6. First kiss

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—¡Ochenta!

Ash jadeó para recuperar el aliento.

—¡Ochenta y uno!

Todo su cuerpo se puso rígido y tembloroso hasta podía escuchar el crujir de sus huesos. La presión en el pecho era insoportable y la comisura de sus labios comenzó a salivar, entremezclándose con su sudor.

Ya la rendición estaba cerca.

—¡Vamos, Ash, tú puedes!

Sin embargo, Eiji, su lindo omega hecho de azúcar y flores primaverales se hallaba presente. Incluso su mirada baja la mantenía fija en aquel hilo rojo del destino para que la motivación no se esfumara.

Por su orgullo alfa, no debía fallarle.

—Noventa y siete — Blanca exigió mientras veía al rubio bajar y subir con menos velocidad. —, noventa y ocho... — notó que el rostro de Ash se ponía colorado. —. Ya casi terminas, no te rindas.

Ash quiso maldecirle pero no pudo. Era fácil hablar tan despreocupado para el macho desproporcionado de testosterona si él no tenía encima al mastodonte de Sing sentado encima suyo con las piernas y brazos cruzados mientras realizaba lagartijas.

Al final, aceptó la invitación de acudir a un entrenamiento con los gyms lovers. No negaría que tenía una pizca de curiosidad en cómo se desenvolvió Eiji en esa clase de ambiente tan... alejado de la vida de un omega promedio. Por el estúpido estereotipo ahora estaba metido en un gimnasio en vez de la acogedora biblioteca.

—¡Cien! —gritaron Blanca, Sing y Eiji al unísono.

Ash desparramó su cuerpo al suelo, escuchando como los demás celebraban su victoria de principiante. De inmediato, Sing se quitó sobre él y luego fue reemplazado por Eiji, quien lo abrazó fervientemente sin importarle el sudor brotando en su piel. Fue tanto el meneo que las hebras conectadas en sus meñiques se enredaron entre ambos.

—¡Lo lograste, Ash! — el omega acurrucó su mejilla contra la del alfa.

Así, el rubio sonrió, embriagado del cansancio.

—Te dije que era fuerte... —se jactó al observar a los amigos de su destinado.

Aún con esa carente humildad, Sing y Blanca se mantuvieron serenos.

—Pero no tan fuerte como Eiji —el alfa chino carcajeó. —. Él puede soportar trescientas lagartijas conmigo encima y ciento cincuenta con Blanca...

A Ash se le bajó la presión dentro de los brazos de Eiji.

—Eh... muchachos, n-no le digan... —comentó al vislumbrar la reacción de su alfa.

En eso, Blanca le ofreció una bebida enérgica a Ash, la necesitaba.

—¿Por qué no? Hace poco batiste récord.

—H-Hey... —se ruborizó intensamente.

—A este ritmo podrás hacer mil como Blanca.

Ash lo observó con ojos saltones. Hizo una anotación mental en nunca hacer enojar al omega, de lo contrario tendría pase directo al hospital. Tal vez Yut Lung tenía razón al decirle que, después de todo, era un escuincle.

Ahora que lo pensaba, al estar atrapado en los brazos de Eiji se percató que él era bastante macizo.

Justo cuando salieron del gimnasio para regresar a sus hogares, Ash sentía que todo el rato Eiji lo arrastraba para avanzar durante el camino. Le dolía todo el cuerpo, seguramente el día siguiente sufrirá al ir a trabajar.

—Lo lamento, nunca creí que se podrían tan intensos.

El rubio lo observó de reojo su rostro avergonzado.

—No te preocupes... — le aseguró al tomarle de la mano donde se enlazan con el hilo rojo, sintiendo su corazón bailar al verlo vivido como siempre. —, es normal que entre alfas nos comportemos rudo — entonces, su expresión se llenó de satisfacción. —, pero saber que puedes estar a la altura de esos sujetos me pone muy contento. Cada vez me enamoras más, Eiji.

El omega sonrió ligeramente y se detuvo estando casi cerca de donde residía.

Tras una breve pausa sin hacer nada, el japonés alzó la mano derecha de Ash y la sobó con dulzura la pequeña cicatriz que se formó.

—Gracias... tú también eres maravilloso — sujetó con un poco más de fuerza la extremidad. —, me angustiaba un poco que te lastimaras nuevamente, a penas te quitaron las vendas hace unos días...

—¿Pero qué dices? Soy tan fuerte que, aún con este agotamiento, puedo cargarte. —deslizó su brazo en los muslos de Eiji y lo levantó sin problemas, ganándose un chillido.

—¡Ash! —rodeó sus brazos alrededor del cuello por pura inercia.

Ambos rieron a todo pulmón mientras Ash giraba en círculos con Eiji al estilo nupcial, ocasionando que el hilo rojo del destino revoloteaba y los amarraba a su voluntad. Las feromonas impregnaban sus deliciosas emociones y teñían sus mejillas a un cálido calor. Las demás personas los desdeñaban al verlos. Nuevamente el universo eran solo ellos dos.

Ya cuando relajaron su propio alboroto, la mansedumbre fue lo que predominó en sus semblantes al contemplar la cercanía de sus rostros, sentir las tajadas de sus respiraciones laboriosas y el agradable olor de la serotonina de sus almas emparentadas por el destino.

El oportuno y evidente momento del vulnerable cariño hizo que Ash aproximara hacia Eiji, dándole tiempo prudencial para que decidiera continuar o alejarse. Entonces, los ojos almendrados dejaron caer sus párpados y fundió sus labios con los suyos en un beso delicado, luego se convirtió en uno prolongado y, al separarse momentáneamente para perderse en sus cautivadoras expresiones, surgieron otros más deleitables y profundos.

Los suaves suspiros y las pequeñas miradas de ternura mientras sus labios se acariciaban y estallaban de emoción dentro de sus corazones, añorando el agradable hormigueo en sus cuerpos.

Ash exhaló después de separarse de sus labios, besar firmemente el entrecejo de Eiji y toparse apacible contra la misma con su propia frente mientras aún lo sostenía en sus brazos.

Después de ese primer beso... su relación pasó a ser más abierta y amorosa. 

N/A: creo que no se habla suficiente en el fandom lo fuerte que es Eiji en el canon al ser ex atleta (literal se cargaba a Ash, un tipo de más de 1.80 cm) ♥♥♥ así que tiene un sentido que sea un gym lover también alkdjaskl yo a Blanca y a Sing, por alguna razón los asocio con el Club de Fisiculturismo de Mob Psycho 100,  intensos pero buena onda xD

Y por fin Ash y Eiji se dieron su besito ♥♥♥♥ ya se llevaban ganas. Ahora ya puedo escribirlos más melosos que antes, muajaja.

¡Muchas gracias a todos por todo el apoyo! ♥ ♥ ♥ 

Nos vemos mañana. ♥ 

Besos & AbrazosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora