Capítulo 15

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La pequeña se había despertado después de que ellos hubiesen terminado de tener intimidad. Prepararon y merendaron los tres juntos, antes de ponerse a jugar con la pequeña. La joven se alegraba bastante de que él hubiese vuelto antes, ya que la pequeña lo echaba de menos cuando no estaba en la casa y era obvio que a la pequeña no le servía de mucho que se viesen a través del teléfono. Después de darle la cena, la pequeña se había quedado dormida debido a todo el ajetreo que había tenido aquella tarde, así que estando ya bañada, la metieron en la cuna y la arroparon.

Antes de irse al salón habían conectado el escucha bebés y ellos se habían marchado al salón. Pedirían algo de cenar, ya que a ninguno de los dos le apetecía cocinar. Sasuke había pedido una pizza, la cual tardaría poco en llegar, ya que el establecimiento estaba cerca del apartamento. Las había echado demasiado de menos a las dos, para él ellas eran su hogar no una casa en sí.

-Esta mañana me llamó el contratista- hizo una leve pausa mientras que se sentaba en el sofá al lado de ella-. Me ha dicho que la casa ya está terminada.

-Como acordamos solo quedará cambiar la cerradura de las puertas, ¿no? -Preguntó al joven.

-Si, quedé mañana con el cerrajero a primera hora. También me ha llamado mi madre, quieren llevar mañana a Aeri al zoo, le he dicho que sí, ya que así podemos aprovechar e ir llevando cosas.

-Es buena idea, podríamos empezar por mi apartamento que es el más cercano a la casa - concluyó la joven viendo como Sasuke asentía-.

-Tendríamos que ir también a comprar los muebles que nos faltan y los que queremos tener nuevos -pronunció él antes de ser interrumpido por el timbre de la puerta-.

Era la pizza, por lo que, mientras que él iba a por ella, ella iría a por servilletas y a por la bebida. Aunque no lo demostraban, los dos se encontraban sumamente felices de por fin tener listo su hogar, para ellos era muy importante tener un lugar como el que habían escogido. Era una forma de avanzar en su relación, ya que ya no tendrían cada uno un apartamento, sino que tendrían una casa y eso era realmente maravilloso. Habían acordado que ese dinero iría destinado a una cuenta bancaria para los estudios de su hija, no porque les hiciese falta, sino porque era algo en lo que invertirlo y que mejor que en la educación de su hija.

Era obvio que mientras que la casa no estuviera con todos los muebles y con todo colocado no iban a irse a vivir allí del todo. Era algo que ya habían hablado y a lo que los Uchihas habían ofrecido su casa mientras lo colocaban todo. Ninguno se podía quejar de lo buenos que eran ambos con ellos. A Sasuke y a Hinata no les molestaba su hija, pero los Uchiha sabían que para ellos sería más sencillo hacer todas esas gestiones si no la tenían, así ellos también tenían la posibilidad de pasar más tiempo con su pequeña nieta.

Ambos cenaron y después de recogerlo todo fueron a acostarse, tenían que recargar fuerzas para el día que les esperaba. Antes de acostarse habían pasado a ver como se encontraba Aeri y se quedaron más tranquilos al ver que se encontraba bien y dormida aún. En esos momentos, no solía despertarse por la noche, pero aun así tenía el escucha bebés en un volumen alto por si se despertaba asustada o por cualquier otra cuestión.

Por la mañana, Sasuke se despertó primero, Hinata era bastante dormilona, pero debía reconocer que tenía motivos para estar cansada todos los días. Pasó a ver a la pequeña y ella se estaba despertando, por lo que se acercó a la cuna para acariciarle la barriguita mientras despertaba, ya que le encantaba y así no lloraría al despertarse. Cuando ya despertó del todo, vio a su padre y le sonrió mientras que estiraba sus bracitos hacía él para que la tomase en brazos.

La tomó en brazos y caminó con ella hacia la cocina, era hora de preparar el desayuno y si Hinata no se había despertado para cuando terminase, tendría que ir a llamarla para que se despertase, ya que en un par de horas había quedado con el cerrajero y tenía que llevar antes a Aeri a casa de sus padres. Preparó primero el desayuno de la pequeña y mientras se enfriaba un poco preparó el café para ellos. Una vez que se enfrió le dio el desayuno a la pequeña, a la cual al terminar dejó en su parque de juegos y caminó hacia la habitación en busca de su futura esposa.

Nuevas aventuras (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora