MoonSpell || Steven Grant/Marc Spector

En honor a la verdad

(Final parte 1)

Risas

Llanto

Los recuerdos y memorias a los que accedió cuando estuvo en el trance inducido por el frío, se mezclaron con sucesos del presente.

Alice se veía a sí misma con hijos y una familia, con sus padres vivos y cenando en el departamento de Marc y Steven. La escena era feliz y hermosa, pero no se sentía segura.

Era como una especie de película de terror, esperando a que el terrible villano apareciera de las sombras y asesinara a la familia. Tal y como le sucedió en la vida real.

Su miedo más grande era perderlos y podría apostar a que pasaría.

Revivió el asesinato de su hermana, los maltratos en el orfanato, su trabajo en el museo.

Cada memoria encajaba en su mente, destinada a un lugar específico.

Despertó sobresaltada, con la mirada fija en el techo. Todavía era muy temprano, Steven y Marc seguían dormidos.

Alice caminó, cuidando no hacer ningún ruido.

Abrió uno de sus cajones y detrás de la ropa interior encontró lo que buscaba, el pequeño collar que perteneció a su madre.

Ni siquiera sabía porque debía tenerlo entre sus manos.  Ese día más que antes, sintió que le pertenecía. Ya no era una desconodida sin identidad, y esa mañana tal vez estaba más cerca de aceptar otro nombre.

Después de todo, si las cosas hubiesen sido diferentes, ella sería Rosie y no Alice.

¿Cambiara algo?

Nunca lo sabría.

¿Se sentiría orgánico? ¿O perdería su identidad?

¿En que punto aceptar su identidad sería perder a quien fue Alice?

No tenía las respuestas a esas preguntas y dudaba que las conseguiría

-¿Todo en orden?- La voz de Marc la hizo girar, seguía adormilada. Su torso desnudo resplandecía gracias a los rayos del sol. Alice notó en ese momento que amaneció.

-Si, sólo admiraba una reliquia.- 

-¿Una reliquia?- Steven sonrió.- ¿Puedo ver?-La mujer sonrió de vuelta, caminó hasta la cama y sin pensarselo dos veces, les puso el collar.

No era convencionalmente hermoso o costoso, pero que fuese lo único que le quedaba de su familia, lo volvía el único bien material que ella poseía con valor.

Sin dudarlo, quería que ellos lo tuvieran. Le parecía algo justo que el regalo de una familia pasara a otra.

La pequeña familiia que tenían ellos.

-¿Qué es?-

-Era de mi familia. Michael me lo dió cuando nos conocimos, o más bien; cuando nos reencontramos.- tragó el sabor amargo al recordarlo.- Quiero que lo conserven.-

-No, no podría..- Marc intentó quitarselo.- Es lo único que te queda.-

-Lo sé y no es que pudiera conocerlos. No sé si mis padres hubieran aceptado nuestra loca relación o las locas cosas que hemos hecho en el último par de meses. Tampoco sé si hubieran aprobado los ataques repentinos de ira de Marc o la timidez de Steven o.. algunas otras cosas.- Sonrió al pensar en Jake.-Tal vez si ellos estuvieran aquí yo no sería lo que soy, porque creo firmemente que soy un rompecabezas de las piezas individuales de otros. Tengo la manía de acomodar mis libros en orden, porque las cuidadoras te obligaban a hacerlo en el orfanato, soy muy torpe porque fui practicamente criada por Trevor y sus estupideces. Y más ejemplos...- Los miró.- El punto de esto, es que no se si soy la Alice de hace unos meses o soy la Rosie que debí ser, o una combinación de ambas. Sin embargo, para mi ese collar va más allá de eso. Lo mejor que puedo pensar es que.. No tengo un anillo, no tengo más que ofrecer excepto mi amor incondicional y quiero que sea representado así. Un regalo de una vieja familia, a una nueva...- Alice detuvo sus palabras cuando vio las lágrimas en su rostro.- ¿Dije algo malo?-

-¡No!- Steven limpió su rostro.- Es que.. fue muy hermoso eso que dijiste y no pude evitar ponerme emocional. Continúa.-

-Era eso.- sonrió.- No soy tan elocuente como ustedes.-

-Creo que dijiste las palabras correctas.- Marc besó su frente.- Y aunque no es mi gusto en particular, lo usaré.-

-Es su forma masculina de decir que le encanta y de reprimir sus lágrimas.-

-Cierra la boca Steven, tú eres el que llora.-

-Ambos lloran, pero se ven bien.- Mordió su labio.

-Mentirosa.-

-Soy un desastre.- Dijo Steven.- Es un hermoso collar Alice y sea cual sea el nombre que tú desees usar, siempre te amaré.- tomó su mano y la besó.

Ambos se abrazaron y después de un largo tiempo en silencio, Marc habló.

-¿Sabes? Es una lástima cómo terminaron las cosas, digo; con Michael. Obtuvimos de una forma u otra la información que queríamos, limpiamos el nombre de tus padres e impedimos que te asesinara..-

-Espero que tengas un punto para eso.-

-Lo hay.- rio.-Me parece estúpido que lo único que tengas de ellos sea el collar.-

-Lo sé. Si hubiera pensado con más claridad y no dejarme llevar por mi cursilería, habría saqueado su casa.-

-¿Algo en específico?- cuestionó Steven con curiosidad.

-Me habría robado la pintura de mi familia. ¿Lo imaginan? La tendría aquí en el departamento. Podría apreciarla con detalle o memorizar los rostros de mis padres y mi hermana, porque ahora no son más que un recuerdo vago en mi mente. Quiero decir, puedo ver una imagen completa aunque no recuerdo los detalles. Y me encantaría saber cada uno de ellos, al fin decir que tengo la nariz de mi padre o la barbilla de mi madre, detalles así.- Alice se introdujo de lleno en sus pensamientos, con una sonrisa nostálgica en su rostro.

Alice jamás les pidió algo material, no era una mujer de joyas o atuendos ostensosos y se conformaba con lo básico. Incluso, para su sorpresa; se conformó con vivir en su problemático departamento.

Steven y Marc la miraron.

Los dos compartían pocas veces un punto de opinión o llegaban a un acuerdo. Y para la ignorancia de Alice, ambos tuvieron una idea.