedes pedirme que haga las pases con Quejicus versión mejorada.
—¿Que dijiste, Potter?—Eros se acercó amenazante a James, mientras que esté hacía lo mismo.
—Lo que oíste, Parkinson. Y una cosa más, alejate de mi novia.
Estaban tan cerca que solo ellos se podían escuchar. Eros, con su sonrisa cínica le susurro:
—Mirate, Potter. Tienes tanto miedo de que te quite a la pelirroja, cómo Snape lo estaba haciendo. Patético. ¿Qué? No me digas que también me harás bromas pesadas y me pondrás un apodo, ridículo.
James se puso rojo del enojo y empujó bruscamente a Eros, quien le devolvió el empujón con la misma fuerza. Ambos se tomaron por el cuello de sus camisas, cegados por el enojos, listos para empezar una pelea.
—¡Ya basta!
Lily se interpuso entre los dos, separándolos a empujones. La pelirroja los miro a ambos. Eros y James, respiraban rápidamente, aún se veía el enojo en ellos, así que de todo lo que Lily podría hacer... Los jalo de la oreja a ambos, llevándoselos a la habitación más cercana en Gryffindor.
—¿Crees que estén bien?—pregunto Remus preocupado mientras miraba a Pandora.
—¿Con Lily?—pregunto Pandora de vuelta, mientras reía—Claro que no.
Remus hizo una mueca de dolor al escuchar un grito de James, para nada varonil.
—¡No, Lily! ¡Mi cabello, no!—escucharon gritar a Eros.
—¿Con Lily, ahí? No gracias. La pelirroja da miedo cuando se enoja, enserio—contesto Pandora mientras pintaba sus uñas.
Remus miraba las escaleras ansioso y angustiada por su novio, esperando que bajarán.
Minutos más tarde, Lily bajo la escalera con una brillante sonrisa en su rostro, mientras detrás de ella, caminaban James y Eros, el primero, cojeaba mientras caminaba, mientras que el Slytherin, hacía muecas de dolor, mientras sostenía un papel sobre su nariz.
—Muy bien. Ahora que todo quedó aclarado... Tómense de las manos. —Eros y James negaron—Ahora. ¡Dije, ahora!—ambos rápidamente se abrazaron, haciendo que tanto como Lily y Pandora aplaudieran.
—Bueno... Sobrevivieron...—dijo Remus rompiendo el silencio incómodo que se había formado.
