-Cuarenta.

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3 Meses y 5 dias (Buscando a Barbara)

Mateo

Ya son las doce de la noche y nadie sabe dónde está Barbara ¡Mi amor donde te encuentras? estoy desesperado con la camioneta buscándola por todo el pueblo, hasta he ido a la cabaña que se encuentra en "La Victoria" y allí tampoco hay nada, mi corazón está acelerado y cada segundo que pasa me estoy muriendo porque tengo miedo que algo le esté sucediendo, Fernando es capaz de todo. La noche se hace eterna y cada segundo que está pasando me esta volviendo loco. Se hacen las dos se la mañana y sigo buscándola pero nada da respuesta, los padres de Barbara me ayudan pero no hay señales de donde puede estar, lo peor de todo esto es que ni siquiera hay rastros de su celular porque tenemos que esperar que tomen la denuncia en la comisaría de su desaparición pero lamentablemente debemos esperar más horas ¡Y VOY A MORIR! ¿Cómo esperas horas? ¡Mi mujer está desaparecida! ¡No puedo más! lloro mientras manejo pero me mantengo a pie porque sé que ella no debe estar pasándola nada bien.

—¿Mi amor dónde estás? —quebrándome en el llanto apoyo mi cabeza en el volante sin dejar de llorar.

Se hace de día nuevamente y Barbara no está por ninguna parte, no hay rasgos de ella.

En este momento me estoy cuestionandome demasiada cosas en la cabeza y una de ellas es ¿Que pasara si le llega a pasar algo a Barbara? hace ocho años la deje ir, vi como su vuelo se iba y sentí que mi vida se partía en dos ¿Como podría vivir sin ella? ¿Como? fue un duelo eterno y mucho más cuando sabía que todo esto se derrumbó por una mentira, pero ya no había retorno, debía dejarla ir porque tenía esperanza que ella sola regresaría a mi y así sucedió.

Siendo las diez de la mañana después de estar desesperado en su búsqueda toman mi denuncia en la comisaría, oficialmente Barbara Schulz está desaparecida en el pueblo de Potrerillos, Mendoza. La policía se pone en la búsqueda y yo me desespero porque no la encuentro por ningún lado, llevo horas sin dormir pero es lo que menos me importa, quiero que el mundo entero se entere que Barbara esta desaparecida.

Regreso a casa y comienzo a tirar todo, estoy lleno de bronca, impotencia, angustia, dolor ¿Donde estas amor? ¿Dónde está mi amor? me repito una y mil veces

—Hermano, cálmate por favor —Dice Luna angustiada— te prometo que vamos a encontrarla.

—¿Cómo quieres que me calme? ¿Como? —expresó con ira— ¡Barbara está desaparecida Luna! —tapo mi cara junto a mis manos quebrandome en llanto— No podré vivir si le llega pasar algo.

A Luna se le caen las lagrimas.

—Lo sé Mateo, está todo el pueblo en alerta ¿Lo entiendes? Pero no hay ni un vuelo que diga que Barbara se fue de la provincia.

Se abre la puerta e ingresa Rita, su mejor amiga.

—¡Mateo! —corre a abrazarme.

—No la encontramos Rita, no saben dónde está, me muero si le llega a pasar algo.

—Traje compañía, se que no es la mejor, pero ella vio a Barbara puede tener alguna pista.

Miré un instante y vi a Antonia Fierro entrar.

La historia parece repetirse, Antonia Fierro ingresando a mi casa diciéndome que lo ha hecho por venganza y que nunca se había acostado conmigo.

¿Que quiere demostrarme la vida con todo esto?

—Se que no es momento Mateo... pero hace unos días comencé a trabajar en la Clínica Trinidad del pueblo, y ayer Barbara estuvo allí.

—¿Como? —Tiene toda mi atención.

Siempre he sido tuya.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora