No sabía que la necesitaba

37. Te necesito viva, por favor

No pasó ni una hora que Armin llegó corriendo y avisando que había notado cierto movimiento en el bosque. No sabíamos si había sido producido por animales o humanos pero debíamos ser precavidos así que comenzamos a caminar buscando una nueva zona donde asentarnos pero finalmente se hizo de día. El plan iba a comenzar. 

Nos encontrábamos a escasos kilómetros de entrar en la ciudad. 

-T/n..-

-¿Si capitán?-

-Me gustaría que te quedases en los tejados-

-Pero capitán debo disfrazarme de Historia...soy la única que mide lo mismo que ella-

-Lo hará Armin, quiero que estés más retirada- 

-Pero...-

-Es una orden- dijo serio y frustrado

-Vale, capitán- dije triste- pero me gustaría que no me menospreciara, soy fuerte- dije dándome la vuelta y comenzando a caminar en otro sentido 

Levi me agarró del brazo e hizo que le mirase con un leve tirón. 

-Sé que eres fuerte y por eso te quiero viva- dijo serio pero preocupado 

Su mirada era muy intensa. 

-De...de acuerdo-

Algunos nos miraban, no se si por la intensidad del momento. 

-Yo también le quiero vivo capitán- agaché la cabeza

-Lo estaré- sonrió pícaramente y se acercó a mi oído- aun tengo que dormir contigo una vez más-

Un escalofrío recorrió todo mi cuerpo. Se separó y se dio la vuelta mirándome y volvió con el grupo. Estaba completamente roja.  No había conocido aún esa faceta suya pero definitivamente quería volver a verla. Sería estúpido no admitir que esa frase había hecho que me pusiera con el corazón a mil. Deseaba que volviéramos a dormir juntos, que volviera a hablarme así y que me mirara de esa forma de nuevo. 

Tras varias horas comenzó el plan. Me quedé retirada vigilando en todo momento por si necesitaban mi ayuda. Tal y como pensamos secuestraron al falso Eren (Jean) y a la falsa Historia (Armin). Esperaba que estuvieran bien, si les pasaba algo no me lo podría perdonar estando aquí a salvo. 

-T/n, ha dicho el capitán que me acompañes a la zona del secuestro- dijo Mikasa apareciendo de la nada 

-De acuerdo- 

Juntas nos colocamos en el tejado de una especie de fábrica. Se encontraban dentro Jean y Armin atados. En ese momento llegó el capitán.

-Situación- dijo 

-Van a descubrir pronto a Armin si siguen así capitán, además que no lo está pasando bien y me gustaría ayudarle- dijo Mikasa que estaba vigilando por dentro del edificio 

-De acuerdo, os dejo solas. Podéis con ellos, voy a revisar como va el carro de Eren e Historia- 

-Sí- dijimos al unísono y ambas comenzamos a descender por el interior de la fábrica para liberar a nuestros amigos.

Pov Levi 

Por culpa de los estúpidos que nos buscan no he podido dormir con ella. Mierda.

Juro que anoche no podía contenerme. Quería besarla, con todas mis fuerzas. Sus mejillas rosas, sus ojos verdosos mirándome, es perfecta. Es la persona que mejor me conoce y que mejor sabe que necesito a día de hoy con solo mirarme. 

"Me alegro de ser amigos". Soy imbécil. Un completo imbécil. Así no sería capaz de saber si también le gusto para poder lanzarme. 

 Comencé a hablar con ella. No quería que estuviera tan implicada en el plan. Aún no sabía realmente a quien nos estábamos enfrentando y quería disminuir las posibilidades de que pudiera sufrir daños o incluso perderla. No podía permitírmelo a estas alturas. 

Noté como le molestó mi decisión pero no entendía que lo hacía por protegerla. 

-Vale capitán, pero me gustaría que no me menospreciara. Soy fuerte-dijo triste y dándose la vuelta yéndose

Joder y tanto que lo era. Le agarré del brazo.

-Sé que eres fuerte y por eso te quiero viva- 

Te necesito viva, por favor. 

-De acuerdo... yo también le quiero vivo capitán- sonrió levemente 

Era mi oportunidad. Necesitaba ponerla nerviosa. Necesitaba provocarla. Ver su reacción ante mis atrevimientos. 

-Lo estaré- le sonreí y me acerqué a su oído-aun tengo que dormir contigo una vez más- dije de manera pícara 

Pude notar como sus músculos se encogían ante mis palabras y su respiración comenzaba a ser agitada aunque ella intentara ocultarlo. Bien, era la reacción que necesitaba para comenzar a acercarme más a ella. 

La miré antes de girarme, estaba sonrojada y yo solo tenía ganas de comérmela. Me daría igual la misión. No sabía que la necesitaba en mi vida pero que bien sienta que así sea. Por primera vez estoy sintiendo de verdad lo que es "estar vivo".