La disciplina consiste en que un imbécil se haga obedecer por los que son más inteligentes –Jacinto Benavente y Martínez.
FRANCESCA
—A-a Alec —logro pronunciar.
—Tú —es lo único que responde con semblante serio.
—Yo. —intento seguir la conversación ocultando mi nerviosismo.
Volver a verlo directamente a los ojos y de tan cerca se me hace choqueante. Edan lleva muchos años a mi lado, la misma cantidad de tiempo que no veía a Alec, por lo cual sus similitudes en mi mente eran obvias, pero tenerlo a escasos centímetros luego de años solo me confirma lo obvio, son jodidamente iguales.
Suelo amar el silencio y lo valoro bastante luego de tener niños pequeños, pero el silencio incómodo que se está dando ahora mientras Alec no hace más que mirarme directamente a los ojos de manera intimidante, es abrumador.
—Así que... trabajas para el gobierno —señala luego de bastantes segundos.
—Eh... algo así —respondo sin dar detalles.
—Algo así —repite dando un pequeño asentimiento—. ¿Me vas a explicar qué está pasando?
—¿Giovanni no te lo dijo?
—Giovanni no eres tú, y te lo estoy preguntando a ti.
—Lo siento, pero no estoy autorizada para dar ningún tipo de información sin mi jefe de escuadrón presente —respondo monótonamente.
Él enarca una ceja. —Bien.
—Bien —repito sin saber que decir.
—Lo que hiciste esta noche...
—Solo fue una misión más —me adelanto a sus palabras—. Me enviaron a terreno y no tuve otra alternativa.
—Es evidente y no creas que te lo voy a agradecer
—No espero agradecimientos por mi trabajo, me pagan por hacerlo.
—No sabía que estabas escasa de dinero —suelta con ironía sabiendo que tengo más del que necesito.
—No tenías por qué saberlo —le sigo su jueguito sarcástico.
—Mira... —suspira—. No te voy a agradecer por realizar una misión de tu circo, pero si te voy a agradecer por ayudar a mi... a Isabella.
—A tu novia —completo lo que realmente quería decir haciéndole saber que ya lo sé.
—Si, a mi novia —afirma.
No sé que más decir por lo cual se vuelve a generar uno de esos silencios incómodos.
—Quiero largarme de aquí —suelta de la nada—. Y agradecería que me dijeras como hacerlo por las buenas.
Si, claro. Luego de una gran misión de rescate correré para ayudarlo a escapar...
—Solías preferir hacer las cosas por las malas —evado como de costumbre.
—La gente cambia, evoluciona —responde con simpleza.
—Me alegra —finjo una sonrisa y me esfuerzo en que note que es bastante falsa.
Suspira. —¿Qué haces aquí? —pregunta.
Lo miro confusa. —Pues... aquí trabajo.
Blanquea los ojos ante mi respuesta y me dedica una mirada seria dejándome ver a la verdadera versión del Alec que conozco, porque los cambios que dice tener no me los creo ni por un segundo y era cosa de minutos para que dejara salir lo que quería decirme desde el momento en que me vio.
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Última Batalla de Roma | [Roma #3]
Action¿Que tienen en común una soldado de la BSGI y un empresario exitoso? La respuesta es fácil, nada, no tienen absolutamente nada en común. ¿o si? Es de valientes dejar ir, es de cobardes no volver. LIBRO 3 DE [ROMA] Se necesita leer Ante los ojos de R...