Ocho.

6.4K 697 78
                                    

En punto estaba Satoru esperando en el parque, mientras que cuando recibí su mensaje yo aún no salía del departamento.

-______________ sólo dile que podemos seguir siendo amigos –menciono Ieiri mientras me pasaba las llaves-

-Ah no, yo no terminaré con él por ti Ieiri, sólo daré un empujón, eso tienen que hablarlo ustedes, tú eres la que está saliendo con él, no yo –ella suspiro rendida, cerré la puerta principal y salí corriendo. Cuando llegué al parque él estaba sentado en una de las bancas de madera del lugar, había algunos niños pequeños jugando en los juegos infantiles, me acerqué a él rápidamente.

-Lo lamento –comenté posicionando mis manos sobre mis rodillas mientras tomaba un respiro, luego tomé asiento a su lado, llevaba sus gafas de siempre, no le veía los ojos.

- ¿De qué querías hablar conmigo? Me da ansiedad no saber -preguntó de inmediato, yo sonreí ante su ultimo comentario-

-No es nada malo –dije mirando al frente, veía a unos niños pequeños en los columpios mientras se balanceaban a la par- ¿Por qué quisiste empezar a salir con Ieiri? -noté como él de inmediato giró el rostro para mirarme detrás de sus lentes oscuros, yo no despegué la vista de los niños-

-Mmm -pensó- Es linda, sólo eso.

- ¿Sólo eso? -Ahora si lo comencé a observar, pude notar un poco de nerviosismo en sus acciones porque comenzó a mover su pierna derecha de arriba abajo-

-Es que, nos llevamos bien, no pienses nada malo, Ieiri es una gran mujer, pero... -lo interrumpí ya que estaba tratando de escusarse-

-Satoru no me des explicaciones a mi –me toqué el puente de la nariz, impaciente ¿por qué yo tenía que estar de intermediaria?- Iré al grano, Ieiri comenzó a salir contigo por un capricho y tú igual o ¿estoy equivocada? -él sólo negó con la cabeza afirmando lo que estaba diciendo, se supone que nada de lo que yo diría sería esto, pero no hay otra forma de hacerlo, los dos eran unos niños chicos- Bueno en primer lugar, no sé por qué simplemente quedaron de acuerdo en no tener algún tipo de relación, esto es bastante ridículo. Si yo quisiera sólo besarte, voy, te beso y listo, no me involucro más contigo.

- ¿Me quieres besar? -me interrumpió mientras elevaba las cejas tratando de coquetear conmigo, lo golpee en el hombro-

-Es una suposición -negué con la cabeza, él se rió- en fin, sólo hablen y ya

- ¿No estás molestas? -negué con la cabeza nuevamente negando lo que estaba preguntando, el suspiró aliviado- Así es mucho más sencillo, pensé que me golpearías o algo así.

-Distinto sería si ella estuviera loca por ti, pero yo sé que eso no es así -se quitó los lentes haciendo un gesto de drama-

-Auch –se puso una mano en el pecho fingiendo dolor, di vuelta mis ojos-

-Ay por favor no todas se mueren por ti, engreído –el carcajeo-

- ¿Segura? -comenzó a mover las cejas de arriba abajo mientras se acercaba lo suficiente para tratar de intimidarme, yo no lo estaba viendo, pero podía sentir su rostro a unos cuantos centímetros de mi mejilla por lo que con mi mano izquierda lo aleje de inmediato-

-Completamente segura. Si no fuera porque ahora me agradas te hubieses ganado una buena bofetada –me puse de pie, él imitó mi acción-

-Lo siento –se disculpó sinceramente- ¿Tienes algo que hacer ahora? -lo miré dudosa-

-No -respondí-

-Te invito a un café -metió ambas manos en sus bolsillos-

-Sólo si tu pagas –bromee- le escribiré a Ieiri para que venga con... -me interrumpió-

-No, sólo te estoy invitando a ti -miró a los niños que anteriormente yo estaba observando sonando totalmente despreocupado-

-Bueno -acepté, vi cómo los niños que estaban frente nosotros en los columpios eran retirados del lugar junto a sus padres, nosotros hicimos lo mismo, caminamos directamente al auto de Satoru para ir al café mientras le escribía a Ieiri que regresaría un poco más tarde.

Al día siguiente...

La semana comenzaba nuevamente, como buen día Lunes mis clases partían desde temprano por la mañana, Ieiri había conversado con Satoru y habían llegado a un acuerdo, seguirían siendo amigos y nada más por lo que luego de eso se pudo ver de inmediato como Satoru era nuevamente perseguido por algunas muchachas de la universidad tratando de llamar su atención. Ieiri le contó a Nanami que ya no seguía con Gojo, pude ver la leve felicidad que había en sus ojos ante tal buena noticia que inclusive a ambas nos invitó a comer helado a la hora del almuerzo.

- ¡____________ mira! -Ieiri acercó un papel a mis manos, era un concurso de pintura en acuarelas, lo arrugué mientras lo metía a mi bolsillo-

-Olvídalo. –ella me quitó el papel del bolsillo mientras lo estiraba nuevamente posicionándolo frente a mis ojos, volví a negar con la cabeza mientras caminaba a través de ella por el pasillo de la universidad ignorándola completamente, ella comenzó a seguirme a paso rápido-

-Vamos __________, hace mucho tiempo que no tomas tus pinturas -insistió-

-Por el mismo motivo no lo haré, hace muchos años que no pinto un cuadro y tengo otro motivo, no tengo tiempo ni inspiración.

-Pues búscala, el premio es una beca en el extranjero para perfeccionarte –La volví a interrumpir-

-Estoy estudiando Ingeniería, no tengo nada que ver con el arte... además eso era sólo un pasatiempo.

-Es en cuatro meses más, piénsalo -negué con la cabeza, esta vez ella guardó el folleto en su cartera para luego irse a su salón de clases. Sinceramente me quedé pensando en ese concurso, hacía mucho tiempo que no dibujaba nada, como se lo mencioné a Ieiri sólo era un pasatiempo que tenía para cuando pasaba por épocas de estrés, según ella mis pinturas eran preciosas, sin embargo, siempre quedaban guardadas o se las enviaba a mis padres para que decoren el living de la casa, pero no pasaba más allá de eso, sería interesante probar un poco de suerte en el concurso.

Al llegar al departamento busque en el mueble de mi pieza mis pinceles y las pinturas que aún conservaba, me quedé mirando un momento el recuadro blanco que posicione en un atril, estuve frente a él unos quince minutos intentando pensar en algo, pero nada salió de mi mente. Suspiré rendida y volví a guardar todo en su lugar, luego me tendí de espaldas sobre la cama cerrando los ojos, no había nada que me motivara a pintar de nuevo.

La cena estaba lista y me senté en la mesa junto a mis dos mejores amigos, Nanami había regresado al departamento antes de tiempo, yo sabía el motivo, también sabía por qué había decidido pasar fuera esta semana. Ellos se veían contentos, hablaban como nunca. De hecho, Nanami se veía particularmente motivado a hablar con mi amiga, sonreí al verlos así, si había alguien perfecto para Ieiri, ese era Nanami. Si bien es cierto él era particularmente serio, hacía que mi amiga pusiera los pies en la tierra sin perder la esencia. Espero que mi amiga mire un poco más allá de su nariz y se dé cuenta de que el hombre que ella tanto quiere de compañero de vida está justo sentado frente a ella.  

Trato equivocado | Satoru Gojo jjkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora