Mi Final Feliz. Yoonmin

VI

— ¡Arriba Beom! Tienes que ir al jardín.

El menor se volteó dándole la espalda y se cubrió la cabeza con las sábanas. A pesar de que le encantaba estar con los demás niños y con el profesor Jimin, levantarse cada mañana era un sacrificio. Él preferiría quedarse durmiendo.

— Vamos, hoy te iré a buscar — Beomgyu asomó su cabeza. En los días anteriores, Yoongi nunca había dicho algo como eso. Más bien. Casi ni le dirigía la palabra. — ¿Dónde tienes tu mochila? Necesito ver algo... — el menor se levantó rápidamente y corrió en busca de su mochila. No quería que Yoongi viera lo que había dentro. — Dámela, peque — Beomgyu negaba con la cabeza, pero Yoongi era más fuerte que él y logró quitársela.

Al abrirla, se dio cuenta de los papeles arrugados que se encontraban ahí. Eran varios.

Tomó uno y lo leyó...

Señor Min, debe enviar una colación para su hijo. De preferencia algo saludable. Todos los niños traen la suya, menos Beomgyu. Incluso sus compañeros quieren compartir con él, pero no lo acepta. Por favor enviar una colación mañana.

Yoongi miró a Beomgyu con el ceño fruncido. ¿Por qué su hijo no le había dicho nada? El menor no quiso mirarlo. Él no sabía leer y creía que todas esas notas que le había enviado su profesor, eran para acusarlo por algo. Ya le había pasado antes y su mamá luego lo regañaba y lo castigaba. No quería pasar por lo mismo, nuevamente.

Señor Min, Beomgyu debe traer preparada una exposición relacionada con los animales marinos. Pero debido a que no se expresa verbalmente, puede solo presentar imágenes. También, nos gustaría que pudiera acompañarlo y apoyarlo en su exposición.

Señor Min, debido a que no firmó la autorización para salida al parque, Beomgyu estuvo todo el día en el Jardín Infantil con la directora y las encargadas de la cocina. Estuvimos llamándolo al número de teléfono que nos dejó, pero no tuvimos respuesta.

Señor Min, Beomgyu se encuentra con un caso de pediculosis. Es muy importante la higiene en los niños, ruego a usted que se preocupe por ello y pueda revertir el problema.

Señor Min, su hijo el día de hoy no se sentía muy bien. Lo llevé a enfermería y le detectaron una infección estomacal. Me gustaría que pudiéramos conversar acerca de Beomgyu, hay varias cosas que necesito hablar con usted en persona.

Yoongi comenzó a sentirse mal ¿Tanto había pasado sin dedicarle tiempo a su hijo? Aunque no quisiera aceptarlo aún, era su hijo, no había vuelta atrás. No quería seguir leyendo las notas. Había montones en esa mochila. Tomó una respiración profunda y las sacó todas. Luego las leería o quizás no.

Buscó en el refrigerador algo que pudiera llevar Beomgyu de colación, pero no había nada para un niño de casi 4 años.

Le preparó un sándwich y se lo guardó.

Le llamó la atención oír unos pequeños sollozos. Caminó de vuelta a la habitación y vio a Beomgyu en posición fetal.

— ¿Estás llorando? — El menor se asustó y se cubrió con las sábanas — Hey, ¿Qué sucede? — se acercó a Beomgyu, pero como siempre, no obtuvo respuesta — ¿Te duele la pancita? — le preguntó, mientras le tocaba el lugar mencionado con cuidado, pero el menor solo negó con la cabeza. No sabía qué hacer y la hora avanzaba. Tenía que ir a trabajar y dejar a su hijo en el jardín. — ¿No quieres ir hoy al Jardín? — el menor asintió con la cabeza. Era tan complicado comunicarse con él. Tal vez tendría que llevarlo donde un especialista, para cerciorarse de que el menor no hablaba o quizás aprender lenguaje de señas. Tenía muchas cosas que hacer y quedarse en la cama no era una de ellas, debía comenzar ya. Tomó las sábanas y con fuerza las quitó, asustando a Beomgyu.