MoonSpell || Steven Grant/Marc Spector

Un pequeño contratiempo

Al llegar a casa, Alice sentía su cuerpo sumergido en la vergüenza. Intentar besar a Marc y ser rechazada por él, era de las peores cosas que le habían ocurrido.

Odiaba la seguridad con la que creyó que era correspondida, odiaba la confianza que la dominó y odiaba a Marc. Sus señales mixtas la habían orillado a tomar esa acción.

-Estúpido..- Suspiró frustrada. 

Para ocupar su mente arregló su pequeño departamento. Su armario, los platos sucios, etcétera. Necesitaba un poco de claridad y distracción, a pesar de odiar las tareas del hogar. 

Sin embargo su mente la traicionaba y repetía ese recuerdo una y otra vez, como una máquina vieja de VHS. Y pronto se encontró a si misma sin otra opción que sentarse en la cama y fijar su vista a la nada. 

-Que idiota.. pero idiota ¡Yo! Estúpido Marc y sus estúpidas señales confusas..- tomó un libro de la mesa junto a ella, para su desgracia era "Orgullo y prejuicio". Uno de sus clásicos favoritos, las escenas románticas hacían que su corazón se llenara de dicha. En su adolescencia llegó a basar su personalidad en Elizabeth, algo que hoy en día encontraba vergonzoso. 

Prendió una vela y procedió a leer por quinta vez. Se acomodó con una pequeña frazada, quitó su molesto sostén y se sumergió en la lectura.

-Cerebro ya basta..- Se quejó. Alice no dejaba de imaginar a Marc como el molesto pero encantador señor Darcy. Por más que intentó crear a Darcy basado en la descripción de la autora, Marc era lo único que se apoderaba de su mente. Su voz, su seguridad y porte, ese extraño salvajismo magnético. - Y que es un idiota.-Pasó las páginas del libro.

.....

Sin darse cuenta del cómo o cuando Alice se había quedado profundamente dormida. El sonido de alguien golpeando su puerta la despertó. 

-¿Quién es?- No recibió respuesta. La persona detrás de la puerta principal tocaba desesperada, de mala gana se levantó y caminó hasta ella. Lo malo de su pequeño departamento a parte del espacio, es que no tenía una mirilla. 

Abrió y para su sorpresa miró a ese hombre. No tardó en descifrar su identidad, los gestos lo delataban.

-Hola.- Dijo Jake.

-Hola..- Frunció el ceño.- ¿Necesitas algo?-

-Que agresividad. Si mal no recuerdo me pediste que hiciera la prueba también, antes que el imbécil arruinara las cosas.-

-Cierto..- Jake entró sin pedir permiso y de su bolsillo sacó el alfiler.- También tengo aquí para coser, no creo que fuese necesario eso.- Rio.

-Tal vez afectaba el resultado.-

-A estas alturas ya sé cuál será el resultado.- Ofreció su dedo, Jake lo tomó y siendo más agresivo que sus contrapartes lo pinchó.- ¡Auch! No hacía falta eso.- Alice intentó retirar su mano, Jake no la dejó moverla.

-Estuve todo el camino ansioso por hacerlo..- Llevó su dedo a la boca y lamió la sangre. - Al menos yo merezco la explicación, el imbécil y el gusano no.-

-No me gusta que le digas así a Steven.-

-Pero a Marc si..- Alice no respondió.- Y tienes razón, es un idiota..- Jake se dejó caer en la cama.- Pude ver sus razones y es una tontería, ya tenía la aprobación del gusano. No veo porqué sería un dilema.-

-No me interesa Marc.-

-Claro..- Rio.- Dame la explicación.-

-Michael dijo..- Suspiró.- Que debía saber quienes eran la excepción de mis poderes, con quienes me sintiera más cómoda. Mi organismo crearía una inmunidad.- La sonrisa de Jake se hizo más grande, como nunca antes la había visto.- Deja de reír así, das miedo.- Soltó una carcajada.- ¡Eso da más miedo! Suenas como película de terror.-Alice se estremeció.

-Así que.. ¿Soy tu excepción?-

-También Marc y Steven, supongo que por compartir cuerpos.- Alice omitió la parte de los sentimientos, ya había sido humillada lo suficiente hoy para añadir el rechazo de Jake como cereza del pastel.

