No sabía que la necesitaba

16. ¿Titán hembra?

Seguimos hablando un rato antes de continuar con el trabajo hasta que me dormí. Al principio recuerdo estar tumbada y abrir los ojos levemente y verle sentado en la silla escribiendo pero al día siguiente me había levantado en la mía. Hoy era el primer día que iba a salir fuera de las murallas y en el que tal vez iba a luchar con gente a la que quería por proteger a Eren. Estaba nerviosa, quería vomitar. 

-¿Qué hiciste anoche?- dijo Mikasa

-¿Eh?- pregunté confundida

-Anoche, donde fuiste- cruzó los brazos

-Ah, no podía dormir. Bajé a tomar un té y ayudé al capitán con su trabajo- 

Mikasa me miro seria.

-¿Qué pasa?- dije acercándome a ella y cogiéndola de los brazos para que pudiera relajarlos. 

-Me desperté cuando te fuiste, era tarde. Y después apareció el capitán horas después contigo en brazos. Me asusté pensaba que te había hecho algo o que no estabas consciente-

-¿El capitán me trajo?-

-Si. Te dejó en la cama, te arropo, se quedó unos segundos mirándote y se fue-Se volvió a cruzar de brazos y miró para otro lado- Pensaba que te había pasado algo

-Mira que eres boba- le sonreí y la abracé- gracias por preocuparte pero estoy bien, simplemente le ayudé a acabar un poco de su trabajo porque no tenía sueño y no se en que momento me dormí

-Vale...pero no me vuelvas a dar estos sustos- me miró cambiando su mirada cabreada por una preocupada

-Te lo prometo- le sonreí- vamos tenemos que partir pronto

Bajamos a preparar las últimas cosas para comenzar a salir. Allí estaban todos.

Jean al verme me sonrió y vino a abrazarme. 

-Nuestra primera expedición- me dijo mientras seguía abrazándome 

-Y no va a ser la última- continué con el abrazo

-T/n...- me miró rompiendo el abrazo 

Tenía los ojos llorosos, estaba preocupado.

-Prométeme que vas a volver viva- me reí y le aparte algunos pelos que tenía en la cara. 

-Lo prometo. Ahora prométemelo tu- sonreí

-Prometido- 

Volvimos a abrazarnos pero una sensación familiar me hizo ponerme alerta. Ese escalofrío. 

Levi me estaba mirando, no sabía distinguir si era con pena o con preocupación ya que estaba lo suficientemente lejos. 

-Chicos  subir a los caballos, partimos- dijo Hange y todos la hicimos caso. 

Por fin veré el exterior. 

Comenzamos a cabalgar y llegamos a la última muralla de todas. Comenzaron a abrirse las puertas y una bocanada de aire entro desde fuera. 

-ADELANTE- gritó el comandante y todos comenzamos a cabalgar más rápido.

Era genial, no había un final a lo  lejos. Sólo el cielo y más terreno que explorar. 

Me encontraba en el flanco derecho. Nos habían separado para tener más visión del perímetro y en caso de tener sospechas o ver algo raro teníamos permiso para volver donde estaba Eren situado para poder avisar al resto y protegerle. 

Habían pasado dos horas y solo habíamos tenido encuentros con algunos titanes normales que habían sido fácilmente derrotados. Estaba todo tranquilo hasta que comenzamos a escuchar muchas pisadas junta venir hacia nosotros. Paramos en seco esperando ver que era lo que estaba pasando para ocasionar tanto ruido. En la lejanía pero con un paso rápido una oleada de titanes siguiendo a un titan del tamaño del titan de Eren. Parecía una ¿titan hembra?. Era rápida y yo lo debía ser más. 

Dejando atrás a mis compañeros comencé a cabalgar los mas rápido que podía por la llanura. Conseguí tiempo ya que mis compañeros se habían quedado a luchar. Estaba triste, podía haberles ayudado pero las ordenes del comandante fueron muy directas. Debíamos proteger a Eren a toda costa. 

Llegué al flanco central de la formación donde debía estar no solo Eren si no también el capitán Levi con el. Active una bengala negra  y otra a su vez roja como señal de titan excéntrico pero con peligro de ser un humano. Ellos siguieron su rumbo y de poco en poco conseguí llegar a su ritmo y unirme al escuadrón de las operaciones especiales de Levi. 

-CAPITAN, VIENE UN TITAN EXCENTRICO MUY RÁPIDO, PARECE UNA HEMBRA.- dije nerviosa

-¿Podría ser uno de ellos?-me miró serio

Asentí. 

Vimos otra bengala negra a lo lejos. Ya viene. 

-No perdáis la formación- dijo Levi y todos le seguimos

Llegamos a una especie de bosque con arboles muy altos. Las pisadas de aquella titan nos avecinaba que cada vez estaba más y más cerca.