1 mes después...
Todo lo que había sucedido esa noche, era un horrible recuerdo para Yoongi. Había noches en las que despertaba asustado, creyendo que estaba nuevamente ahí. Tenía la suerte de que al despertar no estaba solo, Jimin estaba ahí para calmarlo y que pudiera recobrar el sueño. También estaba Beomgyu.
Los tres compartían la misma cama, porque Yoongi decía que no quería despegarse de ellos. Vivía con el temor de que estuviera en un sueño y pronto despertaría.
...
Con la muerte de Jisoo, Beomgyu tendría que ir a un hogar de menores, pero con la ayuda de Taehyung y algunos amigos de él, lograron que eso no fuera así y comenzaron todos los trámites para la adopción legal del menor.
Él no entendía nada, solo sabía que su mamá no regresaría más, y a pesar de que eso lo puso triste, porque le recordó sus primeros días junto a Yoongi, donde no fue muy agradable el proceso a acostumbrarse a alguien que no conocía. Una vida nueva, completamente distinta a lo que él estaba acostumbrado.
Pero la diferencia era, que ya los conocía y los quería, no tenía miedo de vivir con ellos. Todo lo contrario, estaba feliz, aunque igual extrañaba a su mamá.
Jimin un día que lo encontró triste mirando por la venta, se le acercó,
— Bebé, no tienes que estar triste — Beomgyu volteó para mirarlo — Tu mamá siempre estará contigo, aquí — puso su mano en el corazón del menor — Ella siempre cuidará de ti
— ¿No va a volver? — le preguntó con un puchero. Jimin no sabía cómo responder a eso. Beomgyu aún no comprendía lo que la muerte significaba.
— Ella te mira desde el cielo —el menor miró hacia donde le indicó Jimin con la boca abierta.
— ¿Ahí? — el menor señaló la primera estrella que aparecía en el cielo. Jimin asintió y lo abrazó. Esperaba que con el tiempo, el dolor fuese menor y él pudiera comprender mejor el ciclo de la vida.
Yoongi los miraba desde la puerta de la habitación de Beomgyu. la escena que había presenciado lo conmovió tanto, que se acercó a los dos y los abrazó. Depositó un beso en la frente de Beomgyu y besó a Jimin en los labios.
— Los estaba buscando — habló Yoongi — es hora de ir a la cama. — el castaño asintió.
— Beomie, ve a cepillarte los dientes — dijo Jimin y el menor obedeció, dando saltitos hacia el baño. Cuando estuvieron solos, el castaño soltó un suspiro
— ¿Qué pasa, amor? — Yoongi lo volvió a abrazar
— Tiene solo 4 años y le ha tocado sufrir tanto... — apoyó su cabeza en el pecho del pelinegro — Estoy tan molesto con ella, pero al mismo tiempo siento que no debo estarlo, pero es que no entiendo cómo pudo sobrevivir a ese mundo. Quiero que lo llevemos al doctor, para que lo revisen bien. Si ella dijo que ya le había dado algún somnífero antes, no quiero imaginar qué otras cosas pudo haberle dado — Yoongi lo miró con una cara de horror. No se había puesto a pensar en ello.
— ¿Tú crees...?
— Espero equivocarme, pero es una gran posibilidad — Yoongi le acarició el cabello. — Quiero que pueda estar bien, que sea un niño alegre. No me gusta verlo tan decaído ¿Crees que debemos llevarlo con un psicólogo?
— No quiero que pase todo el día con ansiolíticos
— Yo menos... — Jimin se separó un poco y lo miró a la cara — Aunque el cumpleaños de Beomgyu pasó hace meses, no pudimos celebrárselo y quedó todo comprado. ¿Podemos realizar una fiesta para él?
— Me encanta la idea — se acercó a él para besarlo. Se separaron cuando sintieron que alguien tiraba de sus ropas.
— ¿Ya estás listo bebé? — el menor asintió — ¿Cuál pijama quieres colocarte para dormir?
— Hmmm... — Yoongi lo tomó en brazos — ¡Batman! — gritó emocionado. Yoongi se lo había regalado hace unos días atrás y le había encantado.
Cuando llegaron a la cama, Beomgyu iba a dormir en el rincón, pero Jimin quería que estuviera en el medio, donde ambos pudieran abrazarlo y llenarlo de besos.
...
El fin de semana, prepararon una fiesta para Beomgyu, era una sorpresa para él. Invitaron algunos amiguitos del Jardín Infantil y por supuesto a Jungkook y Taehyung con Yeji y también a Namjoon con Jin y Yeonjun.
Yoongi le había contado a sus padres de la fiesta sorpresa, pero dijeron que no podrían asistir y así mismo le sucedió a Jimin cuando les contó a sus padres. Quienes aún no conocían al menor.
Tremenda sorpresa se llevaron ellos, cuando ese sábado en la mañana al abrir la puerta vieron a ambas familias. Estarían todos juntos para celebrar a Beomgyu.
Beomgyu no podía estar más feliz. Ahora tenía dos abuelitos más. Aunque nadie le dijo, no hizo falta, él lo había asumido.
Haneul y Jihoon, estaban fascinados con el menor, entendían completamente por qué Jimin lo quería tanto y por su parte, Yejin y Hyunbin en un principio se sintieron un poco celosos, en especial Yejin. Pero luego comprendió que era normal tener que compartir su nieto con la familia de Jimin. Además, ellos recién lo conocían, recordó el día que habían conocido al menor, querían recuperar todo el tiempo perdido.
Beomgyu se había integrado al jardín hace un par de días solamente, por lo que ver a sus amiguitos ahí lo hizo saltar de alegría, jugaron, comieron y rieron toda la tarde. Incluso había jugado al príncipe y la princesa con Yeonjun y Yeji. Ella era la princesa que estaba siendo prisionera por un malvado dragón, el cual era personificado por Yeonjun y Beomgyu era el valiente príncipe que iba al rescate.
El simple e inocente juego no había salido tan bien. Yeji había corrido en busca de su papá y Taehyung llorando, porque los niños la dejaban de lado.
Taehyung le había preguntado qué había pasado y ella sollozando le contó que Beomgyu cuando tenía que rescatarla, prefirió quedarse con el dragón y no salvarla.
Los niños hicieron caso omiso de ella y fueron al cuarto de Beomgyu en busca de sus muñecos de acción.
Luego del pequeño impasse, Yeji se calmó y volvió a jugar con ellos, pero ella sería la mujer maravilla.
— ¿Por qué tantos suspiros, amor? — Yoongi había llegado al lado de Jimin
— Porque estoy enamorado — se volteó a mirarlo y lo rodeó con sus brazos — Y soy feliz, ¿Viste a Beomgyu? ¿Viste lo feliz que está?
— Sí, esta noche va a caer rendido... aunque con toda el azúcar que ha comido, va a tener pila hasta muy tarde.
Y así fue, luego de que sus amigos se fueran y ambas familias se acomodaran en el cuarto de Beomgyu y el de huéspedes. Yoongi había ido a la cocina a prepararle un té a Jimin, mientras el castaño le colocaba el pijama a Beomgyu.
— Te quero Mini — el menor lo rodeó con sus pequeños bracitos, aunque solo alcanzaba a rodear la pancita de Jimin. El castaño se conmovió por el gesto.
— Yo también te quiero, bebé. — le dejó un beso en la cabeza, antes de que el menor se separara de él
— Yo sé que estoy grande y no estuve en tu pancita, pero si quieres yo puedo ser tu hijo para siempre — Jimin contuvo la respiración, lo que le había dicho Beomgyu lo había sorprendido.
Para el menor, Yoongi era su papá. Siempre lo había sido, pero Jimin era su profesor, el novio de su papá. Nada más. Aunque para el castaño, Beomgyu era mucho más importante que un alumno más o que el hijo de su novio, pero no podía atribuirse ningún título, no sin antes consultarlo con Yoongi y que Beomgyu lo aceptara. Cuando comenzaron los trámites de adopción, Yoongi nunca le mencionó que ambos lo adoptarían y eso era algo que espera Jimin con el tiempo poder lograrlo. Que Yoongi le permitiera ser el otro padre de Beomgyu.
— Y-yo... — No sabía que responder y Beomgyu no era el único que estaba esperando una respuesta. Yoongi estaba oyendo todo desde el otro lado de la puerta.
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Mi Final Feliz. Yoonmin
Fiksi PenggemarYoongi se encuentra en la obligación de volverse padre de un menor de 3 años. Tendrá la ayuda de sus amigos, especialmente del profesor de preescolar, Jimin.