-¿Y eso que quiere decir?-

-Supongo que me pueden lastimar si quisieran, lo cual dudo que hagan.- Jake frunció el ceño.- ¿Qué? ¿Quieres hacerlo?-

-¿A qué te refieres con eso?-

-Lastimarme Jake ¿Qué tanto estás pensando?-

-Es refrescante que seas despistada.- Rio.- Llevo cinco minutos y no me has ofrecido nada de comer o beber.-

-Cuando estaba en tu casa no lo hacías, lo hacía Steven.-Rodó los ojos y abrió su pequeño refrigerador.- Tengo medio sandwich que estoy segura que está en estado de descomposición, leche.. podrida  y mmmm....- 

-Alice ¿El experimento significa que sientes algo por nosotros?- Jake soltó esas palabras de golpe provocando que ella golpeara su cabeza.

-¿Qué? No.- Mordió su labio, agradeciendo darle la espalda.

-Estás mintiendo.- Ella giró para verlo.

-¿Cómo lo sabes si no mirabas mi cara?- Jake sonrió.

-No lo sabía, ahora si.- Se levantó de la cama y caminó hacia Alice. Verlo con demasiada seguridad la puso nerviosa.

-¿Qué?- Dijo con la voz temblorosa.  Sin esfuerzo Jake la tomó entre sus brazos.- Eso es..- Alice fue interrumpida por los labios de él chocando contra los suyos.

A pesar de compartir el mismo cuerpo, el beso era diferente. Con Steven era cálido y tierno, Jake era tosco pero hábil. Movía sus labios con destreza innata. 

Jake se separó y la miró.

-Bésame.. Quiero sentirte..-  Y ahí salió el autocontrol de Alice, tomó la chaqueta de Jake y lo atrajo hacia ella. 

Jake prácticamente reía durante el beso, se sentía triunfante. Al menos él podía ser un poco más claro con Alice, no era tímido como el gusano que sabía que la había imaginado en escenarios no muy familiares sin hacer algo al respecto. O como el imbécil de Marc, que prefería sufrir en una esquina a admitir lo que sentía. 

Además, si lograba poseerla ya la tendría sólo para él. Jake dudaba si podría aceptar un trato tan extraño como el de sus contrapartes, quería a Alice toda para él y no pensaba compartirla. Si fuese el dueño completo del cuerpo, ella ya sería su pareja desde hace mucho tiempo.

El beso era agresivo y salvaje y como nunca antes, Alice sentía todo eso. Podía sentir el ímpetu de Jake por dominarla, los mordiscos en sus labios y el poder de sus manos al atraerla hacia él.

Alice se sentía en una nube difusa de deseo, envuelta por el cuerpo de Jake y sus suspiros no hacían más que hundirla. Sus sentidos iban como locos, no podía concentrarse en otra cosa. Era como si Jake supiera dominarlos.

Sin embargo el encanto pronto se rompió, al estirar la mano Alice había arrancado un trozo de la pared. Eso hizo que ambos se separaran.

-Mierda..- Dijo Alice.- ¿Te lastimé?-

-No.-

-Pensé que la inmunidad se refería a todo el sentido de mis poderes, no sólo a hacerme daño.- Abrió la mano y dejó caer los pedazos de cemento.- ¿Estás seguro que no te lastimé?-

-Seguro.- A Jake poco le importaba la pared y gracias a la acción de Alice se imaginó el desastre que ambos podrían hacer cuando ella fuera suya. Pero a juzgar por el rostro culpable de ella, intuyó que no necesitaba eso.- Estoy bien.-

-Yo.. lo siento, no quería.. No debí.. Imagina si te hubiera tocado, te habría roto un hueso.-

-No pasó y no lo sabías. Ahora conoces las limitaciones de tu cuerpo.-

-Puede ser.- 

-Alice tranquila.-

-Lo estoy.- Mordió su labio. - Bueno no, pude haberte matado.-

-De los dos en la habitación yo soy el que tiene los impulsos asesinos y aún así no piensas que te mataré. Relájate.- Suspiró. Debía apartar la vista de Alice, eso hacia más difícil no ceder.- Mejor me iré, apuesto a que el gusano va a querer llenar tu buzón de voz con explicaciones.-

-Tal vez.-

-Al menos me consuela que ya te tuve como ninguno de ellos podrá.- Besó su frente.- El gusano y el imbécil te desean, aunque yo fui el que tuvo valor de tomarte..-