No sabía que la necesitaba

23. "Como en casa"

Armin y yo salimos rápidos, Annie vio de primeras a Mikasa y comenzó a luchar con ella. Muchos soldados de la legión comenzaron también a ayudarla con el ataque. 

Al salir vimos como Annie pisó lo que quedaba del túnel y con ello a Eren. Nos acercamos para ayudarle. Nos encontramos un Eren con una piedra enorme encima del cuerpo y sangrando por un montón de lados. 

-EREN- Grité e intenté que reaccionara mientras quitaba algunas piedras que podía mover

-RESPONDE EREN- continuó Armin

Se escuchó el sonido del equipo tridimensional apareciendo Jean detrás nuestro. 

-¡Ey!, ¿Qué se supone  que estáis haciendo?-

-Jean, Eren esta aquí abajo- dijo Armin señalando un trozo de roca enorme 

-¿No se supone que Eren debería haberse transformado en titán?-

-No ha podido- dije y agaché la cabeza- Probablemente por que la Titan hembra es Annie-

-¿Qué?-

-Tenemos que sacarlo de aquí. Ayuda Jean- dijo Armin levantando la piedra 

-¿No pudo?... En que demonios estabas pensando, ¿¡Eren?!. Te dije que todos estaríamos contando contigo idiota-  dijo gritándole - ¿¡Esto es lo que obtenemos por poner el futuro de la humanidad y nuestra supervivencia en tus manos?! ...Marco...marco...-agachó la cabeza y comenzó a sollozar

-Basta Jean- dije abrazándole 

Estaba derrotado y yo también, pero no podíamos perder esta oportunidad. 

-CUIDADO- grité al ver como varios escombros venían justo hacia nosotros. 

Volamos por los aires cayendo al suelo de una manera dolorosa. Una vez me incorporé mire firme a Jean.

-Vamos- dije agarrando mis espadas

-A por esa maldita- accionó su equipo tridimensional y yo hice lo mismo.

Ambos nos usamos de cebo para llegar a una zona donde la capitana Hange le iba a tender una trampa. 

De un momento a otro miles de arpones comenzaron a atravesar el cuerpo de la titán. Pero de una patada consiguió liberarse y comenzar a correr. 

Comencé a ir a por ella. No podía ver ni oír nada más. Solo su cuerpo de titan escapando de nosotros, de mi. La ataqué, con toda mi furia. La di tres espadazos pero no eran suficientes. Su nuca. Necesitaba sacarla de ahí. Preparé toda mi fuerza en mis espadas y fui directa al punto pero ella fue mucho mas rápida que yo y de un manotazo me lanzo por los aires y caí en un agujero lleno de escombros. 

Dolía. 

Cuando pude abrir los ojos estaba sangrando. Tenía algo clavado en la tripa. Creo que era una estaca de madera. Cada vez que intentaba moverme salía más y más sangre. Este ¿era mi final? Sería injusto. No he podido hacer nada por Marco. No he sido capaz de vengar su muerte. Yo... no he valido para nada. 

Mi cabeza daba vueltas. Estaba perdiendo la conciencia. 

-Ayu..ayudadme, por favor-

A lo lejos vi como alguien se acercó corriendo hacia mí. Jean. 

-¡T/n!, te vi caer ¿Estás bien?- dijo acercándose a mi- No, dios, no-

-Jean, déjame aquí- dije bajito, me estaba costando hablar

Jean comenzó a mover varias piedras para intentar liberarme. 

-No digas estupideces t/n, ¿me oyes?. No pienso perderte- 

-No he podido vengarle Jean- tosí sangre

-No hables t/n, por favor. Te voy a sacar de aquí-

Jean colocó varios trapos alrededor de la astilla y mi cuerpo y me cargó en brazos como pudo. Perdí la consciencia.

-Aguanta...-noté caricias en mi pelo 

Era Levi.

-Por favor, aguanta- se le quebró la voz

Si pudiera hablar, si pudiera escucharme le diría que no se preocupe. Que ahora en su regazo me sentía mejor. Me sentía "como en casa". 

Pasaron horas, tal vez días, no lo sabía. Sólo sabía que me había desmayado por el dolor. Me pesaba el cuerpo y mis párpados les costaba abrirse. ¿Estaba viva?

-T/n- dijo una voz

La escuchaba muy lejos. 

-T/n- repitió de manera dulce

La escuchaba cada vez más cerca.